viernes, 31 de julio de 2009

3º Capitulo

Rebeca y Luca estaban en la cocina preparando el desayuno.
*Rebeca: ¿No has notado a Sonohrina un poco rara?
*Luca: Sí, pero ella me dijo que estaba bien.
*Rebeca: Ella no está bien...
En ese momento, llegó Sonohrina un poco molesta. Se sentó en una silla.
*Rebeca: ¡Hola Sonohrina! ¿Qué pasa? ¿Por qué estás así de molesta?
*Sonohrina: Diego no deja de insistirme que vaya al médico. Yo estoy bien. Me enojé con él por insistente, por terco. Yo no quiero ir al médico.
*Luca: Lo hace porque te ama y quiere que estés bien.
*Sonohrina: Yo también lo amo, pero estoy bien.
*Rebeca: Sonohrina, Diego tiene razón. Hoy vamos al médico...
*Sonohrina: No Rebeca, tú también te pones insistente en llevarme al médico. Estoy bien.
*Luca: Sonohrina, tú no estás bien. Se nota mucho.
*Sonohrina: Bueno... ¡Ay está bien! Vamos al médico y se quedan tranquilos.
Luego de desayunar; Sonohrina, Diego, Luca y Rebeca dejaron a sus hijos con los señores Fainello y se fueron a la clínica. Los niños creían que eran diligencias aburridas y no sabían que Sonohrina iba al médico. Le hicieron los exámenes correspondientes y los resultados estarían listos al día siguiente. En el carro, Sonohrina comenzó a sangrar por la nariz. Perdía mucha sangre cada vez que sangraba por la nariz y por eso se desmayaba.
*Diego: Sonohrina, ¿es mi imaginación o cada vez que sangras pierdes más sangre que la vez anterior?
*Rebeca: Diego, ella no controla su derrame de sangre.
*Sonohrina: Yo sé que estaré bien, así que no se preocupen tanto. No es para tanto.
*Luca: Bueno Sonohrina, no lo sabemos hasta no ver los resultados.
*Diego: Eso es verdad, Sonohrina. Yo sé que no controlas la cantidad de sangre que pierdes, pero fue sólo un comentario.
Esa noche fueron a cenar a un restaurante por el cumpleaños de Rebeca. Fue una cena un poco costosa, pero le cantaron el cumpleaños, comieron torta y la pasaron bien. Luego de cenar, Sonohrina, Rebeca, Luca, Diego y los niños veían una película en casa. Cuando terminó, cada quien fue a su cuarto para dormir porque ya era tarde. Sonohrina estaba por levantarse de la cama e ir al baño, pero Diego la abrazó y comenzó a besarla y acariciarla.
*Diego: Te amo, Sonohrina... (La besó y le subió un poco la camisa)
*Sonohrina: Dieguito, no me puedo quedar por mucho tiempo porque me quiero bañar...
*Diego: No, quédate un rato más... (La besó y le quitó la camisa)
*Sonohrina: (Sonrió) ¿Y si llegan los niños al cuarto? (Rio y lo besó)
*Diego: (La abrazó y la besó) Tienes razón...
Diego se levantó de la cama y cerró la puerta del cuarto con seguro. Volvió a abrazar a Sonohrina mientras la besaba. La acariciaba y enredaba sus dedos en el cabello de Sonohrina mientras sonreían y se besaban. La pasión se adueñó de ellos e hizo que se olvidaran de todo.
*Sonohrina: Dieguito... Dieguito... (Lo besó) Yo me voy a bañar, Dieguito...
*Diego: ¿Y si nos bañamos juntos?
*Sonohrina: Dieguito, mejor es no ponernos a inventar...
*Diego: (La besó) Ya estamos inventando... (Le besó el cuello) No me digas que no te gusta... (Le besó el escote)
*Sonohrina: (Rio) Sí... Me gusta... (Sonrió y lo besó) Pero me tengo que bañar, Dieguito...
*Diego: ¿Y por qué no quieres que nos bañemos juntos? (Le acariciaba el cuello)
*Sonohrina: Porque puede que te pongas travieso... (Sonrió)
*Diego: ¿Travieso? (Rio, le besó el vientre y se lo acarició con el dedo en forma de círculos pequeños buscando cosquillearla)
*Sonohrina: (Rio) Sí... (Rio) Dieguito... No me... (Rio) No me hagas... (Rio) No me hagas cosquillas... (Rio)
*Diego: Sí te hago cosquillas... (Siguió haciéndole cosquillas en el vientre) Te hago cosquillas porque te hace reír, y me gusta oír tu risa...
*Sonohrina: No... Dieguito... (Rio) En serio... (Rio) Detente... Detente... (Rio) Por favor... Dieguito... (Rio) ¡Dieguito... Ya...! (Gritó y luego rio)
*Diego: No voy a parar. (La besó) No voy a parar porque me gusta verte así... Riendo.
*Sonohrina: En serio, Dieguito, ya...
*Diego: Bueno, de acuerdo, ve a bañarte. (Se acostó en la cama) Yo voy a dormir.
*Sonohrina: De acuerdo. Hasta mañana, Dieguito... (Lo besó)
*Diego: Hasta mañana, Sonohrina... (La besó) Disculpa que te termino así una noche tan linda para nosotros, pero tengo mucho sueño...
*Sonohrina: Tranquilo, Dieguito.
Ambos se despidieron con una sonrisa y un beso de buenas noches. Sonohrina estaba en la ducha, pero Diego no se había dormido porque quería estar atento a cualquier emergencia. Cuando Sonohrina salió de la ducha, ella se vistió con su pijama, peinó y secó su cabello antes de dormir. Luego de eso, fue a la cama y se acostó junto a Diego, cerró los ojos y estuvo a punto de dormir cuando Diego la abrazó, logrando sorprenderla.
*Sonohrina: Creí que estabas durmiendo... (Rio y lo abrazó)
*Diego: Te digo la verdad, quería estar atento. Si te desmayabas iba a ayudarte (La besó) ¿Dormimos abrazados?
*Sonohrina: Bueno, está bien... (Lo besó) Te amo, Dieguito... (Lo besó)
*Diego: Yo también te amo, Sonohrina... (La besó)
Luego de un rato, se durmieron. Seguían abrazados, pero aún así dormían muy cómodos. Sonohrina comenzó a sangrar pero ninguno de los dos se dio cuenta.
Al día siguiente, Diego despertó y vio la sangre seca sobre su hombro izquierdo, se preocupó y despertó a Sonohrina sólo para asegurarse que estaba bien. Ella abrió los ojos y vio la sangre seca en el hombro de Diego y se preocupó mucho.
*Sonohrina: Perdóname, Dieguito... Yo no quise hacerlo...
*Diego: Yo sé, Sonohrina. Tranquila... No te preocupes.
*Sonohrina: Dieguito... (Comenzó a llorar) ¡Dieguito... Yo quiero saber qué tengo!
*Diego: Lo sabremos... (La abrazó) Sonohrina, no llores... Todo estará bien...
*Sonohrna: Ojalá, Dieguito... (Dejó de llorar) No olvides que te quiero. (Lo abrazó) Te amo, Dieguito...
*Diego: Yo también, Sonohrina. Te adoro... (La besó)
*Sonohrina: No quiero perderte, Dieguito... No quiero morir y dejarte aquí solo.
*Diego: No digas eso, Sonohrina. Tú no te vas a morir. Todo va a estar bien... (La besó) Te amo...
*Sonohrina: Yo también, Dieguito...
Diego se fue a bañar mientras Sonohrina despertó a los niños. Luego, hacía el desayuno junto con Rebeca mientras tenía a Diego Luca sobre su hombro izquierdo. El pequeño aún tenía su chupón en la boca.
*Rebeca: ¡Qué tierno se ve Diego Luca con su chupón en la boca!
*Sonohrina: Sí... ¿Tienes hambre? (Miró a Diego Luca)
Diego Luca la miró a los ojos sin responder y la abrazó. Sonohrina volvió a preguntarle y Diego Luca asintió sin decirle nada. Sonohrina le dio su biberón y lo sentó en su silla para que se desayunara.
*Rebeca: ¿Y Diego?
*Sonohrina: Está bañándose.
*Rebeca: Luca también. Disculpa que pregunte, ¿por qué gritaste anoche?
*Sonohrina: (Rio) Porque Diego me estaba haciendo cosquillas y no quería parar... (Rio) Rebeca, yo lo amo... Me hace tan feliz...
*Rebeca: Y se ve que él te ama. Los felicito realmente porque tienen unos hijos muy lindos.
*Sonohrina: Gracias, tus hijas también son muy lindas.
*Rebeca: Gracias...
En ese momento, Luca entró a la cocina para desayunar y al rato llegó Diego. Pudieron desayunar tranquilos y como una gran familia. Luego de eso, Diego y Sonohrina fueron a la clínica para saber los resultados del análisis de sangre que le hicieron a Sonohrina. Se dictaminó que todo andaba bien.
*(Médico): Quizás ella tenga anemia. Le recomiendo que consuma alimentos con hierro y vitaminas para que se recupere.
*Sonohrina: (Sonrió) ¿Viste que no era nada horrible...?
*(Médico): Bueno, pero tienes que cuidarte porque se puede convertir en un cáncer o algo peor...
*Diego: No se preocupe, doctor. Yo la cuido y se va a recuperar.

miércoles, 29 de julio de 2009

2º Capitulo

Reaccionó luego de diez minutos queriendo ir a bañarse. En el baño se quitó la camisa, pudo notar en su reflejo frente al espejo la presencia de un moretón muy grande y marcado en el brazo. Se asustó porque no sabía su causa. Entró a la bañera e intentó quitarse el moretón, pero no pudo. A los cinco minutos en la ducha, Sonohrina se desmyó dentro de la bañera, sangraba por la nariz. Diego entró en el baño para lavarse las manos. Vio la ropa de Sonohrina y escuchó el agua dentro de la bañera.
*Diego: Sonohrina, mañana vamos a cenar en un restaurante por el cumpleaños de Rebeca.
Diego no recibió respuesta. Le pareció extraño, abrió la puerta de la bañera y vio a Sonohrina acostada en el suelo y el agua mezclada con sangre. Rápidamente la alzó, la cubrió con la toalla y la llevó a la cama. La hizo reaccionar.
*Diego: ¿Estás bien?
*Sonohrina: Sí, muy bien... No te preocupes, Dieguito...
*Diego: Te encontré sangrando en la bañera ¿Te sientes bien?
*Sonohrina: Sí...
*Diego: Es conveniente que vayas al médico. No creo que sea normal eso.
*Sonohrina: No lo necesito, Dieguito. Yo estoy bien.
*Diego: Sonohrina, me preocupas en serio y no quiero que vuelva a pasar algo parecido ¿Desde cuándo estás sangrando?
*Sonohrina: Primera vez. No volverá a pasar, en serio.
*Diego: Cambiando de tema, mañana vamos a un restaurante a cenar por el cumpleaños de Rebeca.
*Sonohrina: De acuerdo...
Diego Luca estaba viendo la televisión acostado en su cama mientras tomaba su leche. Sonohrina entró a su cuarto.
*Diego Luca: (Sonrió) ¿Cómo se llama el nuevo bebé?
*Sonohrina: Por ahora no lo sé... Diego Luca, por ahora no viene un nuevo bebé. Tú ya eres mi bebé... (Lo abrazó)
Diego Luca vio el moretón que tenía Sonohrina en el brazo. Sonohrina le acarició la cabeza.
*Diego Luca: ¿Qué tienes en el brazo? (Preocupado)
*Sonohrina: No sé cómo me pasó eso. Me salió solo porque no me he lastimado.
Diego fue al estudio para practicar con Luca las canciones que cantarían en el concierto. Los niños entraron al estudio porque querían ver las prácticas en vivo.
*Elisa: Papá... Muy bien. (Abrazó a Luca)
*Diego: ¿Tú las diferencias?
*Luca: Claro, son mis hijas.
*Mateo: Sí. María Alejandra es más alta que Elisa.
*Diego: Yo las veo iguales.
*Luca: Pues no. Cada una tiene sus diferencias.
*Milagros: Elisa habla más que María Alejandra. Son diferentes.
*María Alejandra: Tengo hambre, ¿cuándo cenamos?
*Diego: (Rio) Habla menos, pero es clara al hablar.
*Diego Luca: Yo también tengo hambre.
*Luca: En un rato cenamos...
Mientras eso sucedía, Sonohrina estaba en el baño empolvándose el moretón del brazo. Rebeca la vio y no entendió por qué se empolvaba el brazo.
*Rebeca: ¿Qué haces?
*Sonohrina: Me cubro este moretón que no entiendo cómo apareció.
*Rebeca: A verlo...
Al verlo, Rebeca recordó el moretón que tenía un tío suyo que murió cuando ella tenía doce años. Su tío tuvo que estar en la clínica y murió.
*Rebeca: Te recomiendo que vayas al médico, es muy grande y no parece normal.
*Sonohrina: No te preocupes, Rebeca. Dieguito me dijo lo mismo, pero estaré bien, estoy bien.
*Rebeca: Espero.
*Sonohrina: Ni una palabra de esto a Dieguito, por favor.
*Rebeca: De acuerdo.
Sonohrina fue al estudio para avisar que la cena ya estaba lista. Los niños fueron corriendo a la cocina para comer. Diego y Luca se quedaron en el estudio.
*Luca: ¿Ustedes piensan tener más hijos?
*Diego: Diego Luca quiere un hermano menor y no deja de hablar sobre eso.
*Luca: He notado a Sonohrina muy diferente... ¿Todo está bien?
*Diego: Sí, más que bien.
*Luca: En su mirada hay algo diferente y no se ve tan feliz como era antes.
Diego se quedó callado mientras Luca salía del estudio. La cena estuvo muy buena, después de comer todos se fueron a atender sus asuntos. Luca no salió de la cocina y no dejó a Sonohrina salir de la cocina luego de lavar los platos.
*Luca: Sonohrina, ¿te sientes bien?
*Sonohrina: Sí... ¿Por qué?
*Luca: Porque te noto diferente y como triste. Tú no eres así y me preocupas.
*Sonohrina: Luca, yo estoy bien. (Sonrió) Deben ser ideas tuyas...
Sonohrina se fue a la habitación de los niños sin dar mucha explicación de su estado. Cada niño tomó su leche antes de dormir.
*Diego Luca: ¿Y cuándo vamos a ir a Venezuela?
*Sonohrina: No lo sé, quizá pronto vayamos a visitar Caracas.
*Mateo: Yo quiero ir.
*Milagros: Yo también.
Luego de un par de horas, todos en a casa Fainello dormían. Sonohrina comenzó a sangrar por la nariz sin darse cuenta. A la mañana siguiente, Diego despertó y abrazó a Sonohrina y le besó el cuello. Ella no reaccionó, Diego vio una mancha de sangre en la almohada y trató de despertar a Sonohrina.
*Diego: Sonohrina, no puedes seguir así... Vamos a la clínica para que te hagan unos exámenes y saber por qué sangras así...
*Sonohrina: Yo estoy bien, Dieguito. Yo no me siento mal.
*Diego: Si estuvieras bien, no sangrarías por la nariz. Tú no estás bien, Sonohrina, tienes algo y no quieres asumirlo.
*Sonohrina: No es culpa mía, Dieguito; no me controlo.
*Diego: Yo sé que no es culpa tuya, Sonohrina; pero te aconsejo que vayamos al médico.
*Sonohrina: Dieguito, no quiero que gastemos mucho dinero en exámenes médicos, dirán que estoy bien.
*Diego: Sonohrina, por favor, es por tu bien.

1º Capitulo

Pasaron cuatro años, Diego Luca estaba cumpliendo cuatro años y lo celebró con una fiesta de cumpleaños ese fin de semana, sus amigos del jardín de niños fueron invitados y la pasaron muy bien. Hubo música en vivo, ya que Diego y Luca tomaron sus guitarras y comenzaron a cantar. La torta era de chocolate.
*Diego: ¿Estás contento por tu cumpleaños?
*Diego Luca: Sí.
*Diego: (Lo alzó) Mi pequeño campeón, me alegra que te haya gustado.
*Diego Luca: No soy pequeño. Ya soy grande...
*Diego: (Sonrió) ¿Sí?
*Diego Luca: Sí, ya tengo cuatro...
Diego sólo rio y lo abrazó. Diego Luca estaba muy contento y no dejaba de repetir que era grande porque había cumplido cuatro años.
Esa noche, Sonohrina estaba leyéndole un cuento a Diego Luca después de tomar su leche y antes de dormir.
*Diego Luca: Mami...
*Sonohrina: Dime...
*Diego Luca: ¿Cómo nace un bebé?
*Sonohrina: Luki, hay que ir a la clínica para que el doctor saque al bebé del vientre de su mamá...
*Diego Luca: ¿Y qué es el vientre?
*Sonohrina: La panza, como tú lo llamas. La barriga, la panza...
*Diego Luca: La panzita...
*Sonohrina: Sí. Es eso.
*Diego Luca: ¿Y cómo hacen para que esté dentro de la panzita de la mamá?
*Sonohrina: (Se ruborizó) Bueno, dentro del vientre de las mamás hay una semilla muy pequeña que crece con el amor de los papás y se convierte en un bebé. Luego hay que sacarlo de adentro para que nazca.
*Diego Luca: Gracias. Buenas noches... (La abrazó y le besó la mejilla)
Luego de eso, Sonohrina fue al cuarto para dormir. Vio a Diego durmiendo, se acostó a su lado y le acariciaba el cabello. Diego se despertó.
*Sonohrina: No quise despertarte, lo siento.
*Diego: No importa. Dime, ¿los niños te dijeron qué quieren para navidad?
*Sonohrina: No. Dieguito, todavía falta mes y medio. Ya pensarán en lo que quieran...
*Diego: ¿Y tú qué quieres?
*Sonohrina: Seguir casada contigo y no tener discusiones ¿Y tú?
*Diego: Quererte mucho y que me quieras.
Se dieron un beso de buenas noches y se durmieron.
Al día siguiete, Sonohrina estaba sirviendo el desayuno y sintió un dolor muy fuerte en las piernas, creyó que había dormido incómodamente. Fue al cuarto y se acostó en la cama, se sentía mareada y le dolían mucho las piernas. Diego entró al cuarto y vio a Sonohrina acostada, estaba muy pálida, se acercó a ella y le acarició la frente.
*Diego: ¿Qué tienes, Sonohrina?
*Sonohrina: Me duele todo... Estoy mareada y me siento mal... Pero estaré bien, Dieguito...
*Diego: Descansa...
*Sonohrina: ¿Y quién va a cocinar el almuerzo?
*Diego: Yo puedo ordenar comida a domicilio. No te preocupes, Sonohrina. Duerme y relájate, puede que estés muy tensa.
Sonohrina se durmió y pudo relajarse cinco horas, se sintió mejor. Vio a Diego Luca jugando en la sala con Milagros, Mateo, María Alejandra y Elisa. Se quedó mirando lo que hacían y vio que jugaban inocentemente.
*Diego Luca: Mateo y yo nos vamos a Venezuela y Elisa nos recibe en el hotel, María Alejandra y Milagros son nuestras esposas...
*Milagros: Yo quiero ser la mamá y que Elisa sea mi hija.
*Diego Luca: Bueno, eres la esposa de Mateo... ¿Elisa, tú quieres ser la hija?
*Elisa: Sí.
*Diego Luca: (Miró a Sonohrina) ¿Cómo te sientes, mami?
*Sonohrina: Bien... (Sonrió) Gracias por preguntar.
*Mateo: ¿Quieres jugar?
*Sonohrina: De acuerdo...
Fueron al jardín de la casa y jugaron a las escondidas. Jugaron toda la tarde. Diego vio que Sonohrina se sentía mejor y la veía sonriendo mientras ella jugaba alegremente con los niños, vio que ellos la querían y que ella era feliz compartiendo y jugando con ellos, se conmovió al verlos felices.
*Diego: Te agradan los niños, ¿verdad Sonohrina?
*Sonohrina: Sí, veo que me hacen sentir feliz...
*Diego: (Mirando a sus hijos) ¿Quieren tener un hermano o una hermana? (Rio)
*Milagros: Sí...
*Mateo: ¿Otro? Bueno...
*Diego Luca: Sí, sería bueno...
*Sonohrina: (Se ruborizó) ¡Diego! (Sonrió) Si me alcanzas, estaré de acuerdo con la idea de otro bebé. (Rio)
*Diego: ¿En serio? (Rio) Acepto...
Diego corrió tras Sonohrina buscando alcanzarla y hacerla cumplir su penitencia. Logró alcanzarla, se acostaron en el suelo y comenzaron a rodar mientras reían y se besaban, se acariciaban mientras rodaban abrazados.
*Diego: Te alcancé, le daremos otro hermano o hermana a los niños... (Rio y la besó)
*Sonohrina: Dieguito... (Sonrió y lo besó)
No dejaban de mirarse dulcemente, acariciarse, besarse, abrazarse y sonreír. Se sorprendieron de lo hermoso que era su amor. Diego comenzó a hacerle cosquillas a Sonohrina y ella no dejaba de reír. Diego la besaba mientras le hacía cosquillas en el vientre.
*Sonohrina: Ya... (Rio) Ya... Dieguito... Ya... (Rio) No puedo... (Rio) Respirar... (Rio)
Diego no le dijo nada y siguió haciéndole cosquillas mientras Sonohrina no dejaba de reír, hacía mucho para tratar de detenerlo y no podía. En ese momento, llegaron Rebeca y Luca del mercado.
*Luca: Diego, ¿qué haces? (Rio) Te vo muy entretenido...
*Diego Luca: Están convirtiendo la semilla en un bebé porque queremos tener más hermanos... (Sonrió)
*Rebeca: ¡Diego Luca! (Rio)
*Milagros: Sí, están haciendo un bebé y nosotros estamos viendo cómo lo hacen...
Luca rio y entró a la casa acompañado por Rebeca.
*Rebeca: ¡Qué gracioso es Diego Luca! (Rio) Se le ocurren unas cosas... No sé cómo hace...
*Luca: Es ingenioso, creativo y astuto. Incluso más que los demás.
*Rebeca: Sí, es verdad...
Diego seguía haciéndole cosquillas a Sonohrina y se detuvo luego de cinco minutos porque sonó su celular. Sonohrina se levantó del suelo y fue al cuarto, cayó desmayada en la cama.

lunes, 27 de julio de 2009

Como broche de oro...

Asi se ven las gemelitaaass!!!


Milagros

Mateo
Hola lectores de "Sogno Realizzato". Primero que todo les agradezco su paciencia mientras esperaban las publicaciones, debía cumplir con compromisos personales y profesionales. Quisiera agradecerles por haber leído así sea una letra del proyecto. Le agradezco al "equipo de ayuda". (Gente que aportó ideas, traducido, comentado, recomendado y/o comunicado el proyecto, a la persona que haya leído todo y done el photoshop para hacer los detalles de la imagen oficial). Un agradecimiento y dedicatoria muy especial a Luca y Diego Fainello (Los chicos de Sonohra) por ser mi fuente de inspiración para la realización de la novela, sin ellos esto no sería.

-Próximamente la novela será publicada en inglés y en italiano por este mismo medio.

-Muchos se preguntan "¿Cómo se llama Sonohrina?"... Aquí les digo la respuesta, seré buena, (t.n.)... ¿Por qué? Significa "Tu Nombre". Personaje de la novela para identificarse con ella. (Si le ponía un nombre en serio la odiarían, creo)

-La web novela también se puede conseguir en facebook buscando "Sogno Realizzato-Sonohra (Web Novela)". Este proyecto tiene Copyright, por esta razón todos los web site donde se encuentre debe ser notificado previamente a la autoría (Para evitar usurpaciones en los créditos).

-Opiniones o inquietudes escriban a: sogno.realizzato_shwn@hotmail.com o también: Sogno Realizzato-Sonohra (Web Novela) (en facebook). Recibirán respuesta a la mayor brevedad posible por parte de la autora.

Gracias por seguir la web novela. Es para todos(as) ustedes y para Sonohra con todo el empeño del mundo... haha... Gracias, gracias... Espero les haya gustado. Nos vemos en la version 2.0.

Video de Hasta Pronto!! xD

60º Capitulo

Dos semanas después, Rebeca decidió ir a la casa Fainello porque quería comunicarle a los señores Fainello sobre su embarazo, se sentía un poco nerviosa porque no sabía qué pensarían. Diego abrió la puerta luego de escuchar el timbre.
*Rebeca: Diego ¿Cómo estás?
*Diego: Bien, Rebeca ¿Y tú?
*Rebeca: Bien... Bueno, no sé si ya lo sabes... Pero serás tío...
*Diego: ¡Wow! ¿En serio? (Como si no supiera nada) Si quieres, pasa. (Sonrió)
*Rebeca: Diego, gracias...
Rebeca estuvo por desmayarse y Diego la abrazó para que no se lastimara cuando cayera al piso. Sonohrina vio eso desde la ventana y pensó que a Diego le gustaba Rebeca, como ella no sabía quién era pensó que Diego andaba con Rebeca a sus espaldas. Entró a la habitación llorando y comenzó a empacar. Rápidamente salió de la casa, pero sin darse cuenta, dejó a los bebés adentro de la casa.
*Diego: ¿Ya estás mejor?
*Rebeca: Sí, Diego. Gracias.
Diego vio a Sonohrina enojada y con unas maletas. Se preocupó y fue detrás de ella para tratar de hablar y saber qué le pasaba. Ella caminaba muy rápido para que Diego no la alcanzara.
*Diego: Sonohrina, espera... ¿Adónde vas con...? (Le tomó la mano)
*Sonohrina: No me toques... ¡No me toques porque no quiero que me detengas! (Se soltó la mano)
*Diego: Sonohrina... No te pongas así, tú estás embarazada y te hace mal.
*Sonohrina: Pero a ti realmente no te importa si yo estoy embarazada o no. Te abrazas con cualquiera que llega a la casa y... No me busques... (Sintió una puntada) Yo no puedo botarte de la casa y por eso la que se va soy yo. Tú quédate en la casa.
*Diego: Sonohrina, no te vayas... Mira, te explico realmente qué fue lo que pasó...
*Sonohrina: ¡Yo no quiero nada! (Sintió una puntada más fuerte aún)
*Diego: Sonohrina, no te alteres, en serio te haces mal... (La abrazó) ¿Qué tienes?
*Sonohrina: ¡Nada! ¡Yo me quiero ir! (Sintió otra puntada muy fuerte y se arrodilló) ¡Ay...! (Empalideció)
*Diego: ¿Qué tienes, Sonohrina?
En ese momento, Rebeca fue hasta donde estaban Diego y Sonohrina porque se preocupó por ella y fue a ver qué le pasaba.
*Rebeca: ¿Qué le pasó?
*Diego: No lo sé. Se alteró y pensó en irse de la casa. Yo le dije que no se alterara tanto porque está embarazada y que puede hacerse daño a ella misma o al bebé...
*Sonohrina: ¡Mi bebé! (Abrazó a Diego)
*Rebeca: Tu hijo nace ahora, Diego...
Diego muy preocupado, pero a la vez ansioso, llamó a una ambulancia para que viniera al lugar donde ellos estaban y poder llevar a Sonohrina a la clínica. Sonohrina no soltaba a Diego hasta que llegó la ambulancia y ella sólo pudo tormarle la mano mientras la ambulancia avanzaba rumbo a la clínica. Ella no dejaba de llorar. Rebeca, Luca, los mellizos y los señores Fainello fueron también a la clínica pero en carros aparte. Al llegar atendieron a Sonohrina lo antes posible y Diego la acompañó en el parto.
*Sonohrina: (Llorando) Die... Dieguito... ¿Me perdonas?
*Diego: No tengo nada que perdonarte... (Le besó la mano) Tú puedes hacerlo, Sonohrina...
*Sonohrina: No... No puedo... Die... Guito... Me... (Gritó) Me duele mucho... (Le apretó la mano más fuerte) No te vayas... Yo... No me quiero morir sola...
*Diego: Lo que no puedes es morir ahora, Sonohrina. Nuestro bebé está por nacer y tú no vas a morir. (Le besó la frente) Tú puedes hacerlo, Sonohrina.
Mientras eso ocurría, todos esperaban en la sala de partos. Rebeca decidió comunicar a los señores Fainello la noticia de su embarazo. Ellos se alegraron y abrazaron fuertemente a Luca. Los bebés no entendían lo que ocurría pero reían alegremente. Luego de cinco segundos, la puerta de la sala de partos se abrió y todos vieron a Diego sudando pero muy feliz.
*Diego: Es... (Sonrió) Es hermoso...
*(Sra. Fainello): ¿Ya nació? (Sonrió)
*Diego: Sí... (La abrazó)
*Luca: ¿Y Sonohrina cómo está?
*Diego: Bien... Todo salió bien... (Lo abrazó)
*Rebeca: ¿Y cómo se llama el bebé?
*Diego: Sonohrina lo llamó Diego Luca...
Todos celebraron con abrazos y sonrisas el nacimiento de Diego Luca. Lo vieron en el cuarto donde ponen a los bebés luego de nacer y le tomaron fotos. Sonohrina dormía en la habitación que le habían asignado. Luego de un rato, Diego entró a la habitación y le besó la mano; ella no despertó pero Diego no le quitaba la mirada. Ya todos se habían ido porque no eran horas de visita en la clínica. Una enfermera entró con el bebé en una pequeña cuna. Horas después, Sonohrina despertó y vio al bebé, lo alzó mientras lo miraba a los ojos y se sorprendió porque era igual a como lo había soñado.
El tiempo pasó muy rápido. Luca y Rebeca se casaron luego del nacimiento de sus hijas gemelas María Alejandra y Elisa, Diego Luca crecía muy rápido y ya tenía nueve meses, mientras que Milagros y Mateo estaban por cumplir dos años. Sonohrina y Rebeca se hicieron muy buenas amigas y entre todos pudieron comprar una casa un poco más grande cerca de la casa Fainello; allí pudieron vivir todos juntos. En cuanto a Alejandra, siguió en contacto con Luca pero se casó con Miguel y vivieron en México muy felices junto a su hijo Bernardo.

sábado, 25 de julio de 2009

59º Capitulo

Diego tocó la puerta de la habitación de Luca para saber qué ocurría. Luca lo dejó pasar.
*Diego: Te noto diferente... ¿Qué tienes, Luca?
*Luca: Pasa que, según análisis médicos, Rebeca está embarazada y seremos padres...
*Diego: (Sonrió) Pero no tiene nada de malo.
*Luca: Diego, no hay espacio suficiente en la casa como para traerla a vivir para acá... Y no es sólo ella, tu tercer hijo y el mío también necesitan espacio...
*Diego: ¿Tú quieres seguir viviendo con nosotros?
*Luca: Sí.
*Diego: Entonces compraremos otra casa y ahí viviremos todos juntos.
*Luca: Diego, no tenemos el dinero suficiente. Tu tercer hijo, los mellizos y mi hijo van a producir muchos gastos.
*Diego: Será entonces entre todos. Pagaremos juntos la casa. Sonohrina no me ha dicho nada, pero no creo que quiera vivir así para toda la vida; imagino que querrá una casa nueva, como todo matrimonio.
*Luca: Veremos como hacemos.
Esa noche, la familia Fainello decidió cenar en casa y poderle cantar el cumpleaños a los bebés. Sonohrina sopló ambas velas porque ellos aún no sabían soplar, pero los abrazos fueron para ellos. Hubo también muchas fotos.
Al día siguiente, Luca se conectó para saber cómo estaba Alejandra. Habló un rato con ella y se enteró que había conocido a un mexicano y que estaba por irse a México para casarse con él.
*Luca: Te deseo suerte, Alejandra. Mi vida también ha cambiado un poco.
*Alejandra: Sí, eso pude ver en fotos. También te deseo éxito en tu futuro ¿Te vas a casar con ella?
*Luca: Sí, porque seremos padres. Ella está embarazada.
*Alejandra: Bueno, Luca, veo que cada uno tendrá que seguir su propio camino.
*Luca: ¿Seguiremos hablando?
*Alejandra: Eso espero...
*Luca: Alejandra, nunca te olvidaré. No me olvides...
*Alejandra: Te amo, Luca. Pero cada uno tiene que seguir su camino.
*Luca: Pienso lo mismo.
*Alejandra: Nos vemos, voy a salir.
*Luca: De acuerdo...
Alejandra se desconectó y fue al hotel Tamanaco para estar con Miguel. Al llegar, Miguel quiso invitarla a comer a un restaurante muy bueno al que él había asistido hace dos días, era un restaurante de comida americana, en un centro comercial, llamado Chilli's. Allá pudieron comer hamburguesas y siguieron conversando para conocerse mejor.
*Miguel: Alejandra... Perdóname, pero cada vez me gustas más... (Sonrió)
*Alejandra: También me gustas, Miguel... (Lo besó)
*Miguel: Me alegra saberlo... (La besó) Me quiero casar contigo, pero mejor nos conocemos mejor.
*Alejandra: Estoy de acuerdo. (Sonrió)
La pasaron muy bien el resto del día porque luego fueron a comer helado mientras caminaban por el centro comercial. Esa cita duró hasta la noche y cada quien tomó su rumbo.
Dos meses y medio después, en la casa Fainello aún era de madrugada y todos dormían, todos menos Sonohrina. Pensaba en cómo estarían sus amigos, parientes y familiares en Venezuela, se sentía realmente muy preocupada y quería hacerles saber que vendría a la familia un nuevo miembro. Sabía que el bebé estaba por nacer y aún no se le ocurría un nombre para ponerle. Le vino un nombre a la mente que le pareció gustaría mucho a Diego, así que lo despertó para comentárselo.
*Sonohrina: Dieguito, ¿ya pensaste en el nombre para el bebé?
*Diego: No... La verdad es que estoy muy cansado como para pensar en un nombre en este momento, Sonohrina.
*Sonohrina: ¡Pero es para el bebé...! Yo ya pensé uno y quiero saber qué piensas de ese.
*Diego: (Respiró profundo) Bueno, dime...
*Sonohrina: Pensé que me gustaría que el bebé se llame Diego Luca. Porque es el nombre de tu hermano junto con el tuyo.
*Diego: Sonohrina... (Sonrió) ¿No podías pensar en otro nombre?
*Sonohrina: Si a ti se te ocurre uno mejor, dímelo. Te cuento que Luca Diego no suena muy ordenado o algo así... Me gusta más Diego Luca.
*Diego: Diego Luca Fainello... Bueno, si tú quieres...
*Sonohrina: No es sólo si yo quiero, Dieguito. Tú también tienes que estar de acuerdo con el nombre que lleve nuestro hijo. Si no te gusta ese, piensa otro.
*Diego: Ahora que lo pienso, no suena tan mal. Se llamará Diego Luca Fainello. (La besó)
*Sonohrina: Bueno, vamos a dormir y hablamos mañana... (Lo abrazó)
*Diego: De acuerdo.
Ambos durmieron tranquilamente todo el resto de la madrugada. Sonohrina soñó que ya tenía a su bebé en brazos y que lo veía a los ojos.

miércoles, 22 de julio de 2009

58º Capitulo

A la mañana siguiente, Alejandra acompañó a Miguel a la disquera. No pudo evitar recordar a Luca cuando lo vio tocando su guitarra para poder demostrarle a los productores su gran talento. Ellos quedaron maravillados con la melodía que Miguel había tocado. Luego de esa diligencia, Miguel invitó a Alejandra a tomar un helado y poder conocerse mejor.
*Miguel: ¿Sabes? Quisiera hacerte feliz, Alejandra. Quiero llevarte a México conmigo y poder realizar una vida muy linda a tu lado.
*Alejandra: Me encantaría acompañarte, pero...
*Miguel: Alejandra, disculpa, pero tú me gustas mucho y para mí no hay "pero" que valga. Quiero ser feliz contigo... (La besó) Sé que voy muy rápido, pero tú me gustas...
*Alejandra: Tú también me gustas, Miguel... (Lo besó y sonrió) Está bien, acepto irme contigo a México. Desde que mi madre murió yo no tengo nada ni nadie aquí en Venezuela y también quisiera tener una vida hermosa contigo. Sí voy a México... (Lo abrazó mientras lo besaba)
Mientras todo eso ocurría, Diego, Luca y Rebeca estaban paseando por Torino antes de partir a Roma. La pasaron muy bien los tres juntos, pero aún así, a Diego le hacía falta Sonohrina. La extrañaba mucho. Al legar al hotel, Luca y Rebeca se fueron a su habitación, pero Diego decidió conectarse en ese momento y hablar con Sonohrina.
*Diego: ¿Cómo te has sentido hoy?
*Sonohrina: Bueno, bien...
*Diego: Te noto pálida, Sonohrina.
*Sonohrina: Es que me siento un poco mal. Dieguito, quisiera estar contigo...
*Diego: Yo también...
*Sonohrina: ¿Y Luca cómo está?
*Diego: Bien. Sabes que una amiga nos acompañó al viaje, bueno ella está ahora con Luca en su cuarto.
*Sonohrina: Ah, bueno...
*Diego: ¿Y los bebés?
*Sonohrina: (Sonrió) Demasiado lindos, Dieguito. Han crecido mucho y ya dicen más palabras. Ya los busco.
Sonohrina se levantó del sofá y fue al cuarto de los bebés para buscarlos y que Diego los vea. Ambos sonrieron cuando vieron a Diego saludándolos.
*Mateo: Pa-pa... Hola (Rio)
*Milagros: Pa-ma... (Miró a Sonohrina)
*Sonohrina: Milagros, dile a papi lo que me dijiste esta mañana... (Sonrió) Dile, So...
*Milagros: Pa-pa... (Sonrió)
*Sonohrina: ¡Dile, dile! (Sonrió) So...
*Milagros: AaAaAaAh... (Abrazó a Sonohrina)
*Sonohrina: (Rio y abrazó a Milagros) Debe ser que le da pena. Ella dice "Sonohra" cuando quiere.
*Diego: Sí, puede que sea eso... (Rio) ¿Ya les dijiste que serán hermanos mayores en poco tiempo?
*Sonohrina: No, aún no. Dieguito, apenas son cuatro meses. Esperaré un poco más.
*Diego: (Sonrió) ¿Puedo ver tu vientre por web cam?
*Sonohrina: Sí...
Sonohrina se levantó del sofá y subió un poco su camisa para mostrarle a Diego qué tal estaba su embarazo, se paró de perfil.
*Diego: ¿Es niña o niño? (Sonrió)
*Sonohrina: Dieguito, no te lo voy a decir aún... Cuando vuelvas a Verona sabrás la respuesta. (Sonrió)
*Diego: No es justo... (Rio)
*Sonohrina: Sí es justo... (Le mandó un beso) Te amo, Dieguito. Voy a dormir...
*Diego: De acuerdo. (Le mandó un beso) Dulces sueños para ti y el bebé...
Sonohrina apagó la computadora y se fue a dormir. Se acarició el vientre mientras cantaba una canción de cuna.
Dos meses después, una van blanca llegó a la casa Fainello, de donde bajó Diego. Sonohrina lo esperaba junto con los bebés, quienes estaban en la carreola. Su vientre se notaba muy hinchado.
*Sonohrina: (Lo abrazó) Hola, Dieguito... (Lo besó)
*Diego: (La besó) Me hicieron mucha falta. Traje un regalo para cada uno... (Sacó su maleta)
*Sonohrina: ¿Viniste solo?
*Diego: No, pasa que Luca está en la clínica.
*Sonohrina: (Preocupada) ¿Y por qué está allá?
*Diego: (Sonrió y la abrazó) Puede que la paternidad le haya llegado también a él.
*Sonohrina: ¡Qué bueno!
*Diego: (Le acarició el vientre) ¿Será niña o niño? (Sonrió) Ya quiero saber...
*Sonohrina: Será... (Lo besó) Un niño, Dieguito.
*Diego: (La besó) Sonohrina... (La besó) Te amo...
*Sonohrina: ¿Y no vas a desearle feliz cumpleaños a los mellizos? (Lo abrazó)
*Diego: (Alzó a cada uno) ¡Feliz cumpleaños, mis bebés lindos! (Besó las mejillas de cada uno)
*Milagros: Ah pa-pa... (Sonrió) Sonohra...
*Diego: ¡Mi princesita!
*Mateo: Br... Thadoa...
*Diego: ¡Mi campeón! Es "Sonohra" y no "Thadoa".
Diego, Sonohrina y los bebés entraron a la casa y Diego entregó a cada uno su regalo. A Sonohrina le compró un anillo con un diamante azul, al nuevo bebé le regaló una cobijita muy linda (Con un símbolo de nota musical), a Milagros le compró un peluche nuevo y a Mateo le regaló un carrito nuevo.
*Sonohrina: ¡Qué pena que no te compré nada, Dieguito! No te hubieses molestado tanto.
*Diego: No me molestó, Sonohrina. Tú estás a dos meses de darme un regalo muy lindo... (La besó) De hecho, esto que te regalé no se compara con lo que estás por darme... (La besó)
En ese momento, llegó Luca a la casa. Se sentó en el sofá, se veía muy cansado y estaba muy callado.
*Diego: ¿Qué pasó?
Luca no dijo nada y sólo miró a Diego con cara de quien dice "¿Y ahora qué hago?". Todo lo expresó con la mirada y luego se fue a su cuarto cerrando la puerta. Estuvo horas dentro de su cuarto haciendo o pensando cosas que sólo él sabía.

domingo, 19 de julio de 2009

57º Capitulo

Tres meses después, Sonohrina fue al médico para realizarse su chequeo mensual de embarazo, el bebé sería varón. Todo andaba muy bien, aunque Diego no pudo acompañarla porque estaba de viaje en Torino haciendo un concierto. Al salir de la clínica, fue a tomar un helado en la heladería cerca de casa. Mientras Sonohrina tomaba su helado, se abrió la puerta del local y entraron tres muchachos vestidos de negro seguidos por un montón de gente que gritaba, Sonohrina volteó a mirarlos y era nada más y nada menos que Green Day. Sonohrina se quedó impresionada y se acercó a ellos para saludarlos.
*Billie: ¡Oh... Estoy cansado y quisiera un helado de vainilla! (Se sentó en la silla)
*Mike: Sí, yo también. Bueno, se nota que en Italia nos quieren.
*Tré: ¿Nos quieren? Mueren por nosotros...
*Sonohrina: Hola... (Sonrió) ¿Green Day?
*Billie: Sí.
*Sonohrina: ¡Genial! ¿Cómo están?
*Tré: Agotados. Llegamos ayer y la gente nos ha perseguido a todos lados hasta hoy...
*Sonohrina: ¿Van a cantar aquí?
*Mike: Sí...
*Sonohrina: ¿Puedo sentarme con ustedes?
*Billie: Sí, linda. Siéntate.
Sonohrina estaba encantada con Green Day, eran uno de sus grupos favoritos, pero aún así se comportó.
*Mike: Eres diferente a las personas que están ahí afuera. No eres eufórica.
*Sonohrina: Los admiro, pero no me puedo alterar mucho porque estoy embarazada.
*Tré: ¿En serio? ¡Qué bien! (Sonrió y comió un poco de helado)
*Billie: ¿Y cómo se llamará el bebé?
*Sonohrina: Aún no lo sé. Tengo cuatro meses y es un varón...
*Mike: Ponle Mike... (Rio) Sería un orgullo para mí que tu bebé llevara mi nombre.
*Tré: ¡Lo llamará como quiera...! (Rio)
*Mike: Bueno... (Rio) Sólo bromeaba... (Rio)
Luego de comer helado, Green Day le dio un autógrafo a Sonohrina. Quedaron fascinados con ella. Ella muy contenta regresó a casa. No podía creer que había conocido a Green Day en persona. Al llegar a casa, llamó a Diego por teléfono para saber cómo estaba, no regresaría a Verona sino hasta luego de dos meses.
*Sonohrina: ¿Cómo estás?
*Diego: Bien ¿Y tú?
*Sonohrina: Bien... Bueno, espero te estén atendiendo bien...
*Diego: Sí...
*Sonohrina: ¿Comes cuatro veces al día?
*Diego: Sí...
*Sonohrina: ¿Te dejan dormir hasta que quieras?
*Diego: Bueno, a veces... (Rio) Es que tengo que practicar...
*Sonohrina: ¿Practicar qué?
*Diego: Tú sabes, las cosas para los conciertos, tengo que ir también a los medios de comunicación...
*Sonohrina: Sí, bueno...
*Diego: ¿Cómo están los bebés?
*Sonohrina: Bueno, se están portando bien.
*Diego: ¿Y cómo te sientes?
*Sonohrina: Deprimida... Dieguito, tengo muchas cosas que decirte, pero tiene que ser en vivo.
*Diego: ¿El bebé está bien?
*Sonohrina: Sí...
*Diego: ¿Entonces por qué estás deprimida?
*Sonohrina: Porque te extraño, ¿te parece poco?
*Diego: No... También te extraño, Sonohrina. (Sonrió)
*Sonohrina: (Sonrió) De no ser por mi embarazo, estaría allá contigo.
*Diego: Sí, bueno, no es tu culpa que no puedas venir... Tampoco del bebé... ¿Es niño o niña?
*Sonohrina: Esa es una de las cosas que quiero decirte a tu llegada... (Sonrió) Es una sorpresa...
*Diego: De acuerdo.
*Sonohrina: Hablamos, Dieguito. Yo voy a descansar.
*Diego: Sí, descansa y hablamos por Internet en un rato ¿Sí?
*Sonohrina: Está bien. Saludos.
La llamada terminó y Sonohrina fue a descansar mientras los bebés veían la televisión. Mientras eso ocurría, Diego, Luca y Rebeca (que los había acompañado porque Luca se lo pidió) arreglaban sus maletas para partir a Milano y hacer otro concierto en tres días; luego irían a Roma. Pasarían dos meses en conciertos por Italia y luego regresarían a Verona. Rebeca había decidido quedarse en Italia para estar con Luca.
*Luca: Y aún nos faltan conciertos... (Sonrió) ¿Qué te dijo Sonohrina?
*Diego: Está bien, pero ahora está descansando. Antes de regresar a Verona tengo que comprar cuatro regalos.
*Luca: ¿Por qué cuatro?
*Diego: Uno para Milagros, otro para Mateo, para Sonohrina y para el nuevo bebé.
*Luca: Bueno, de acuerdo... (Sonrió) Casi lo olvidaba, en dos meses los mellizos cumplen su primer año.
*Diego: Bueno, por eso es que les voy a comprar su regalo. A Sonohrina y al nuevo bebé no puedo dejarlos sin regalo.
*Luca: Tú adoras a esa mujer, definitivamente. Yo reconozco que es muy linda, pero tú mueres por ella.
Diego sólo rio mientras empacaba sus maletas para partir a Milano.
Desde Venezuela, Alejandra no se sentía muy deprimida porque sabía que Luca era feliz con Rebeca y al verla en fotos, supo que no era mala persona. Estaba cenando en una pizzería del C.C.C.T. Al rato de haber terminado su orden, el mesonero le entregó un papel que venía de una mesa vecina. "Hola, linda ¿Cómo estás?" Alejandra le respondió: "Bien ¿Y tú?". Se lo entregó al mesonero para que lo devolviera a la mesa de origen. Rato después, le llegó otro mensaje que decía: "Me llamo Miguel ¿Tú cómo te llamas?" Alejandra le respondió: "Alejandra... ¿Y cuántos años tienes?". Pasaron cinco minutos y el mesonero regresó con otro mensaje, que obviamente era de Miguel; "Tengo 25 años, ¿y tú?". Alejandra le contestó rápidamente "Tengo 24 años" porque estaba lista para comer su pizza. Diez minutos después, llegó un hombre apuesto y se sentó en la silla frente a ella. La miraba sonriendo, mientras ella no entendía por qué se había sentado ahí. No tenía palabras.
*Miguel: Me pareces muy linda, Alejandra. Soy Miguel, mucho gusto.
*Alejandra: (Sonrió) El gusto es mío.
*Miguel: (Sonrió) Vengo de Ciudad de México y casi no conozco Venezuela. Vine a Venezuela para tratar de promover mi primer CD como solista, la verdad es que soy principiante en el mundo de la música.
*Alejandra: ¿En serio? ¡Qué bien!
*Miguel: Sí. Quisiera saber si te gustaría ayudarme. Mañana tengo que ir a una emisora de radio para promocionar "Ángeles de papel", ¿quieres acompañarme?
*Alejandra: De acuerdo ¿A qué hora?
*Miguel: Mañana a las 10:15 de la mañana. Nos vemos en el hotel Tamanaco ¿Está bien?
*Alejandra: Sí... Te acompaño...
*Miguel: ¿Sin problemas si como aquí contigo?
*Alejandra: Sin problemas. En absoluto. (Sonrió)
Miguel y Alejandra estuvieron conociéndose un poco más, hablaron de sus relaciones anteriores y de intereses en común. Miguel se enamoró de Alejandra pero no le diría lo que sentía por ella tan deprisa. Luego tendría suficiente tiempo para decírselo. Alejandra también se sentía muy contenta y cómoda con Miguel.

jueves, 16 de julio de 2009

56º Capitulo

Llegaron a casa y se acostaron a dormir porque estaban muy cansados. Luca despertó al rato y fue al cuarto de Diego y Sonohrina porque quería hablar con ella. Sonohrina despertó y se fueron a la sala para hablar.
*Luca: Sonohrina... ¿Tú le dijiste algo a Diego que no es?
*Sonohrina: Le he dicho tantas cosas que ni idea de qué hablas...
*Luca: De nuestro supuesto romance. Yo quiero aclararte que eres muy linda y todo, pero lo nuestro no puede funcionar porque tú eres la esposa de mi hermano y respeto su matrimonio.
*Sonohrina: No sé de qué estás hablando. Pero te digo que yo estoy casada con tu hermano y es lógico que yo respete mi propio matrimonio. Aparte de eso, estoy embarazada...
*Luca: Sí, yo sé y por eso nunca te lo dije... (La abrazó)
*Sonohrina: ¿Qué cosa? (Se sintió nerviosa y fría)
*Luca: Desde hace un tiempo, me di cuenta que... No funcionaría, pero... Sonohrina, me empezaste a gustar desde que te empecé a extrañar durante tu viaje de luna de miel con Diego.
*Sonohrina: (Luego de cinco segundos de silencio) Luca, perdóname...
*Luca: No, perdóname tú a mí...
*Sonohrina: No, tú a mí porque yo no puedo corresponderte, Luca... Lo siento.
*Luca: Bueno, ya te lo dije y sé que no resultará, pero no podía quedarme con este sentimiento dentro de mí sin comunicarlo. Diego no tiene por qué enterarse. Yo no te voy a hacer nada ahora.
*Sonohrina: Ni yo... Bueno, duerme bien. (Sonrió)
*Luca: Sí, bueno... Igual tú. Descansa porque lo necesitas.
*Sonohrina: Gracias...
Cada uno se fue a su habitación para dormir. Sonohrina miraba a Diego dormir y sintió vergüenza de no poder decirle muchas cosas. Lo abrazó y se acostó a dormir.
Al día siguiente, Diego despertó y encontró a Luca llorando en la sala. Se acercó a él muy preocupado.
*Diego: ¿Qué tienes, Luca?
*Luca: No quiero hacer sufrir a nadie, y creo que Alejandra está sufriendo por culpa mía. Ya le dije que no viajaré a Venezuela para casarnos.
*Diego: Pero no te pongas así... ¿Qué pasó? ¿Por qué te retrocediste en tus planes?
*Luca: Bueno porque... Porque... Es por Rebeca...
*Diego: ¿Y qué tiene que ver Rebeca?
*Luca: Que a mí me gusta Rebeca, Diego...
*Diego: Ah... Te gusta Rebeca... Bueno, Luca ¿Y se lo has dicho?
*Luca: No, aún no... Sé que debería, pero...
*Diego: Dícelo.
*Luca: Bueno... Ya será para cuando vuelva a verla.
*Diego: Yo la veré hoy, si quieres únete y le dices... Claro, en privado...
*Luca: Diego... Siento que quiero decirte algo, pero me vas a odiar...
*Diego: Dime, no te voy a odiar...
*Luca: Pensé en no decirte nada, pero llegué a pensar que mejor sí te lo digo. Yo ayer hablé con Sonohrina y le dije que... Le dije que... Que me gusta, pero es sólo eso porque ella no me correspondió. Yo respeto tu matrimonio, pero sentí que no podía quedarme con sentimientos adentro. Perdóname.
*Diego: Luca... No tengo que perdonarte nada porque Sonohrina es muy linda, pero al menos respetas mi matrimonio y eso me gusta. Si no hubieses dicho eso, te odiaría ¿Pero le gustas?
*Luca: Ella me dijo que no... Me dijo que ella está casada contigo y que esperan su tercer hijo. Entonces luego cada quien fue a dormir.
*Diego: Ah bueno... (Lo abrazó) Tranquilo porque no es culpa de nadie...
Aunque Diego se veía muy tranquilo, pero sentía que nada andaba bien con respecto a su matrimonio. Cuando Sonohrina despertara él hablaría con ella. Al rato, Sonohrina despertó y fue a la sala para hablar con Diego.
*Diego: (Se levantó del sofá) Sonohrina, ¿podemos hablar?
*Sonohrina: Sí, claro...
*Diego: En privado. Ven, vamos al cuarto.
Llegaron al cuarto y se sentaron en la cama para poder hablar con más comodidad.
*Diego: Me enteré de lo que pasó cuando yo dormía. Sonohrina, si a ti te gusta Luca yo no tengo ningún problema. Sé sincera con él...
*Sonohrina: Fuí sincera. Le dije que no podía corresponderle porque soy tu esposa y estoy esperando un hijo tuyo.
*Diego: ¿Sólo por eso?
*Sonohrina: No... Es en serio. A mí me gustas tú solamente. Yo no estoy enamorada de Luca.
*Diego: Bueno, si eso dices... Volvamos a la sala, que tengo que hablar algo con Luca pero no es en privado.
Llegaron a la sala y Luca ya no lloraba desde que habló con Diego. Estuvo viendo unos e-mails que le habían mandado de la disquera para realizar un concierto en Roma para la semana siguiente. Ellos aceptaron.
Esa tarde, los chicos fueron a la cafetería para encontrarse con Rebeca, Sonohrina estaba durmiendo en casa porque necesitaba descansar mucho.
*Rebeca: ¡Luca! ¡Qué sorpresa! No sabía que vendrías... (Sonrió)
*Luca: Es que debo hablar contigo una cosa, Rebeca. Decidí aprovechar la ocasión y acompañé a Diego hasta acá... ¿Cómo estás?
*Rebeca: Bien, ¿y tú?
*Luca: Bien...
*Rebeca: ¿Y qué es eso que me quieres decir?
*Luca: Bueno, mejor hablamos en un lugar más apartado. Vamos a mi auto ¿Sí?
*Rebeca: De acuerdo...
Luca llevó a Rebeca hasta su automóvil para hablar con ella y decirle todo lo que sentía por ella. Estaba un poco nervioso.
*Luca: Bueno, Rebeca... Quisiera pedirte que me digas qué piensas de mí.
*Rebeca: Pienso que eres un chico muy simpático, me gustaría ser una persona importante para ti, de veras porque se ve que valoras la amistad. Eres un chico muy atento y gracias por eso.
*Luca: Gracias... Bueno, yo te quiero decir que tú me... (Respiró hondo) Que tú me gustas Rebeca. Me gustas mucho y que por eso no me voy a Venezuela.
*Rebeca: (Sorprendida) Luca... (Sonrió) A decir verdad no sabría decirte si me gustas o no, porque casi no hemos salido y dudo que tengamos mucho tiempo para compartir, eres muy ocupado... Pero no te pongas mal, te digo que me estás empezando a gustar... (Sonrió)
*Luca: Trataré de compartir tiempo contigo aunque la semana próxima debo ir a Roma por un concierto... Si quieres acompañarnos...
*Rebeca: De acuerdo... (Sonrió) Iré... ¿Podré conocer a la esposa de Diego?
*Luca: No sé si vaya, porque necesita descansar por su embarazo. Pero hablaremos con ella para saber si puede venir o no.
*Rebeca: De acuerdo. Bueno, vamos a merendar.
Luca y Rebeca salieron del automóvil y fueron a merendar en la cafetería, Diego los estaba esperando sentado en una silla para poder comer en el lugar. Por lo que veía, nada había salido mal.

lunes, 13 de julio de 2009

55º Capitulo

Mientras Sonohrina dormía, Diego y Luca hablaban en el estudio sobre un asunto serio. Diego no se veía muy contento con lo que vio cuando entró a su habitación para descansar.
*Diego: Luca, dime la verdad... ¿Te gusta Sonohrina?
*Luca: Yo reconozco que es muy linda, pero sé que es tu esposa y yo respeto tu matrimonio. Yo no estoy enamorado de ella.
*Diego: Bueno, eso espero. Pasa que me molestó ver lo que estaba pasando o tal vez lo que estuvo a punto de pasar cuando entré a mi habitación para descansar.
*Luca: Bueno, pero yo no estoy enamorado de ella, porque es tu esposa.
*Diego: Bueno, eso espero... Cambiando de tema, ¿es mañana nuestro concierto?
*Luca: Sí. Espero que todo salga bien.
*Diego: Yo también porque en realidad no hemos practicado nada.
*Luca: Bueno, aprovechemos el tiempo.
Practicaron unas cuantas horas y luego fueron a merendar a una pastelería porque en casa no habían dulces para merendar.
En la tarde del día siguiente, comenzó el concierto de Sonohra en Verona, Sonohrina no pudo ir con los bebés porque se sentía mareada. Mucha gente fue a verlos. Incluso desde Colombia había llegado una fan para ir al concierto con una entrada VIP que se había ganado en un concurso de radio. Al terminar el concierto, la muchacha pudo pasar a saludarlos. El que más le gustó fue Diego, ambos pensaron que sería lindo empezar a salir como amigos. La muchacha se llamaba Rebeca.
Luego del concierto, Rebeca, Luca y Diego fueron a cenar en una pizzería para conocerse mejor. Como la habían pasado muy bien, acordaron para verse en otra oportunidad. Llegaron a la casa y siguieron charlando con Rebeca por Internet mientras Sonohrina dormía, ella no notó nada.
Sonohrina despertó para ir al médico y saber con cuántos meses de embarazo contaba, mientras Luca se fue a cenar con Rebeca. Se sentía feliz al poder estar con ella en uno de sus restaurantes preferidos. Sentía que se estaba enamorando de ella.
*(Médico): Bien, les comunico que la paciente tiene casi un mes de embarazo.
Diego y Sonohrina no dijeron ni una palabra y sólo miraban la pantalla que mostraba el vientre de Sonohrina por dentro.
*(Médico): Los felicito.
*Diego: (Sonrió) Gracias, doctor.
Luego de saber eso, regresaron a casa. Mientras eso ocurría, Luca y Rebeca terminaban su cena.
*Rebeca: Gracias por la cena, Luca. Me gustó mucho.
*Luca: Por nada.
*Rebeca: No sabía que Diego estaba casado, menos me imaginaba que tiene dos hijos...
*Luca: Sí, así es. Él no ha querido hacer muy pública su paternidad...
*Rebeca: Bueno, lo felicito ¿Y tú qué tal?
*Luca: Estuve pensando en viajar a Venezuela para encontrarme con el amor de mi vida, pero creo que no está allá.
*Rebeca: ¿Y dónde está? (Sonrió)
*Luca: Está cerca de mí, no tengo que ir tan lejos.
*Rebeca: Me alegro por ti. En cambio yo pensé que el amor de mi vida sería Diego, pero me acabas de contar que es casado y tiene dos hijos.
*Luca: No sólo eso, está por nacer su tercer hijo.
*Rebeca: ¡Tercer hijo! Quiero conocer a su esposa.
*Luca: Algún día la conocerás. Es una muchacha muy simpática y bondadosa, estoy seguro de que se llevarían muy bien.
*Rebeca: De acuerdo, Luca. Nos vemos mañana.
*Luca: Sí, hasta mañana.
Luca dejó a Rebeca en las afueras del hotel donde ella se hospedaba y luego se fue a su casa. Había mucho silencio porque sus padres habían salido, los bebés dormían al igual que Diego y Sonohrina. Luca decidió dejarle un mensaje a Alejandra para comunicarle que posiblemente no viajaría a Venezuela para casarse con ella. Luego de tres horas, Diego y Sonohrina despertaron.
*Diego: (Le acarició el vientre) ¿Durmieron bien?
*Sonohrina: Yo sí... ¿Y tú? (Lo besó)
*Diego: También... (La besó) ¿Y el bebé?
*Sonohrina: (Sonrió) Al parecer también... (Lo abrazó)
*Diego: Sonohrina, ¿a ti te gusta Luca? (Le acarició el cabello)
*Sonohrina: ¿Que si me gusta Luca?
*Diego: ¿Te gusta Luca?
*Sonohrina: No, ¿por qué?
*Diego: Por lo que vi ayer. Vi que Luca y tú estaban muy juntos, pensé que la convivencia en casa había hecho que se enamoraran.
*Sonohrina: No Dieguito, no pienses cosas que no son y jamás serán. Yo estoy enamorada de ti, sólo de ti.
Diego comenzó a besarla mientras la acariciaba. En ese momento, Milagros comenzó a llorar porque se había caído de la cama y le salió un chichón en la cabeza. Diego la alzó del suelo y fue a la cocina para buscar un hielo y curar a su hija. Le llegó un mensaje de texto de parte de Rebeca para verse al día siguiente en la cafetería. Diego aceptó salir con Rebeca y le respondió afirmativamente. Diego regresó al cuarto y vio que Sonohrina ya no estaba, acostó a la bebé en la cuna y se fue a buscar a Sonohrina porque quería decirle algo; la encontró en la sala con Luca viendo una película de comedia llamada "Niñera a prueba de balas". Diego no puso mucha atención a eso, pero pensó que Luca se había encariñado demasiado con Sonohrina.
*Luca: ¿Quieres ir a la heladería cuando termine la película? (Le acarició el cabello)
*Sonohrina: Bueno, de acuerdo. (Sonrió) Le digo a Diego para ir los tres juntos.
*Luca: Sí, dile.
Sonohrina se levantó del sofá y fue a la habitación para avisarle a Diego que estaban por ir a la heladería. Cuando llegó al cuarto, notó a Diego un poco confundido y se sentó a su lado.
*Sonohrina: Dieguito, vamos a ir a la heladería los tres...
*Diego: ¿Los tres? (No se notaba feliz)
*Sonohrina: Sí, los tres. Luca, tú y yo...
*Diego: No, gracias Sonohrina. No estoy de ánimos para salir a comer helado.
*Sonohrina: ¿Qué pasó, Dieguito? (Lo abrazó) ¿Podemos hablarlo?
*Diego: Sí... Sonohrina, si a ti te gusta Luca quédate con él y nos divorciamos.
*Sonohrina: (Sonrió) ¿Por qué estás tan insistente en que me gusta Luca? (Lo abrazó) El padre de mis hijos eres tú, a ti es a quien amo.
*Diego: Es que los veo tan juntos así, que me...
*Sonohrina: ¡Ya sé lo que te pasa! (Sonrió) ¡Estás celoso! Pero no tienes por qué estarlo... Luca y yo llevamos una amistad normal, pasa que estamos compartiendo todo el tiempo que estuvimos distanciados por tanto viaje, y ahora que él viajará a Venezuela.
*Diego: No va a ir...
*Sonohrina: ¿Ah no? ¿Y eso por qué?
*Diego: No va a ir porque ya conoció a alguien más aquí. De hecho, conocimos a alguien. Es una amiga que conocimos en el concierto que hicimos hace poco... Un día vendrá y la conocerás, es muy simpática.
*Sonohrina: (No muy contenta) ¿Y ella sabe de mí?
*Diego: (Sonrió) ¿Ahora la celosa eres tú?
*Sonohrina: (Rio) Yo no estoy celosa... Es sólo que...
*Diego: ¡Sí estás celosa! (Rio) Aún así... (La besó) Te amo... (La besó) Con todo y tus celos...
*Sonohrina: Yo también... (Lo besó) ¿Entonces te unes para ir a la heladería sí o no?
*Diego: (Sonrió) Me animaste, entonces sí voy.
La película terminó y se fueron a la heladería para merendar. Llevaron a los bebés para que dieran un paseo, muchas fans los conocieron y estuvieron fascinadas con la ternura de los bebés, se tomaron fotos con ellos.
*Luca: ¿Ya pueden comer helado?
*Sonohrina: Bueno, no lo han probado aún... No sería mala idea. (Le dio un poco de helado a Mateo)
*Diego: ¿No es muy pronto para que coman helado?
*Sonohrina: Ya tienen casi ocho meses... Tienen que probar las cosas...
*Mateo: Aaaahh... Br... (Sonrió y aplaudió, como si pidiera más helado)
*Sonohrina: ¡Ay le gustó! ¡Qué lindo! (Le dio más helado y también le dio a Milagros)
*Milagros: Mmmm... ¡Dock! (Aplaudió)
*Luca: Dilo, Milagros... Para que vean que no es mentira ¿Qué aprendiste a decir la última vez? (Sonrió) So...
*Milagros: (Sonrió) Aaah... Ma-ma...
*Luca: Eso no. Lo que aprendiste a decir la última vez... (Sonrió) So...
*Mateo: Ehmm... Tadora... (Rio y aplaudió)
*Milagros: Aaaah... Ia...
*Diego: Bueno, puede ser que lo diga luego, Luca.
Al final del día no dijeron "Sonohra", aunque Luca lo intentó de muchas maneras. Al llegar a casa, Luca se conectó y estuvo toda la noche chateando con Rebeca.