martes, 27 de abril de 2010

56º Capitulo

Dos días después, Diego Luca, Mateo y Milagros querían ir al parque, pero Sonohrina no pensaba llevarlos porque temía perderse en Canadá. Diego y Luca se habían ido a una firma de autógrafos con Nataly, ya que ella era quien los iba a representar en Canadá.
*Diego: Después si quieres podemos merendarnos una malteada.
*Nataly: Sí. (Sonrió) Me agrada pasar tiempo con ustedes.
*Luca: ¡Qué bueno! A nosotros también nos agrada pasar tiempo contigo. Gracias por representarnos. Nunca tuvimos una representante tan linda como tú.
*Nataly: (Rió) De nada... ¡Ay, todavía estoy pensando en si quiero irme de gira con ustedes o no...! ¿Qué dicen?
*Diego: Por mí, encantado... (Sonrió)
*Luca: Pues por mí también aunque... Estoy casado.
*Nataly: Cierto... Con la chica que estaba contigo el otro día ¿Verdad?
*Luca: Sí.
Mientras eso ocurría, Sonohrina salió del edificio del hotel para buscar a sus hijos, estaba algo alterada. Rebeca estaba descansando con sus hijos en su habitación de hotel. Cuando salió, vio a Diego Luca, Mateo y Milagros corriendo por el parque que había frente al hotel. Corrió hacia el parque porque quería alcanzarlos, pero no se fijó por donde iba y un auto casi la atropella. Sonohrina se quedó paralizada porque estaba un poco asustada. Un muchacho se bajó del auto.
*(El muchacho): ¿Estás bien? Lo siento... Es que estoy un poco apresurado en llegar al trabajo.
*Sonohrina: Tranquilo. Es que yo no me fijé por donde iba.
*(El muchacho): Bueno, gracias a Dios no te pasó nada. Mucho gusto, soy Frank ¿Y qué hace una muchacha tan linda como tú por la calle?
*Sonohrina: Mis hijos están en el parque que está allá y pensé en llevarlos a la habitación.
*Frank: Entiendo. Ve a buscarlos y déjalos en la habitación. Te invito a una malteada.
Sonohrina fue al parque para que sus hijos la acompañaran hasta la habitación de hotel. Los tres se quedaron jugando consola wii en la habitación, Sonohrina no estaba enojada con ninguno.
En Italia, Walter extrañaba mucho a Yoe. Tenía tiempo que no la veía, a veces se deprimía. No la veía desde el día en que hubo la fiesta en la mansión en la que ella vivía con Ricardo. Hasta donde él tenía entendido, Yoe y Eric andaban juntos ya que Eric le había comentado esa información por teléfono, pero ese romance era falso, ellos sólo eran amigos. Para animarse, Walter decidió dar un paseo.
Yoe y Eric habían comenzado a trabajar en una morgue para poder conocer la práctica de su futura profesión. A la morgue llegó el cuerpo de un señor que se murió naturalmente, según sus familiares. A Yoe no le cuadraba que el señor se hubiese muerto naturalmente, visto que era un heredero rico que dejó en su testamentos un conjunto de bienes raíces y mucho dinero, su familia se disputaba la herencia de una manera brutal, todos querían tener algo.
*(Esposa viuda): Le agradezco que no deje pasar a nadie a ver el cuerpo de mi esposo difunto. Sólo los médicos forenses pueden verlo. Aquí tiene unos dos mil euros para que cumpla mi orden.
*(Vigilante): Si usted lo pide, así será. Está en todo su derecho en no querer que vean el cuerpo del difunto. (Tomó el dinero y volvió a su trabajo)
Sin que el vigilante se diera cuenta, entró un intruso por la puerta trasera de la morgue, habían cinco vigilantes y ninguno lo vio. Eric se encarga de comenzar la autopsia, pero se percata de que alguien viene y corre para salvar a Yoe del intruso, pensaba que era una especie de ladrón o asaltante.
*Eric: (Sujetó a Yoe) ¡Vamos! ¡Hay que huir!
*Yoe: ¿Pero qué pasa?
*Eric: Viene un ladrón... Vamos, rápido... ¡No hay tiempo que perder!
Eric y Yoe salieron de la morgue. Sin querer, Yoe dejó su celular junto al cadaver del señor millonario. Se soltó de los brazos de Eric y corrió hasta el cuarto de autopsias al mismo tiempo que el intruso salía corriendo del cuarto porque se asustó al ver el cadaver, la verdad es que era un cobarde y despistado que entró a la morgue creyendo que era la casa de su mejor amigo. Yoe se golpeó la cabeza contra el suelo mientras el intruso salía de la morgue corriendo y gritando.
Walter iba caminando por los alrededores de la morgue y vio a Eric afuera sin Yoe. Se acercó a él un poco extrañado. Eric estaba nervioso porque venía la policía y él no quería que pensaran que él tenía algo que ver en todo el caso del intruso y el muerto que dejó una fortuna.
*Walter: Eric, ¿dónde está Yoe?
*Eric: No sé. No me preguntes nada... Yo no sé nada y no me importa nada... (Se fue corriendo a su casa)
Walter entró a la morgue sólo para averiguar si Yoe estaba ahí dentro o no. La vio acostada en el suelo, la alzó de caballito y se la llevó a su casa para curarla. Yoe despertó luego de tres horas, estaba acostada en el sofá de la casa de Walter.
*Yoe: ¿Y qué hago yo aquí?
*Walter: Pues te traje, estabas muy herida porque te golpeaste la cabeza y... Pensé en curarte.
*Yoe: (Sonrió) ¡Gracias, Walter! (Lo abrazó) ¿Y qué es de ti? Creí que te habías ido a Alemania con Viviana.
*Walter: No. Yo me quedé porque debo trabajar. Aparte que aquí está la mujer que amo, aunque ella ame a otro.
*Yoe: ¡Qué mal que ame a otro! ¿Y a quién ama?
*Walter: Eres tú, Yoe. Tú amas a otro... Amas a Eric.
*Yoe: ¿Y quién te dijo eso? Eric es sólo un amigo. Yo siempre te he amado, Walter. Gracias por curarme... (Lo besó)
*Walter: Gracias a ti por aclararme esa duda... (La besó) Te amo, Yoe... ¿Quieres volver a ser mi novia?
*Yoe: Por supuesto que sí... (Lo besó)
*Walter: ¿Puedo preguntarte algo que desde hace algún tiempo quise?
*Yoe: Sí, dime...
*Walter: Espérame. Cierra los ojos.
Walter fue a su habitación y fue a buscar una caja pequeña y oscura. Regresó y se arrodilló frente a Yoe.
*Walter: Puedes abrirlos... (Abrió la caja. Había un anillo dentro)
*Yoe: (Sonrió) ¿Tú estás seguro?
*Walter: Sí. Yoe, ¿te casarías conmigo cuando vuelvan los Fainello a Italia?
*Yoe: (Sonrió y lo abrazó) ¡Sí! (Lo besó) Claro que me casaría contigo...
*Walter: (La besó) Gracias por aceptar... (Sonrió y le colocó el anillo) Te adoro... (La besó)
En Canadá, Sonohrina y Eric habían llegado a la cafetería donde se tomarían una malteada para merendar. Diego, Luca y Nataly habían llegado un rato después.
*Nataly: (Vio que Diego estaba pálido) ¿Qué sucede, Dieguito?
*Diego: Nada... Vamos a merendar. No te preocupes... (Nervioso)
*Luca: (Vio a Sonohrina) ¡Hola, Sonohrina!
*Sonohrina: ¡Luca! (Sonrió) ¡Qué coincidencia!
*Frank: ¡Nataly! (Sonrió)
*Nataly: ¡Frank! No puede ser... ¿Y qué pasó? Tú con una chica... No sabía que estás saliendo con alguien.
*Frank: Pues, aún no... La conocí hoy y la invité a merendar.
*Nataly: Yo sí estoy saliendo con alguien... (Sonrió y abrazó a Diego)
Sonohrina se sintió algo molesta. No conocía muy bien a Nataly y ya le caía mal.
*Frank: ¡Qué bueno! ¿Y si nos sentamos juntos?
*Sonohrina: No. Yo me voy... Se me quitó el hambre.
*Frank: Pero, ¿te sientes bien?
*Sonohrina: Sí, sí... Adiós. (Se fue)
*Luca: Diego, mejor dile la verdad a Nataly.
*Diego: He tratado de decírsela, pero nunca me deja terminar de hablar. He tratado de decirle que soy casado y nunca me ha dejado.
*Luca: ¿Y vas a alcanzar a Sonohrina?
*Diego: (Respiró hondo) Debería, pero no puedo... No puedo dejar a Nataly en plena cita.
*Luca: Dile que tienes algo importante que atender, Diego. Es tu esposa.
*Diego: De acuerdo... Nataly...
*Nataly: (Lo abrazó) Dime.
*Diego: Voy a atender un asunto allá afuera y vengo después.
*Nataly: De acuerdo. No tardes mucho. (Lo soltó)
*Luca: Yo le contaré, a mí no me va a interrumpir. Ve a buscar a Sonohrina.
Diego se fue a buscar a Sonohrina mientras Luca, Frank y Nataly buscaban una mesa para tomar sus malteadas.
*Luca: Nataly, tengo algo que decirte... Por favor, no me interrumpas.
*Nataly: Dime.
*Luca: ¿Tú estás buscando una relación con mi hermano?
*Nataly: No la estoy buscando. Está dándose todo por sí solo.
*Luca: Nataly, ¿sabes que Diego es casado?
*Nataly: Se divorcia. Eso tiene solución. Yo quiero ser feliz con tu hermano.
*Luca: Es casado y tiene hijos pequeños.
*Nataly: Quizás esos niños quieran una madrastra.
*Luca: Pues no, no quieren una madrastra. (Se levantó y se fue)
Afuera, Diego encontró a Sonohrina luego de caminar mucho. Sonohrina estaba llorando desconsoladamente.
*Diego: Sonohrina...
*Sonohrina: ¿Qué quieres, Diego Fainello? Ya me has hecho muchas veces lo mismo, te lo he perdonado y tú me lo sigues haciendo.
*Diego: Quiero que me escuches para que me entiendas. No llores, por favor. Me haces sentir mal.
*Sonohrina: Y tú me has hecho sentir peor... ¿Cómo puedes pedirme que no llore?
*Diego: ¿Puedo explicarte?
*Sonohrina: No tienes nada que explicarme porque tu noviecita ya lo hizo por ti.
*Diego: ¿Qué noviecita? Tú eres mi esposa.
*Sonohrina: Pero ya no me amas, Diego Fainello. Dime que ya no me amas, es más fácil que irte con otras mujeres y que yo me de cuenta. Dime que ya no me amas y yo simplemente me voy, pero no quiero que me hagas esto.
*Diego: ¿Quién te dijo que yo no te amo?
*Sonohrina: Tú mismo. Tú mismo me lo has dicho con lo que me has hecho.
*Diego: Te probaré lo contrario...
*Sonohrina: No puedes probarlo... Tú y yo no somos nada a partir de hoy.
*Diego: (La abrazó) No me digas eso... (La besó) Yo te amo... (Comenzó a llorar)
*Sonohrina: Yo también te amo, pero no quiero amar a alguien que siempre está con otras mujeres sin importarle su matrimonio.
*Diego: Claro que me importa mi matrimonio, Sonohrina. Nuestros hijos y tú son los más importante que tengo.
*Sonohrina: ¿Entonces por qué tienes amantes?
*Diego: No tengo amantes. No es mi culpa que hayan mujeres que quieran estar conmigo, yo sólo quiero estar contigo... Te adoro, Sonohrina. Por favor perdóname y no suframos más... (La besó)
*Sonohrina: No sé... No sé, Diego.
*Diego: (Sonrió) Te prometo que ahora seremos sólo tú y yo... (Se secó las lágrimas y la besó) No habrán terceras personas de nuevo entre nosotros.
*Sonohrina: No sé, porque...
*Diego: Porque yo sólo te amo a ti. A nadie más... (La besó) Te lo digo en serio.
*Sonohrina: Siempre dices lo mismo, pero...
*Diego: Pero... Pero, pero, pero... Siempre tienes un pero... (La besó) Aún así te adoro... (La abrazó y la besó)
*Sonohrina: ¡Dieguito, estamos en la calle! (Sonrió)
*Diego: No me importa... (La besó) Lo único que me importa es que estoy con la mujer de mi vida y que nadie cambiará lo que siento por ti... (La besó)
*Sonohrina: (Lo besó) Te adoro, Dieguito... Aunque tú a veces no...
*Diego: "A veces" no te adoro, porque estás equivocándote de palabra... "Siempre" te adoro... (La besó)
Regresaron a la habitación de hotel. Luca llegó allá luego de dos horas. Frank y Nataly se quedaron esperando un rato en la cafetería, pero luego se fueron.

jueves, 15 de abril de 2010

55º Capitulo

Al día siguiente, Diego llamó a Nataly mientras Sonohrina estaba en las afueras del hotel paseando con los niños y Rebeca.
*Diego: ¿Cómo estás?
*Nataly: Bien ¿Y tú?
*Diego: Bien ¿Pudiste recuperar tu auto?
*Nataly: Sí. Se quedó toda la noche en el estacionamiento.
*Diego: Me alegra que lo tengas contigo de vuelta ¿Te gustaría venir a verme en el hotel?
*Nataly: Claro ¿Por qué no?
*Diego: Entonces, termina tu jornada de trabajo y te espero en el lobby ¿De acuerdo?
*Nataly: Sí. De acuerdo, Diego.
*Diego: Dime Dieguito ¿Sí?
*Nataly: (Sonrió) Sí.
*Diego: Está bien... (Sonrió) Nos vemos en la tarde. Cuídate.
*Nataly: Igual tú, Dieguito. Chao.
*Diego: Chao. Aunque no quiero despedirme. (Rió)
*Nataly: Ni yo. Me gusta hablar contigo; pero tengo que seguir trabajando. Nos vemos en la tarde.
*Diego: De acuerdo. Te quiero, Nataly.
*Nataly: También yo.
Se despidieron luego de eso. Sonohrina subió a la habitación con los niños porque estaba algo cansada y quería dormir un poco. Diego no le mencionaría nada sobre Nataly.
*Sonohrina: (Lo abrazó) Dieguito... ¿Qué tal si vamos a cenar esta noche a algún restaurante?
*Diego: Eso habría que hablarlo con Chris. Él es quien nos guía acá en Canadá... Pero esta noche no se va a poder, Sonohrina.
*Sonohrina: ¿Por qué?
*Diego: Es que voy a salir con la dueña de Sony BMG Canadá para firmar unos contratos y no estaré disponible para relajarme en ese momento.
*Sonohrina: ¿Y cuándo estarás libre?
*Diego: No lo sé. Chris tiene la agenda.
*Milagros: Papi, mami... Nosotros vamos a jugar en el parque de abajo.
*Mateo: Regresaremos cuando estemos cansados.
*Sonohrina: De acuerdo. Cuiden de Luki.
*Milagros: Sí, tranquilos.
Los niños bajaron y Sonohrina se quedó con Diego en la habitación. Ella fue a bañarse y luego se quedó dormida mientras Diego no veía la hora de encontrarse con Nataly. En ese momento, Luca y Rebeca paseaban por los alrededores del hotel. Compraron algunos adornos para la casa que les sirviera para recordar su primer viaje a Canadá, estaban con sus hijas.
*Luca: ¿Les ha gustado Canadá?
*Rebeca: Sí, mucho. La he pasado excelente.
*María Alejandra: Yo también, papi.
*Elisa: Sí, pero extraño Italia.
*Luca: Aún nos falta mucho para volver a casa, Elisa.
*Rebeca: Cierto, porque aún debemos pasar por otros países.
Las niñas vieron a Milagros, Diego Luca y Mateo y se fueron con ellos a jugar mientras sus padres aún seguían paseando.
*Luca: ¿Sabes? Ayer en Sony BMG Canadá conocimos a la jefa de las oficinas.
*Rebeca: ¿Y qué tal les fue?
*Luca: Bien. Bueno, debo contarte algo que no va muy bien.
*Rebeca: ¿Qué pasó?
*Luca: Sucede que al parecer Diego se enamoró de la muchacha... No le menciones nada a Sonohrina, pero ellos hoy saldrán.
*Rebeca: ¿Y ella no sabe que Diego es casado?
*Luca: Pues, yo creo que no lo sabe. Él debería decirlo.
*Rebeca: Pues, claro. Pero, Luca... Me estás pidiendo un imposible. Yo creo que Sonohrina debería saber esto porque si esperamos a que ella se de cuenta, será peor.
*Luca: Haz de cuenta que nunca te conté nada, por favor. Es que no sé si Diego estará enamorado de Nataly o no. No lo sé. Por eso te pido que no le digas nada a Sonohrina, porque si llega a ser sólo una amistad, Nataly terminará traumatizada por culpa de Sonohrina y sus celos. Por los momentos no le digas nada y esperemos para saber qué ocurre entre Diego y Nataly.
*Rebeca: Bueno, de acuerdo. (Aunque no muy de acuerdo)
Esa tarde, Nataly llegó al hotel y se encontró con Diego en el lobby. Irían juntos a merendar. En eso, se toparon con Luca y Rebeca.
*Diego: (Algo nervioso) Hola...
*Rebeca: Hola, Diego... ¿Adónde vas?
*Diego: Voy a merendar y a cenar.
*Luca: A merendar y a cenar... Muy bien. Te quiero aquí a las nueve de la noche porque quiero hablar algo importante contigo.
*Nataly: (Sonrió) Hola, Luca.
*Luca: (Sonrió ligeramente) Hola.
*Rebeca: ¿Quién es ella?
*Diego: Es...
*Nataly: Soy Nataly. Mucho gusto.
*Rebeca: ¿Es tu amante, Diego?
*Diego: ¿Qué?
*Nataly: ¿Amante?
*Diego: No. Ella es sólo una amiga...
*Rebeca: ¿Y Sonohrina la conoce?
*Nataly: ¿Quién es ella?
*Diego: No. Aún no la conoce. Pero quizá luego se la presento.
*Luca: Bueno, nosotros vamos a buscar a los niños y vamos a nuestra habitación. Que les vaya bien.
*Diego: Gracias. Ven, Nataly.
Nataly y Diego se fueron a una pastelería que estaba cerca del hotel para merendar. Como estaba situada en un centro comercial, luego se dedicaron a pasear un poco hasta la hora de la cena.
*Luca: Rebeca, por favor. No vuelvas a hacer algo así.
*Rebeca: ¿Por qué no? Yo no quiero que por culpa de otra mujer Diego termine con Sonohrina. Ellos dos tienen años de casados y hacen una hermosa pareja.
*Luca: Sí, pero eso no es problema de nosotros. En dos semanas Diego y Nataly no se verán más porque nos iremos a Estados Unidos. Entonces, si Sonohrina no se entera es mejor.
Mientras todo eso ocurría, Diego y Nataly merendaban juntos. Diego no le quitaba la mirada de encima a Nataly.
*Diego: ¿Y tú tienes novio?
*Nataly: Por ahora no. Es que la enfermedad de mi papá atrapa gran parte de mi tiempo, de mi atención...
*Diego: Entiendo.
*Nataly: ¿Y tú?
*Diego: No. No tengo novia...
*Nataly: ¿Y por qué la chica dijo que yo soy tu amante?
*Diego: No le hagas caso. Es que yo...
*Nataly: ¿Acaso yo te gusto?
*Diego: Pues... Tú me pareces muy linda y me llamas la atención... Pero es que yo...
*Nataly: Tú también me pareces muy lindo, Diego. Eres muy gentil y cariñoso. (Sonrió) Eres especial y me gusta pasar tiempo contigo.
*Diego: A mí también, Nataly. Quisiera que esta cita no terminara.
*Nataly: (Sonrió y le acarició el cuello) Pienso lo mismo... (Se acercó a él)
Diego se acercó también a ella hasta que ambos se besaron. Ese beso duró diez segundos.
*Nataly: (Se ruborizó) Perdóname.
*Diego: Tú a mí. (Se ruborizó)
*Nataly: No pude evitarlo.
*Diego: Ni yo. Paseemos y luego vamos a cenar.
*Nataly: Quiero estar todo el día contigo, Dieguito... (Sonrió)
*Diego: Yo también.
Luego de merendar, Diego y Nataly se fueron a pasear por el centro comercial, Diego le compró a Nataly un peluche de un corazón que decía "You are beautiful" y un ramo de rosas rojas. A la hora de la cena, se fueron a un restaurante que Nataly conocía. Era un lugar más íntimo que la pastelería donde habían merendado. Ahí pudieron conversar un poco de cosas personales.
*Nataly: La paso excelente contigo, definitivamente.
*Diego: Yo también. Te quiero pedir un favor, aunque sé que lo vas a rechazar...
*Nataly: ¿Cuál? Dime.
*Diego: Me gustaría que me acompañaras en el resto de la gira. Me pareces una mujer fascinante y muy hermosa, Nataly.
*Nataly: Pues, no sé... Diego, tú sabes que mi papá depende en gran parte de mí. Pero mi felicidad depende de ti desde ayer. Es increíble que tenemos tan poco tiempo conociéndonos y ya nos llevemos tan bien.
*Diego: Pues sí.
*Nataly: Quiero estar contigo para siempre.
*Diego: Yo también... (Le acarició la mano derecha mientras le miraba a los ojos) Eres muy dulce.
*Nataly: Tú más.
*Diego: No. Tú más... (La besó) Eres la mujer más dulce que he conocido.
*Nataly: (Lo abrazó y lo besó) No quiero que te vayas de Canadá.
*Diego: Por eso te pedí que vinieras conmigo el resto de la gira.
*Nataly: Sabes que me gustaría mucho ¿Cuánto te quedarás aquí?
*Diego: Dos semanas y media... ¿Podemos vernos el viernes?
*Nataly: Sí.
*Diego: ¿Conoces algún sitio al que podamos ir a bailar, a relajarnos un poco del trabajo?
*Nataly: Sí. El viernes te llevaré hasta allá... Pero tienes que prometerme algo.
*Diego: ¿Qué?
*Nataly: Que bailarás sólo conmigo y que pasaremos mucho tiempo juntos.
*Diego: Más que el de la cita de hoy... (Sonrió)
*Nataly: ¡Sí! (Lo besó) ¡Ay, Dieguito! Soy tan feliz... (Lo besó)
*Diego: (La besó) Yo también, Sonohrina... (Sonrió y la besó)
Nataly no se molestó con el hecho de que Diego la llamara así, creyó que era un apodo que él le puso de cariño. Le gustaba mucho ese apodo. Ella pensaba eso porque aún no conocía a Sonohrina y no tenía la más mínima idea de su existencia. Diego había tomado un poco en la cena.
*Nataly: (Sonrió) ¿Vamos a casa, Dieguito?
*Diego: Vamos a casa... (Sonrió y la besó) Te amo, Sonohrina.
*Nataly: Yo también te amo, Dieguito... (Lo besó) Eres lo más lindo que me ha pasado en la vida... (Lo besó)
*Diego: Y tú a mí. Gracias por todo, amor... (La besó) Por todo... (La besó)
Nataly y Diego se fueron hasta el auto de Nataly. Ella no se fue a casa porque no quería que la cita terminara. Se fue con Diego hasta el hotel donde él se estaba hospedando y reservó una habitación para ambos. Diego alzó a Nataly entre sus brazos y así entraron a la habitación.
*Diego: (La besó) Sonohrina, no sé qué haría sin ti... (La besó) No quiero perderte...
*Nataly: Ni yo. (Lo besó) Quiero pertenecerte, Dieguito... (Lo besó)
Siguieron besándose hasta que la pasión que sentían en ese momento se hizo más fuerte y se adueñó de ellos. Durante toda esa noche, Diego creyó que Nataly era Sonohrina.
Mientras eso ocurría, Mateo, Milagros y Diego Luca se habían dormido mientras Sonohrina seguía esperando a Diego. Estaba muy preocupada por él y le era difícil conciliar el sueño. Ella no dejaba de rezar por él porque creía que le estaba pasando algo malo. Lloró tres veces durante toda la noche. Lo llamó al celular, pero él nunca contestó las llamadas, pero ella decidió mandarle un mensaje de voz.
*Sonohrina: Dieguito, no sé dónde estás... No sé qué está pasando... Estoy muy preocupada... Llámame, por favor... Te amo. (Apagó su celular) Aparece, por favor... Dieguito.
La puerta de la habitación se abrió. Sonohrina se emocionó porque creía que era Diego. Se secó las lágrimas y se hizo la dormida. No era Diego, era Rebeca.
*Rebeca: Sonohrina... ¿Estás despierta?
*Sonohrina: Sí. Es que no me puedo dormir porque estoy preocupada por Dieguito.
*Rebeca: Preocupada por Diego... ¿Y por qué?
*Sonohrina: Es que salió desde la tarde y no ha regresado.
*Rebeca: ¿Y sabes con quién anda?
*Sonohrina: Pues, él me dijo que iba a salir con la dueña de Sony BMG Canadá...
*Rebeca: Así que la dueña de Sony... Sonohrina, no sé si sea ella, pero Diego tiene una amante. La conocí hoy.
*Sonohrina: ¿Una amante?
*Rebeca: Sí. Él dijo que no era su amante, pero no me convenció.
*Sonohrina: ¿Amante? Pero Rebeca, ¿tú estás segura? (Pretendía volver a llorar)
*Rebeca: Sí. Sé que suena difícil de creer... Pero Diego tiene una amante. Sonohrina, tú eres muy joven y hermosa, puedes conocer a un hombre que no te haga este tipo de cosas.
*Sonohrina: (Comenzó a llorar) Por eso es que no me responde el celular... Por eso es que hoy no quiso salir a cenar conmigo... ¿Y tú sabes adónde fueron?
*Rebeca: No. No lo sé. Si supiera, te dijera para irlo a buscar. Pero no te preocupes, porque quizá cuando despiertes mañana lo encontrarás a tu lado... Quizás es sólo una amiga que Diego conoció aquí.
Sonohrina se sentía muy mal con la noticia que Rebeca le dijo, pero ella no podía callar una noticia tan grave como esa. Si ella era amiga leal de Sonohrina, debía hacerle saber todo lo que sucedía con Diego a sus espaldas así le doliera o no. Cuando Sonohrina se tranquilizó y se durmió, Rebeca fue a su habitación de hotel. Luca estaba durmiendo y por esa razón él no se dio cuenta que Rebeca fue a decirle a Sonohrina la verdad sobre Diego.

viernes, 9 de abril de 2010

54º Capitulo

Dos meses después, Yoe seguía saliendo con Eric mientras Walter sólo prestaba atención a su música. Viviana regresó a Alemania, pero Ricardo y ella tuvieron que terminar por la distancia. Ricardo empezó a salir con Scarlett. Los Jonas se fueron de viaje para Torino. Los Fainello se fueron a América porque Sonohra debía hacer una gira para promocionar su música. La gira comenzó por Canadá, un país nuevo para todos. En el aeropuerto, los recibieron un grupo de fans; mujeres y hombres. Llegaron al hotel muy cansados.
*Sonohrina: Me agrada el clima aquí, Dieguito.
*Diego: ¿Por qué?
*Sonohrina: Porque es fresco. No hace calor, y me gusta el frío.
*Diego: (Sonrió) Sonohrina, acá en Canadá estamos por la promoción de la música que Luca y yo hacemos. Si tú quieres acompañarnos a las entrevistas, puedes hacerlo.
*Sonohrina: No, gracias Dieguito. Yo respeto tu trabajo, puedo ir a conciertos pero mejor es que a las ruedas de prensa y entrevistas vayan solamente Luca y tú.
*Diego: De acuerdo, Sonohrina. (La besó) Por eso te amo, aparte de ser hermosa, tú respetas mi trabajo.
*Sonohrina: Si yo volviera a trabajar, ¿tú respetarías mi trabajo?
*Diego: Claro que sí... (La besó) Ya no me preocupa Camilo.
Sonohrina lo besó y lo abrazó. A ninguno le importó nada porque los niños estaban con Luca y Rebeca.
*Diego: Necesitamos disfrutar nuestro tiempo a solas... (La besó)
*Sonohrina: Eso sí es cierto... (Rió y lo besó)
Diego acostó a Sonohrina en la cama. La seguía besando, le acariciaba el cabello y las mejillas. Cuando menos tenía deseos de interrumpir todo lo que hacía, sonó su celular. Sonohrina trató de alcanzarlo, pero él la detuvo.
*Sonohrina: Dieguito... Quizás es por trabajo, atiende.
*Diego: No. Que dejen el mensaje, amor.
*Sonohrina: Dieguito, contesta. Después tendremos el tiempo suficiente para hacer lo que querramos.
*Diego: No quiero atender. Quiero atenderte a ti, Sonohrina... (La besó)
*Sonohrina: Por favor, Dieguito. No quiero que pierdas tu trabajo o te crean irresponsable y en parte por culpa mía.
*Diego: No es tu culpa. Nosotros somos marido y mujer. Tenemos que disfrutar de nuestros momentos sin los niños... Sin obligaciones...
*Sonohrina: Pero estamos aquí por tu trabajo. Dieguito, por favor atiende la llamada.
*Diego: Bueno, atiendo y luego te atenderé... (Sonrió y atendió el teléfono) ¿Sí?
*(Productor): Buenos días, por favor con Diego Fainello.
*Diego: Sí. Soy yo ¿Qué pasa?
*(Productor): Los estamos esperando. Olvidaron la entrevista de hoy, ¿o qué?
*Diego: ¡La entrevista! Yo creí que era mañana.
*(Productor): Mañana no. Aquí será día nacional. Tienen dos horas para llegar.
*Diego: De acuerdo. Llamaré a Luca para que vayamos. Gracias.
*(Porductor): Por nada. No tarden.
Diego colgó la llamada, se levantó de la cama y fue al baño. Sonohrina se levantó luego y se quedó contemplando a Diego en el baño mientras él se lavaba las manos y la cara.
*Diego: Discúlpame, Sonohrina. Es que debo irme a una entrevista ahora para las oficinas de Sony BMG Canadá. De no ser por ti, no recuerdo la entrevista y dejo a las personas esperando por Luca y por mí. No sé qué haría sin ti. Te amo. (La besó)
*Sonohrina: ¿Quieres que llame a Luca para decirle?
*Diego: Tranquila. Yo lo llamaré.
Diego tomó el teléfono y llamó a Luca. Él no tardó en responder, estaba en la piscina del hotel con Rebeca y los niños. Rebeca enseñaba a los niños a nadar y Luca estaba sólo mirando mientras pretendía broncearse.
*Luca: Hola, Diego... ¿Qué pasó?
*Diego: Luca, se nos está olvidando la entrevista.
*Luca: ¿Cuál entrevista?
*Diego: La que daríamos hoy con Sony BMG Canadá. Tenemos dos horas para llegar a las oficinas.
*Luca: Bueno, espera que suba a mi habitación, me vista y salimos.
*Diego: De acuerdo. Te espero en el lobby.
Luca colgó la llamada y se levantó de la silla donde estaba sentado. Rebeca lo miró un poco preocupada porque no sabía qué pasaba.
*Rebeca: ¿Adónde vas, amor?
*Luca: Iré a las oficinas de Sony BMG Canadá. Olvidé que teníamos una entrevista.
*Rebeca: Pero si acabamos de llegar.
*Luca: Lo sé, amor. Pero así es este trabajo... Así que diviértete con los niños porque debo irme ahora. Nos vemos cuando regrese.
*Rebeca: ¿Cuándo será eso?
*Luca: Supongo que luego de la entrevista... No sé a qué hora termina. Subiré a vestirme para poder salir.
*Rebeca: De acuerdo, nos vemos.
Luca subió a su habitación para alistarse y salir rumbo a las oficinas de Sony BMG Canadá. Luego de alistarse, bajó al lobby y se encontró con Diego.
*Diego: Ven, vamos. Yo llamé un taxi para que nos lleve.
*Luca: De acuerdo. Eres un genio, porque yo me preguntaba cómo íbamos a hacer para llegar hasta las oficinas de Sony BMG Canadá si no sabemos dónde están y aún no tenemos un transporte privado aquí.
*Diego: Cierto, llega mañana. Así que es mejor irnos hoy en taxi.
El taxista no les cobró mucho dinero y les dictó su número de celular para que luego de la entrevista, él los pasara buscando para regresarlos al hotel. Cuando llegaron al piso donde les realizarían la entrevista, no los hicieron esperar mucho y los hicieron pasar en seguida a un despacho. Cuando entraron, se dieron cuenta que la persona que los entrevistaría era una hermosa joven.
*(La muchacha): Pasen adelante. (Sonrió)
*Luca: Gracias. Mucho gusto, Luca Fainello.
*Diego: Y yo soy Diego Fainello. (No le quitaba la mirada de encima)
*(La muchacha): Un placer, chicos. Soy Nataly y seré la persona que los entrevistará porque mi padre está algo enfermo... Y él es quién se encarga de esto. (Sonrió) Él me escribió las preguntas que quiere que yo les haga para que se las respondan y yo le llevaré la entrevista a casa.
*Luca: De acuerdo.
La entrevista no fue muy larga. Las oficinas estaban por cerrar y aún los chicos no se habían ido. Luca salió del despacho, pero Diego se quedó adentro mirando cómo Nataly recogía y ordenaba sus cosas.
*Nataly: ¿Y te gusta Canadá?
*Diego: Sí.
*Nataly: Me alegra. Mira, mis padres son finlandeses pero cuando llegaron aquí les fascinó todo y se quedaron ¿Tú te quedarías?
*Diego: Sí, pero debo continuar con la gira.
*Nataly: Sí, ya veo. (Sonrió) Yo he ido a Finlandia cuando era una niña, pero no es igual a Canadá... Aquí fue donde nací, me crié...
*Diego: ¿Qué harás?
*Nataly: Quedarme a vivir aquí... (Sonrió) Es mi hogar en el mundo. Amo mi país.
*Diego: Me refiero a luego de recoger y arreglar todo.
*Nataly: Bueno, yo vivo con mi hermano y debo ir a ayudarlo con papá porque él se está quedando en mi casa por su enfermedad.
*Diego: Disculpa que pregunte, ¿pero qué tiene?
*Nataly: Pues él tiene leucemia... Está muy mal y... Creo que heredaré estas oficinas pero... (Se le aguaron los ojos) No quiero que él muera... (Lo abrazó)
*Diego: (La abrazó) Perdón por preguntar... ¿Quieres acompañarnos a un café o algo así? Es para que te relajes y no pienses en la enfermedad de tu papá.
*Nataly: Sí, claro. (Se secó las lágrimas) Vamos.
Salieron del despacho y se fueron en el taxi que llegó justo cuando ellos salían del edificio, Luca lo había llamado. Por el camino, Diego no le quitaba la mirada de encima a Nataly. Le parecía una joven muy hermosa y no quería dejarla sufriendo por la enfermedad de su papá, quería pasar tiempo con ella para distraerla un poco de ese ambiente.
*Diego: Señor, no nos lleve al hotel todavía. Llévenos a una pastelería, la más exquisita...
*(Taxi): De acuerdo.
*Luca: Diego, yo no tengo dinero para tus caprichos.
*Diego: No es un capricho.
*Luca: ¿Y Nataly viene con nosotros o el taxista la llevará a su casa?
*Diego: Ella viene con nosotros. (La abrazó)
*Luca: Entiendo. (Susurró) Sonohrina lo va a matar.
Llegaron a una pastelería que se veía lujos por dentro y por fuera. Entraron para tomar un café los tres juntos. Diego no soltaba a Nataly, le agradaba su olor.
*Nataly: Acabo de recordar que dejé mi auto en el edificio... (Rió)
*Luca: (Rió) No me digas... Pero no te molestes...
*Diego: No. No tienes que molestarte. (Le dio dinero) Toma para que pagues el taxi de hoy y el de mañana para que vayas a buscar tu auto.
*Luca: (Sorprendido) Estás demasiado gentil hoy...
*Diego: Es normal en mí... (Sonrió y abrazó a Nataly) ¿Y mañana qué harás?
*Nataly: No sé... Cuidar a mi papá...
*Diego: ¿Dónde vives? Es que me gustaría pasar a buscarte para ir a pasear o ir adónde tú quieras y distraerte.
Nataly le dictó su dirección a Diego y él prometió ir a buscarla en la tarde del día siguiente para salir a pasear y hacer que se distrajera un poco. Nataly estaba feliz por su nueva amistad con Diego. Pero Luca se preocupaba porque sabía que eso no iba a terminar muy bien. Al final de la tarde, el taxista llevó a Nataly a su casa y Diego se bajó del taxi para despedirse de ella con un beso en la mejilla y un abrazo. Luego el taxista llevó a Luca y Diego al hotel.

sábado, 3 de abril de 2010

53º Capitulo

Pasaron dos meses en los cuales la vida siguió su rumbo normal y habitual. Joseth y Marco se ocupaban de los preparativos para su boda. Ricardo y Yoe ya no vivían en la casa de Viviana porque el banco le pasó a Ricardo una gran cantidad de dinero y él lo utilizó para comprar una mansión donde vivir con Yoe. Yoe ya había comenzado la universidad en Italia y le iba muy bien y casi no veía a Walter porque sus estudios le ocupaban gran parte de su día a día. Sofi y Gastón estaban preparando sus maletas porque viajarían a Argentina a conocer el sobrino de Gastón. Walter seguía haciéndole piropos a Viviana y ella aún seguía tratándolo como un amigo. Paola y Filippo pensaban viajar a Milano porque Filippo ha pensado en presentarle Milano a Paola, se irían en un mes. Valeria y Julio estaban pensando casarse, pero Valeria notó que Julio estaba comenzando a tener problemas con el hecho de reunirse en la casa de los Fainello, Jonas o en la casa de Walter porque sabía que Ricardo estaría allá y entre ambos no había buena relación. Roberto y Luca Donazzan han estado firmando contratos con la firma disquera para poder hacer giras fuera de Italia para promocionar su música. Damiano instaló la máquina registradora de llamadas, pero siempre que devolvía la llamada a la persona que siempre lo llamaba, esta persona no contestaba el teléfono. En la casa Jonas, los chicos planeaban otras vacaciones por Italia, esta vez sí invitarían a los Fainello. En la casa Fainello, la gira por Latinoamérica parecía extenderse por más países porque las oficinas de Sony BMG les comentó que la fanaticada en Latinoamérica ha crecido y que muchas fanáticas habían solicitado una visita de Sonohra a cada uno de los países; entonces ellos decidieron visitar a toda Latinoamérica y Norteamérica.
En un día normal de clases universitarias, Yoe asistió a la universidad para seguir recibiendo sus lecciones. Cuando llegó, encontró que había llegado un chico nuevo, el cual era rodeado por muchos estudiantes. Yoe se acercó para saber cómo era y de quién se trataba. Era un chico muy guapo que apenas vio a Yoe, dejó a todas las chicas hipnotizadas por él mientras se acercaba a Yoe. No le agradaba que todas estuvieran como en trance por él, pero Yoe era diferente.
*(El muchacho): Hola.
*Yoe: Hola ¿Eres nuevo aquí?
*(El muchacho): Sí. Me acabo de mudar a Italia. Mucho gusto, me llamo Eric Dill... Dime Eric... ¿Cuál es tu nombre?
*Yoe: Me llamo Joelyn, pero dime Yoe.
*Eric: De acuerdo, Yoe... ¿Y qué estudias?
*Yoe: Medicina forense ¿Tú qué estudiarás?
*Eric: Lo mismo (Sonrió) ¡Genial! Espero nos toque estudiar en la misma sección.
*Yoe: Yo estoy en la B.
*Eric: No sé en cuál estaré yo... Pero espero que sea también en la B. (Sonrió) Sino, sólo nos encontraremos en los recesos.
*Yoe: Cierto.
Conversaron un rato antes de entrar al aula de clases. Eric entró para la sección B y Yoe lo acompañó hasta el aula. Estuvieron juntos durante la clase y el receso. Se terminó la jornada universitaria, Yoe y Eric tomaron su rumbo quedando de acuerdo en verse al día siguiente. Eric caminaba en dirección a su casa y se tropezó con Ricardo sin querer.
*Ricardo: ¡Fíjate por dónde vas!
*Eric: Lo siento. De veras no fue mi intención...
*Ricardo: Disculpa que te responda así, pero es que he tenido un mal día. Unos meses con muchos altibajos.
*Eric: Tranquilo.
*Ricardo: ¿Quieres venir a una fiesta que estoy planificando en mi casa?
*Eric: Bueno, está bien ¿Por dónde vives?
*Ricardo: Luego de voltear a la esquina hay una mansión muy grande y hermosa. Esa es mi casa. (Sonrió)
*Eric: ¿En serio? Yo me acabo de mudar al lado de tu casa.
*Ricardo: Genial.
*Eric: ¿Puedo llevar a mi hermana Scarlett?
*Ricardo: Claro. (Sonrió) Así la conocemos y les presentamos al resto de los chicos. Así también tendrán amigos. Nos vemos.
*Eric: De acuerdo. Adiós.
Ese fin de semana, hubo una fiesta en la mansión que Ricardo compró. La fiesta era para Joseth y Marco. Una especie de despedida de solteros. Todos la estaban pasando muy bien. Pasaron cinco minutos luego de que inició la fiesta y llegaron Eric y Scarlett. Ricardo los recibió contento en la puerta de la mansión. Quedó maravillado con la belleza de Scarlett. Cuando Viviana se percató de eso, corrió a abrazarlo con gesto de celos.
*Ricardo: Bueno, pasen adelante.
*Eric: Gracias... (Entró acompañado de Scarlett)
*Viviana: ¿Y quiénes son ellos?
*Ricardo: Mis vecinos. Los invité. Viviana, después hablamos ¿Sí? Es que voy a presentarlos a los demás.
*Viviana: De acuerdo, amor. Te espero afuera con los demás.
Afuera estaban pasándola muy bien. Bailando y conversando mientras los niños jugaban a las escondidas. Ricardo, Scarlett y Eric salieron para estar con el resto de los invitados. Yoe bailaba con Walter.
*Ricardo: Vengan. Les presento a mi hermana. (Interrumpió el baile de Yoe y Walter) Les presento a Yoe y a su... Novio... Walter.
*Eric: (Sonrió) ¡Yoe!
*Yoe: ¡Eric! (Sonrió)
*Ricardo: ¿Qué? ¿Ya se conocían?
*Eric: Sí. Estudiamos juntos en la universidad.
*Walter: Voy a tomar un poco de agua. Ya vengo.
La verdad era que Walter no iba a tomar agua. Se sentía muy mal al ver a Yoe sonriendo con Eric. No le parecía buen tipo y le parecía un atrevido porque, según él, Eric le estaba tratando de tumbar su romance.
*Diego: (Sonrió) Te salió rival...
*Walter: Pues no.
*Marco: ¡Walter, relájate! Estamos en una fiesta donde todo tiene que ser felicidad... ¡Me caso!
*Walter: Sí, Marco. Lo sé. Pero no me agrada ese tal Eric.
*Viviana: A mí tampoco me agrada la tal hermana de Eric.
*Diego: (Miraba a Scarlett sonriendo) Pero se ve simpática. Además es muy linda.
*Luca: (Rió) Si Sonohrina te oye, te quedas sin vino porque te lo avienta en la ropa. (Rió) Te quedas sin vino y sin ropa.
*Diego: Yo dije que se ve simpática y que es muy linda. Pero yo no he dicho qué pienso de Sonohrina. Pienso que ella es hermosa, es lo más hermoso que he vivido.
*Damiano: Ya todos aquí sabemos lo que tú piensas de Sonohrina.
Por otro lado, Sonohrina estaba conversando con Rebeca, Danielle, Joseth, Adriana, Sofi y Jackie.
*Joseth: Las que siguen solteras aquí, ¿no piensan casarse?
*Sofi: Sí, pero yo no le voy a decir a Gastón que me quiero casar. Él debe decírmelo. Apropósito, nos iremos a Argentina la semana que viene para conocer a su sobrino.
*Adriana: Buen viaje... ¿Y cuándo regresan?
*Sofi: El mes que viene.
*Jackie: Bueno, éxito. Nunca se sabe si Gastón te pide compromiso en el viaje.
*Adriana: ¡Qué bien! ¡Ay, amiga tienes que contarnos!
*Sofi: De acuerdo.
*Rebeca: Ojala sea así, porque ustedes hacen buena pareja ¿No han hablado de casarse?
*Sofi: No... Gastón nunca me ha hablado de matrimonio... Él me dijo una vez que sería muy costosa la vida en matrimonio.
*Sonohrina: Los hombres le temen al compromiso. Todos menos Dieguito... (Sonrió)
*Jackie: ¿Y cómo te pidió matrimonio?
*Sonohrina: Me lo pidió dos veces... (Sonrió) ¡Lo adoro! De una manera muy encantadora, me cantó canciones.
*Rebeca: ¡Qué bello!
La fiesta terminó y Ricardo fue a despedir a todos los invitados. Eric y Scarlett fueron los últimos en irse.
*Scarlett: La vida aquí es muy diferente a la de Estados Unidos. Pero me gusta más aquí.
*Ricardo: Ya yo me he acostumbrado... Si quieren, mañana podemos ir a pasear por las calles italianas y les presentamos lugares.
*Scarlett: Estaría genial.
*Eric: Bueno, chicos. Nos vamos porque dormiremos. Hablamos para vernos mañana ¿De acuerdo?
*Yoe: Claro, que estén bien.
Ricardo fue a la puerta a despedirlos. Sin intención, Ricardo besó a Scarlett antes de que ella se fuera a su casa, pero fue un beso accidentado. Igual no hubo problema por parte de ninguno de los dos. Yoe sólo esperaba que Viviana no se enterara de eso porque sino iba a matar a Scarlett.