domingo, 30 de agosto de 2009

15º Capitulo

Al llegar del paseo en El Ávila, cada quien se fue a su habitación. Sonohrina se acostó en su cama porque estaba exhausta. Diego la miraba un poco preocupado.
*Diego: Creo que hacer paseos tan largos no es bueno para ti, Sonohrina.
*Sonohrina: Dieguito... No me dejes sola, por favor.
*Diego: No lo haré, te lo prometo.
*Sonohrina: Me siento mal...
*Diego: ¿Qué tienes?
*Sonohrina: Estoy mareada. Creo que ya tengo solución y voy a dormir ¿Me acompañas?
*Diego: ¿Por qué no? (Sonrió y se acostó a su lado)
*Sonohrina: Gracias... (Lo besó)
Mientras eso ocurría, Luca revisaba su correo electrónico y encontró un mensaje de Frankie. Lo abrió y vio que era un mensaje que venía de los niños. Junto a los mensajes de cada niño, venía un video. Luca puso a rodar el video y estuvo riéndose un buen rato.
*Luca: ¡Rebeca! Tienes que ver esto... (Rio) Pero llama a Diego y Sonohrina, por favor... (Rio)
Rebeca fue a buscar a Sonohrina y a Diego. Los encontró dormidos y abrazados. Le dio pena despertarlos y fue a ver lo que Luca le había contado.
*Luca: Ellos no saben de lo que se pierden... (Rio) Bueno, después les mostraremos para que lo vean.
*Rebeca: Sí... (Rio) Están muy divertidos los niños.
*Luca: Sí, y bailan muy bien... (Rio)
Rato después, Diego y Sonohrina pudieron ver el video de los niños bailando y rieron mucho. También los presentaron a Agatha y a Loredana.
*Loredana: Los mellizos están grandes.
*Agatha: ¿Cuáles son tus hijos, prima?
*Sonohrina: Los mellizos y el pequeño que está bailando muy cómico. Las dos niñas son hijas de Rebeca y Luca.
*Loredana: ¿Y el otro niño quién es?
*Luca: Es un vecino que conocimos este año. Son norteamericanos y mexicanas que se mudaron este año a Italia. Viven en la casa de al lado.
Una semana después; Luca, Sonohrina, Diego, Rebeca, Loredana y Agatha fueron a la clínica para saber cómo estaba Sonohrina.
*(Médico): He visto los resultados anteriores y los resultados actuales no han variado. La paciente sigue igual.
Sonohrina abrazó a Diego porque estaba mareada y cansada. Decidieron regresar a casa. Al llegar, descansaron un poco porque el camino desde casa hasta la clínica era muy largo y resultaba tedioso.
*Eugenio: (Tomó a Diego de la muñeca) ¿Cómo sigue mi sobrina?
*Diego: Está igual a como viajó. No ha empeorado ni mejorado.
*Luca: Es que no va a mejorar sola, Diego. Ella se va a curar solamente cuando donen parte de alguna médula familiar.
*Eugenio: (Soltó a Diego) Cuando se mejore mi sobrina, te vas de mi casa. Estás aquí porque sé que quieres ayudar a mi sobrina, pero en cuanto ella se cure, me haces el favor y te vas.
*Sonohrina: Tío, por favor... No lo trates mal...
El tío Eugenio se fue a la sala para seguir viendo el partido de fútbol entre Manchester United y Chelsea. Loredana y Agatha se fueron al jardín y se sentaron en las sillas que habían ahí para conversar un rato. Luca y Rebeca las acompañaron, pero Diego y Sonohrina se fueron al cuarto de Sonohrina porque ella se sentía mal. Estaba muy pálida.
*Diego: (La alzó) Descansa, Sonohrina... (La acostó en la cama y la abrazó)
*Sonohrina: ¿No vas a ir a conversar?
*Diego: No. Yo quiero cuidarte y consentirte un rato... (La besó)
*Sonohrina: Dieguito, mejor es que vayas... No quiero que estés aquí encerrado en mi cuarto conmigo.
*Diego: (Sonrió) ¿Por qué? ¿Ahora te doy miedo?
*Sonohrina: (Sonrió) No, Dieguito... Es sólo que no he visto que socialices mucho con mi familia... ¿Ellos te caen mal?
*Diego: No. Tu tío Eugenio me trata mal... ¿Tú oíste cómo me dijo hace rato?
*Sonohrina: Sí.
*Diego: No quiero herirte diciendo esto, pero tu tío sí me cae mal.
*Sonohrina: Sí, lo sé. Pero tendrás que conocer al resto de mis tíos y primos. Será divertido porque ellos son más dulces que mi tío Eugenio.
*Diego: Tu tío Eugenio es ácido. Perdón que lo diga.
*Sonohrina: (Susurró) Es verdad.
*Diego: (Sonrió) ¿Dormimos juntos?
*Sonohrina: Bueno... (Lo abrazó)
Se durmieron cómodamente abrazados. Pasaron un par de horas y el tío Eugenio entró al cuarto de Sonohrina porque quería comentarles sobre su voluntad de ser donante de médula para ella, vio a Diego durmiendo abrazando a Sonohrina y se puso furioso.
*Eugenio: (Tomó a Diego de la muñeca muy fuerte) Mira, muchacho... Esta casa se respeta ¿Oíste?
*Diego: ¡Deje de gritar! Nosotros no estamos haciendo nada.
*Eugenio: Quizás ahora no, pero antes sí... De eso estoy seguro.
*Diego: Tampoco... ¿Pero por qué me odia tanto?
*Sonohrina: (Despertando) ¿Qué pasó? ¿Por qué tanto escándalo?
*Eugenio: ¡Interrumpiste el sueño de mi sobrina!
*Diego: Suélteme... Yo no le hice nada... No hacíamos nada.
*Eugenio: ¡Levántate de la cama de mi sobrina ya!
*Diego: (Abrazó a Sonohrina) Oblígueme.
*Eugenio: En diez minutos quiero que ambos bajen a la sala porque tenemos mucho de qué hablar. (Se fue)
Diego y Sonohrina sólo se miraban sin decirse nada. Sonohrina no entendía nada de lo que estaba pasando, ya que acababa de despertar.
*Diego: Perdóname, Sonohrina. (Le besó la mano) Si esto sigue así, yo me voy a un hotel o algún lugar donde no tenga que soportar a ese tío tuyo.
*Sonohrina: (Lo abrazó) No, Dieguito. No te vayas.
*Diego: ¡Me tiene harto! Por ti me quedo en tu casa, pero por él ya me hubiese ido ¡No lo aguanto!
*Sonohrina: Tenle paciencia... ¿Qué fue lo que pasó?
*Diego: No sé... Llegó gritando y lastimándome la mano. Él tiene que entender que somos esposos y que no nos va a separar, Sonohrina... Pero no lo quiere asimilar. Me estaba regañando porque creía que tú y yo estábamos... Bueno, tú sabes...
*Sonohrina: Sí... ¿Bajamos de una vez?
*Diego: No quiero verle la cara a tu tío.
*Sonohrina: Si quiere hacerte daño, yo lo voy a detener ¿Vamos?
*Diego: Sí, vamos.
Cuando llegaron a la sala, se sentaron en los sillones y empezaron a conversar un poco mientras esperaban al tío Eugenio.
*Agatha: ¿Y eso? Ustedes aquí.
*Diego: Estamos esperando a tu papá.
*Agatha: ¿En serio? ¿Para qué?
*Diego: Va a hablar con nosotros... No sé de qué. Sólo nos dijo que nos quería aquí.
*Agatha: Bueno, yo los dejo. Diviértanse. (Se fue)
*Diego: (Miró a Sonohrina) ¿Diviértanse? (Sonrió) ¿Tú prima está loca?
*Sonohrina: Es que mi tío no la trata mal. A quien priva de libertades es a mí, a ella le deja hacer todo lo que quiera y la trata como una reina.
*Diego: (Susurró) Ahí viene el ogro. (Rio silenciosamente)
El tío Eugenio respiró hondo y se sentó en el sillón que estaba frente a Sonohrina.
*Sonohrina: ¿Y bien?
*Eugenio: Bien mal... (Comenzó a gritar) Se divierten mucho ¿Verdad?
*Sonohrina: ¿A qué te refieres?
*Eugenio: Jovencita, esta casa se respeta y no puede ser que tú hagas cochinadas con este tipo aquí adentro.
*Sonohrina: Ya va... ¿A qué te refieres con "cochinadas"? Diego y yo no estábamos haciendo nada, sólo dormíamos.
*Eugenio: ¿Y antes?
*Sonohrina: Hablábamos. Tío, yo no soy virgen. Tengo hijos con Diego y es mi esposo. Lo que hagamos nosotros donde queramos no tiene por qué ser de tu importancia.
*Eugenio: ¿Y me dices descaradamente eso en mi cara, jovencita? ¡Más respeto! (Respiró hondo) He tomado una decisión. Este tipo va a dormir en la sala, ya no va a dormir en tu cuarto.
*Sonohrina: Pero...
*Eugenio: Sin peros.
*Diego: Déjela hablar.
*Eugenio: ¡Cállate! No hay pero que valga. Yo no voy a permitir que tú le faltes el respeto a mi sobrina en su propia casa... (Respiró hondo) Lo que realmente quería decirles es que me ofrezco como voluntario a donante de médula para salvar a mi sobrina.
*Diego: (Se levantó del sillón) Gracias... Pero usted la trata horrible. (Se fue)
*Sonohrina: Dieguito, espera... (Miró a su tío) Gracias, tío.
El tío Eugenio asintió sin decir nada y Sonohrina se fue a su cuarto. Encontró a Diego empacando, estaba furioso. Se acercó a él.
*Sonohrina: ¿Qué haces, Dieguito? No te vayas.
*Diego: Yo me voy por el bien de los dos, Sonohrina. Te amo, pero yo así no puedo convivir ni siquiera un día más. Lo siento.
*Sonohrina: Al menos quiero que conversemos un rato antes de que te vayas.
*Diego: (Dejó la maleta en el suelo y se sentó en la cama de Sonohrina) Dime.
*Sonohrina: Yo estoy muy enferma, Dieguito. No quiero que te vayas y me dejes sola, prometiste que te quedarías conmigo. No quiero tenerte preso conmigo, pero tampoco quiero que me dejes sola.
*Diego: Yo no te voy a dejar sola. Yo sólo me iré a un lugar cercano, te llamaré con frecuencia y te llevaré a la clínica cuando sea necesario. No te voy a abandonar.
*Sonohrina: (Comenzó a llorar) Si te vas de la casa, llévame contigo, Dieguito... (Lo abrazó) Yo te necesito... No te vayas...
*Diego: (La abrazó) Sonohrina... Tu tío es el culpable de esto. (Le besó el cuello)
*Sonohrina: (Lo besó) No te vayas, Dieguito... Si tú te vas, yo me voy a morir de una vez.
*Diego: Si tú mueres, yo me voy contigo... (La besó) Yo no te voy a dejar morir y menos por culpa mía.
*Sonohrina: (Se secó las lágrimas) Entonces no te vayas...
*Diego: (Le acarició la espalda con ternura) Sonohrina... Por ti... (Abrió la maleta y sacó todo el contenido) Me quedo... (La besó)
*Sonohrina: Gracias, Dieguito... (Sonrió entre lágrima y lo besó)
*Diego: Tú me das la fuerza... (La besó) Para soportar a tu tío... (La besó) Y por ti... (La besó) Me quedo... (Sonrió) No quiero verte llorar, Sonohrina...
*Sonohrina: (Sonrió) Te amo, Dieguito... (Lo besó)
*Diego: Y yo te adoro... (La besó) Tanto que no te dejaré morir, Sonohrina... (La besó)
Se acostaron en la cama mientras se besaban, se notaban felices. En ese momento, los padres de Sonohrina vieron la escena y les pareció que Diego amaba a su hija más de lo que ellos creían. Cerraron la puerta sin decir nada para dejarlos tranquilos.

jueves, 27 de agosto de 2009

14º Capitulo

Esa mañana, Sonohrina estaba en su cuarto con Diego viendo la televisión, veían Mr. Bean. El plan que Diego tenía de distraer a Sonohrina estaba funcionando a la perfección.
*Diego: (La abrazó) ¿Cómo te sientes, Sonohrina?
*Sonohrina: Bien... (Lo abrazó)
*Diego: ¿Bien bien o bien mal?
*Sonohrina: Bien bien... (Rio) Aunque...
*Diego: ¿Qué?
*Sonohrina: Me hacen falta los niños, Dieguito. Quiero verlos y tenerlos aquí conmigo. Pero entiendo que no podían venir por mi enfermedad.
*Diego: Ellos están en buenas manos.
*Sonohrina: Sí, lo sé.
En ese momento, llegaron Rebeca y Luca al cuarto de Sonohrina.
*Luca: Hola, Sonohrina ¿Cómo te sientes?
*Sonohrina: Bien.
*Diego: Bien bien (Rio) ¿Ustedes cómo durmieron?
*Rebeca: Bien...
*Diego: ¿Bien bien o bien mal? (Rio)
*Rebeca: Bien bien (Rio) ¿Ustedes qué tal?
*Diego: Cómodos.
*Luca: ¿Como dos tórtolos? (Rio)
*Diego: Sí... (Rio) Sí, bueno... Sí...
*Sonohrina: Ustedes no se quedan atrás ¿O sí?
*Luca: No, a decir verdad... (Rio)
Fueron a pasear luego de un rato. Agatha los llevó a todos a El Ávila. Allá estuvieron paseando y tomándose fotos. La pasaron muy bien. Comieron sandwichs de jamón.
*Sonohrina: Aquí fue donde nos conocimos, ¿verdad, Dieguito? (Lo abrazó)
*Diego: Sí, prácticamente fue aquí. Yo te vi por primera vez en el restaurante del hotel, pero aquí fue donde me llené de valor para hablarte.
*Sonohrina: Y yo te traté horrible... ¿Me disculpas?
*Diego: Hace tiempo te disculpé, Sonohrina.
*Sonohrina: Después de tanto tiempo, te quiero confesar algo...
*Diego: ¿Qué?
*Sonohrina: Yo estuve mirándote mucho luego de haberte tratado tan mal. Yo quise disculparme... Y no dejaba de pensar en ti... No encontraba el valor para pedirte disculpas, así que estabamos en lo mismo... (Rio)
*Diego: (La besó) Te amo, Sonohrina... (La besó) Con tus peros y tus lagrimitas a veces, te amo. (La besó y sonrió)
*Sonohrina: (No sonrió) ¿Con todo y mi enfermedad me amas?
*Diego: (Sonrió para tratar de animarla) No pienses en eso, Sonohrina. Sí te amo... (La besó)
*Sonohrina: (Lo besó y lo abrazó) No me abandones ¿Sí?
*Diego: No lo haré, te lo prometo... (Sonrió y la besó)
Mientras eso ocurría; Rebeca, Agatha y Luca caminaban por el lugar. Rebeca pudo conocer todo a la perfección porque ese lugar no es tan grande. Comieron postre mientras conversaban un poco.
*Luca: (Mirando a Diego y a Sonohrina) Veo que recuerdan viejos tiempos... (Sonrió) Prácticamente Sonohrina y Diego se conocieron aquí.
*Rebeca: ¿Cómo se conocieron?
*Agatha: Mi papá dijo que ellos se conocieron en una fiesta que hubo en el hotel Humboldt. Que empezaron a bailar y luego se sentaron en la barra a conversar un rato y a tomarse algo. Eso es lo que yo tengo entendido.
*Luca: No, Agatha. Tu papá vio a Diego por primera vez en esa oportunidad, pero así no se conocieron Diego y Sonohrina. La historia es un poco larga... (Respiró hondo) ¿La cuento?
*Rebeca: Sí. Yo siempre quise saber cómo se conocieron.
*Luca: Todo empezó en nuestro primer viaje a Venezuela. Estábamos en el restaurante del hotel y Diego miraba fijamente a la puerta de entrada, no le quitaba la vista de encima, luego al centro de servicios y después a una mesa que había cerca. Estaba como hipnotizado... (Rio) Miraba a Sonohrina, pero no se atrevía a hablarle. Al día siguiente la volvió a ver aquí como un par de veces. Se animó a hablarle y ella lo trató mal, le dijo que se fuera y lo miró como si se burlara de él. Esa misma noche pasó lo de la fiesta que dijo Agatha... (Miró a Agatha) Una pregunta... ¿Tu papá estaba en esa fiesta?
*Agatha: Sí, él estaba acompañando a mi prima y a unas amigas que ella quiso llevar a la fiesta.
*Rebeca: ¿Tú no estabas?
*Agatha: No. Yo estaba esa noche de viaje en Mérida, no estaba aquí en Caracas.
*Luca: Diego tiene su versión de cómo vivió él esa fiesta... (Rio) Al principio no quería ir porque se sentía mal luego de la mala experiencia con Sonohrina.
*Rebeca: ¡Qué hermoso! Fue amor a primera vista... (Rio) Me parece raro imaginarme a Sonohrina tratando mal a Diego... (Rio) No sé, me parece difícil de creer.
*Luca: Tendrás que creerlo, porque fue así.
*Rebeca: (Sonrió) ¿Y su primer beso fue en la fiesta?
*Luca: No... No me acuerdo dónde ni cuándo fue... (Rio)
Mientras todo eso sucedía, Walter llevó a los niños a casa de Joe, Frankie, Kevin, Nick, Adriana, Jackie y Danielle. Desde allá se iban de paseo al parque para que los niños jugaran. Al llegar al parque, los niños corrían por el parque junto con Frankie, hacían carreras.
*Joe: ¿Has hablado con Diego para saber cómo está Sonohrina?
*Walter: No, aún no. Hoy llamaré cuando los niños estén dormidos.
*Adriana: ¿Y los niños no saben aún lo que ocurre con Sonohrina?
*Walter: No. Ellos no tienen por qué enterarse ahora. Saben que Sonohrina está enferma, pero no saben lo que tiene.
*Jackie: Entiendo... (Volteó a ver a los niños y rio) ¿Qué hacen?
Todos voltearon a ver qué sucedía y vieron a los niños bailando alocadamente y Frankie filmando a cada uno. Todos rieron porque la escena resultaba muy cómica.
*Frankie: ¡Eso es! Hermoso... Lo hacen perfecto.
*Diego Luca: ¡Ay, me cansé! (Sudaba mucho)
*Elisa: Yo también... Voy a tomar agua.
*(Todos los niños): Te sigo...
Fueron adonde estaban Walter, Nick, Kevin, Adriana, Joe, Jackie y Danielle. Tomaron sus termos de agua y bebieron hasta que se sintieron mejor. Sudaban mucho.
*Walter: Uno por uno. Vengan acá con sus termos.
*Diego Luca: ¿Para qué?
*Walter: Ven acá y sabrás. Pero me tienes que dar el termo.
Diego Luca fue con Walter y le entregó el termo. Walter le quitó la tapa y derramó un poco de agua sobre la cabeza de Diego Luca.
*Diego Luca: (Movió la cabeza de un lado a otro) Está fría...
*Walter: Así está mejor. Es para que no estés tan sudado y pegostoso después. Siéntate aquí y respiras un poco. Vengan los demás porque les toca lo mismo...
Los niños fueron uno por uno y luego se sentaron. Frankie llegó al lugar y se sentó al lado de Milagros.
*Frankie: Fue divertido ¿Verdad?
*Milagros: Sí, pero estoy agotada... (Rio) Puede que más tarde sigamos.
*Frankie: Sí, posiblemente. Tengo hambre.
*Mateo: Yo también.
*Danielle: Bueno... (Sacó una cesta) Vinimos para acá a hacer día de campo. Así que vamos a comer ahora.
Todos comieron un poco de torta casera, sandwichs y galletas. Bebieron refresco y agua. Conversaban de diversos temas y reían.
*Diego Luca: Walter, ¿has ido a Venezuela?
*Walter: No.
*Mateo: Yo quiero ir.
*Milagros: Yo también.
*María Alejandra: ¿Cuándo vamos a ir a Latinoamérica?
*Joe: Cuando tengan las posibilidades de ir.
*Elisa: Un momento, Mateo y Milagros ya fueron... Cuenten qué tal les fue.
*Milagros: Bien.
*Mateo: Yo no me acuerdo... ¿Tú te acuerdas, Milagros?
*Milagros: No, pero supongo que nos fue bien. Quiero volver.
*Kevin: Nosotros hemos ido a Latinoamérica. La pasamos bien.
*Diego Luca: ¿Cuando vuelvan a ir nos llevarán?
*Nick: Depende... Por los momentos nos quedaremos aquí.
Diego Luca se quedó callado porque estaba muy cansado. Comieron un rato más y se tomaron fotos, pero luego anocheció y todos se fueron a la casa de Walter. Cenarían juntos barbacoa porque entre Joe, Kevin, Nick y Walter pudieron prepararla.
*Frankie: ¿Se divirtieron?
*Milagros: Sí... (Rio) ¿Sabes que le gustas a Elisa?
*Frankie: ¿En serio? (Sonrió)
*Elisa: ¡Te dije que no le digas! (Se ruborizó)
*María Alejandra: Tenía que saberlo.
*Mateo: ¿Y qué te parece ella, Frankie?
*Frankie: Me parece muy linda... (Rio) Es simpática... Pero tengo una mala noticia.
*Diego Luca: ¿Cuál?
*Frankie: No estoy interesado en tener novia en estos momentos. (Abrazó a Elisa) Quizá después ¿Sí?
*Elisa: Sí... (Le besó la mejilla)
*Diego Luca: (Comenzó a llorar) Extraño a mi mamá... A todos...
*Frankie: (Lo abrazó) No llores, ellos volverán. Todo estará bien.
En ese momento, llegaron Adriana y Jackie. La barbacoa ya estaba lista y era la hora de cenar.
*Adriana: La cena ya está lista, chicos (Vio a Diego Luca) ¿Qué le pasó?
*Diego Luca: (La abrazó) Extraño a mi mamá y a todos...
*Jackie: (Miró a Adriana con gesto de quien dice "No le digas...") Luki, todos volverán en poco tiempo.
*Diego Luca: Yo quería ir y estar allá con mi mamá... Ella está muy enferma y... Quería acompañarla...
*Jackie: Ellos volverán y tu mamá va a estar bien. (Lo abrazó) Vamos a comer. Los demás no lloren, porque todo saldrá bien y Sonohrina va a estar bien.
*Mateo: (Con ganas de llorar) De acuerdo. Soy fuerte y no voy a llorar.
*Milagros: (Con ganas de llorar) Yo también los quiero de regreso pronto.
*Frankie: Tengo una idea... (Sonrió para consolarlos) Después de la cena pueden hablar con ellos. Allá en Venezuela aún no es tarde... ¿Hay Internet en esta casa?
*Elisa: Sí, creo.
*Adriana: Es lo más probable, Frankie.
*María Alejandra: Pero no sabemos escribir un e-mail.
*Frankie: Lo escribiré yo, entonces.
*Elisa: ¿Tú sabes usar Internet?
*Frankie: Sí. Hablo con Walter para que me preste su computadora y le escribimos a todos.
*Adriana: Sí, pero primero a comer porque luego se enfría. Vamos.
Todos fueron a comer en el jardín. Los niños no dejaban de preocuparse por Sonohrina, Diego, Rebeca y Luca. Querían saber si todo estaba bien en Venezuela. Ellos aún no conocían a sus parientes venezolanos, pero María Alejandra y Elisa sí conocían a sus parientes colombianos porque ellos fueron a Italia en un verano a conocerlos, pero ellas no los recordaban a la perfección.
*Joe: Noto distintos a los niños. No están felices como siempre.
*Nick: Es verdad ¿Qué tienen?
*Walter: (Volteó a verlos) ¿Qué sucede niños?
*Frankie: (Visto que ninguno habló) Ellos quieren saber cómo están todos en Venezuela y quieren que regresen pronto. Los extrañan y quieren estar con ellos. Entonces yo les dije que después les escribiremos un e-mail... ¿Tú tienes Internet aquí?
*Walter: Sí. Está en el estudio. Yo te la presto después de comer para que les escribas. Yo estaré en la sala conversando con Joe, Nick, Kevin, Danielle, Adriana y Jackie.
*Frankie: De acuerdo, gracias. Chicos, tranquilos porque les vamos a escribir y si quieren les podemos mandar el video que hicimos en el parque.
*Kevin: Buena idea... ¿Verdad?
*Walter: Sí... Les va a gustar mucho.
Cenaron y luego cada quien se fue a sus asuntos. Frankie se fue al estudio con los niños a enviarles un e-mail a Sonohrina, Rebeca, Diego y Luca. Walter se fue con los demás a la sala para seguir charlando y riendo de las anécdotas que contaban.

sábado, 22 de agosto de 2009

13º Capitulo

Esa noche, Sonohrina estaba en su cuarto con Diego. Ella estaba acostada en la cama y Diego estaba sentado en el puff que había en el cuarto.
*Diego: Sonohrina... (Rio) Por mí no habría problema en quedarme a dormir en tu puff. Esta muy cómodo...
*Sonohrina: (Rio) Tú no vas a dormir en ese cojín ¿No quieres dormir a mi lado?
*Diego: De acuerdo... (Se levantó del puff y se acostó a su lado)
*Sonohrina: (Apagó la luz de la lámpara y abrazó a Diego) No me quiero morir, Dieguito.
*Diego: No te vas a morir, Sonohrina. Ellos van a querer salvarte porque tú eres parte de la familia.
*Sonohrina: La cuestión no es que quieran o no, Dieguito. Lo que pasa es que me enteré que el tratamiento es muy costoso y dudo que ellos puedan pagarlo todo.
*Diego: Si debo poner parte de mi dinero para salvarte, estoy dispuesto a hacerlo... (La besó) No te preocupes. Buenas noches.
*Sonohrina: Buenas noches, Dieguito. Duerme bien.
A la mañana siguiente, luego de desayunar, todos se sentaron en la sala.
*Diego: Bien, les quisiera consultar unas cuantas cosas.
*Eugenio: Más te vale que seas rápido, porque yo tengo que irme en diez minutos a trabajar. Es lunes y yo tengo trabajo, por si no sabías.
*(Mamá de Sonohrina): Eugenio, por si no lo sabes, esto trata de tu sobrina y de lo que está sufriendo en estos momentos. No puedes pensar en el trabajo siempre.
*Diego: Bueno, les dejaré los análisis de sangre en el estudio para que los revisen y estén al tanto de todo. Que conste que tienen más de un mes y no hemos podido realizar nuevos análisis, y de seguro ha empeorado. Lo que quiero saber ahora es quién está interesado en ser donante.
Ninguno levantó la mano; no porque no quisieran salvar a Sonohrina, sino porque no sabían quién tendría la médula compatible con la suya.
*Diego: ¡Vamos! No sean egoístas... Ella no puede morir...
*(Papá de Sonohrina): No es que querramos dejarla morir, Diego. Lo que pasa es que todos debemos examinarnos para saber quién tiene la médula que sea compatible y salvar a mi hija. No podemos decirte con exactitud quién la va a salvar.
*Diego: Bueno... ¿Están dispuestos, todos, a examinarse mañana mismo en la clínica?
*(Todos menos Sonohrina, Luca y Rebeca): Sí.
*Diego: Genial. Bueno, eso era... Ahora sí pueden irse al trabajo o adónde sea que tengan que ir.
*Loredana: Tengo una buena idea.
*Luca: ¿Cuál?
*Loredana: Examinen de nuevo a mi hermana para saber si ha evolucionado o no la enfermedad. Pero háganlo hoy.
*Agatha: Es verdad. Así sabremos con más exactitud cómo va todo.
*Rebeca: Ya se sabe que todo va mal. Pero es una buena idea.
*Agatha: Les doy el aventón hasta la clínica. Yo voy a la universidad con Loredana y los puedo dejar en la clínica que queda cerca.
*Diego: (Sonrió) Gracias.
Agatha, Loredana, Sonohrina, Rebeca, Luca y Diego se montaron en la camioneta de Agatha. Ella los llevó a la clínica y siguió con Loredana hasta la universidad. Sonohrina volvió a examinarse nuevamente, pero también le mostró al médico los análisis realizados en Italia.
Mientras eso ocurría, Walter dejó a los niños pintando en la sala. Estaban conversando sobre muchos temas.
*Diego Luca: ¿Cómo estará mi mami?
*Elisa: No lo sé. Imagino que habrá llegado bien a Venezuela.
*Mateo: Seguramente. Ya la extraño.
*María Alejandra: Yo los extraño a todos.
*Milagros: Yo también... ¿Y cuándo vuelven?
*Mateo: Cuando mami se cure. Eso fue lo que me dijo tío Luca.
*Diego Luca: Yo quiero que ella se cure rápido de lo que sea que tenga.
*Milagros: Si se cura, no va a volver a sangrar.
*Diego Luca: Yo quiero que se cure...
*(Los demás): También yo.
*Milagros: ¿Y qué haremos hoy?
*Elisa: No lo sé...
*María Alejandra: Tengo hambre.
*Mateo: (Rio) Tú siempre tienes hambre.
*María Alejandra: (Rio) Sí, tengo hambre... ¿Dónde está Walter?
*Milagros: Creo que está en casa de los vecinos, pero no sé. Él dijo que nos traería una sorpresa.
*Elisa: ¡Sí! ¿Y qué será?
*Mateo: No sé...
Al rato, llegó Walter con un par de bolsas grandes y blancas. Los niños lo recibieron con abrazos y besos.
*Diego Luca: ¿Por qué tardaste tanto?
*Walter: Porque tenía que estar lista la sorpresa.
*María Alejandra: ¡Tengo hambre!
*Walter: Entonces la sorpresa te gustará mucho.
*María Alejandra: ¿Por qué?
*Walter: Comida china.
*(Todos): ¡Sí!
*Mateo: ¡Ya era hora! Yo también tengo hambre.
*Walter: Ya les sirvo y comemos.
*Elisa: ¿Y por qué no pudimos acompañarte?
*Walter: Si me hubiesen acompañado, la sorpresa se arruina... ¿Se portaron bien?
*Milagros: Sí.
*Walter: ¿Seguro?
*(Todos): Sí.
*Diego Luca: Después te mostraremos lo que hicimos.
*Mateo: Esperamos te guste porque también es una sorpresa...
*Elisa: ¡No... Es nuestra carta a Papá Noel!
*Milagros: ¡Elisa... Él no sabía! Ya arruinaste la sorpresa.
*Walter: (Sirviendo los platos) No la arruinó. Yo aún no sé qué le pidieron a Papá Noel.
*María Alejandra: Eso lo verás en poco tiempo.
*Mateo: Cuando terminemos de comer te lo mostraremos.
Comieron y luego todos se fueron a la sala. Los niños llevaron las cartas que habían escrito para Papá Noel. Los que sabían escribir tenían una letra muy grande y un poco desordenada, los que no sabían escribir sólo dibujaron lo que querían para Navidad y lo interpretaron. Los dibujos eran sólo abstractos, pero así dibujan los niños de esa edad, así que era normal.
*Mateo: Te leo la mía. "Querido Papá Noel. Hola. Bueno, yo quiero un hermano menor y que mi mamá se cure. También quiero algún juego de Nintendo Wii, figuras de acción y que la niña que me gusta se fije en mí. Chao. Mateo." (Sonrió)
*Milagros: Ahora yo. "Querido Papá Noel. Hola. Quiero que cures a mi mamá de lo que sea que tenga y nos traigas un hermano menor que se llame Walter. Quiero que me traigas el juego completo de My Little Ponny en la heladería, la Barbie entrenadora de delfines y que mi cantante favorito se enamore de mí. Chao. Milagros." (Sonrió)
*Diego Luca: Yo quiero. Bueno, como no sé leer ni escribir aún, hice un dibujo de lo que quiero. Mira. (Le mostró el dibujo a Walter y se lo explicó) Acá mi mami feliz con mi papi y todos. Este es mi hermano bebé que va a venir. Se va a llamar como tú. Este es el robot de juguete que quiero y aquí estoy yo de super héroe. Soy Super Luki. (Sonrió)
*Walter: Está bien... (Rio)
*Elisa: Yo quiero... Mira. (Le mostró el dibujo) Aquí está el ponny que quiero que me traiga Papá Noel y mi hermano bebé; yo le quería llamar Walter, pero Diego Luca me quitó la idea... Así que ahora no sé cómo se va a llamar. Aquí están mis papás, María Alejandra y yo con un corazón. (Sonrió) ¿Te gustó?
*Walter: Sí. Está muy lindo.
*María Alejandra: Y el mío. (Le mostró el dibujo) Esto es la playa y la muñeca que quiero que me regale Papá Noel. No le pedí mucho porque los niños pobres también tienen derecho a sus regalos. Estamos mi mami, papi, Elisa, mi hermanito bebé... Yo le quiero llamar Señor Cara De Papa... (Rio) Y yo. Aquí está mi casa y todos felices... (Sonrió)
*Walter: Muy lindos todos. Espero de veras Papá Noel les traiga todo eso, porque se portan bien y son generosos.
*(Todos): ¡Gracias...! (Sonrieron)
*Elisa: ¿Y tú qué pediste?
*Walter: No... No pedí nada material. Sólo quiero que Sonohrina se cure y que todos estemos bien.
*María Alejandra: ¡Qué bueno! Chao. Vamos a jugar.
*Diego Luca: ¡Qué mala eres! Ni lo invitas ¿Te unes?
*Walter: De acuerdo. (Rio)
Todos salieron al jardín y jugaron alegremente a las escondidas, hasta que se hizo de noche y tuvieron que entrar a bañarse y luego a ver una película. Se acostaron a dormir temprano porque al día siguiente les esperaba un paseo junto a Joe, Nick, Kevin, Frankie, Danielle, Adriana y Jackie.

miércoles, 19 de agosto de 2009

12º Capitulo

Dos meses después, Sonohrina estaba empacando y preparándose para su viaje a Venezuela. Los niños se quedarían con Walter.
*Diego Luca: Yo también quiero ir a Venezuela...
*Diego: No puedes acompañarnos esta vez, Luki.
*Luca: Nosotros vamos porque tu mamá está enferma, la cura se encuentra sólo en Venezuela.
*Milagros: ¿Y qué tiene mami?
*Rebeca: Ella se va a curar, no se preocupen. Para eso vamos a Venezuela, a curarla.
*Mateo: Si la curan, dejará de sangrar y de desmayarse, ¿verdad?
*Diego: Sí.
*Diego Luca: ¿Por qué no podemos ir?
*Rebeca: Porque no tienen pasaporte. Ninguno de ustedes tiene.
*Elisa: Yo quiero tener pasaporte.
*Diego Luca/Milagros/Mateo/María Alejandra: Yo también.
Esa fue la última noche que Sonohrina pasó en Verona antes de ir a Venezuela para realizarse un tratamiento que le curara la aplasia medular. Estuvo llorando antes de salir a la estación de tren al día siguiente. Diego la abrazó y le acariciaba la espalda mientras le besó la cabeza.
*Luca: Sonohrina, estarás bien. No te preocupes. (La abrazó)
*Sonohrina: Yo... No me quiero morir...
*Rebeca: No te vas a morir, Sonohrina. Nos vamos a Venezuela para salvarte.
*Sonohrina: ¿Y si no me quieren salvar? ¿Y si no pueden salvarme? (Abrazó a Diego) Yo no me quiero morir...
*Diego: Ellos querrán ayudarte, Sonohrina. Son tus parientes.
*Luca: Diego tiene razón, Sonohrina. Ellos te quieren a pesar de todo y no te dejarían morir.
Llegaron a Venezuela y Sonohrina decidió llamar a su casa para avisar que estaba en Venezuela. Quería verlos y hablarles sobre su situación. Atendió el teléfono su prima Agatha. Sonohrina no sabía que Agatha se estaba quedando en su casa, ella era hija de su tío Eugenio, pero le daba libertad de hacer lo que quisiera siempre. Sonohrina era quien no tenía la libertad de hacer lo que quisiera.
*Agatha: ¿Te sorprende saber que ahora estoy viviendo en tu casa?
*Sonohrina: Sí... No sabía que estabas allá.
*Agatha: Bueno, ya lo sabes ¿Te acordaste de nosotros ahora que vives en Italia? Digo, luego de olvidarnos.
*Sonohrina: Estoy aquí en Venezuela, Agatha. Necesito la ayuda y el apoyo de todos ustedes y no estoy para bromas.
*Agatha: ¿Dónde estás? Yo paso buscándote para que vengas a casa y nos cuentes.
*Sonohrina: Sí, estoy en el aeropuerto.
*Agatha: De acuerdo, voy para allá. Chao.
*Sonohrina: Nos vemos. Chao.
Sonohrina colgó el celular. En su casa había espacio para que Diego, Luca y Rebeca se quedaran a dormir allá también. Mientras eso ocurría, los niños estaban con Walter y fueron a visitar a Joe, Frankie, Kevin, Nick, Jackie, Danielle y Adriana.
*Walter: ¿Ya consiguieron escuela para Frankie?
*Joe: Sí... (Sonrió) Y a Frankie le agradó el ambiente.
*Frankie: No usaré uniforme... (Celebraba contento) Entraré a estudiar en Septiembre, sé que es mucho tiempo sin hacer nada productivo.
*Nick: Sí haces algo productivo. Estás aprendiendo italiano para poderte comunicar y defender en tu nueva escuela.
*Frankie: Eso sí.
*Adriana: ¿Y los niños que quieren para navidad?
*Diego Luca: Me enteré hoy que mi mamá está muy enferma. No podré tener mi hermano menor, sólo quiero que mi mamá se cure. Ellos se fueron a Venezuela y nosotros nos estamos quedando con Walter.
*Jackie: ¿Y qué tal es Walter como niñero? (Rio)
*Milagros: Bueno, es simpático, nos trata bien y nos lleva de paseo a veces.
*Mateo: Nos deja jugar en su jardín...
*Milagros: Nos deja comer dulces...
*Elisa: Cuenta cuentos antes de dormir...
*María Alejandra: Nos trata bien.
*Joe: Me alegra saberlo. Kevin, ya tienes niñero para tu hijo. (Rio)
*Kevin: (Rio) ¿Por ti no habría problema, Walter?
*Walter: Sin problemas... Cuando quieran estoy disponible... (Rio)
Mientras eso ocurría, Agatha había llegado al aeropuerto y vio a Sonohrina junto con Diego, Luca y Rebeca. Se acercó a ellos. No le quitaba la vista de encima a Diego.
*Agatha: Prima, discúlpame la tardanza... (La abrazó) ¿Cómo llegaste?
*Sonohrina: Bien.
*Agatha: ¿Y ellos quiénes son? (Sin dejar de mirar a Diego)
*Sonohrina: Mi esposo Diego, mi cuñado Luca y su esposa Rebeca.
*Diego: Mucho gusto. (Le estrechó la mano sonriendo)
*Agatha: El gusto es mío. Soy la prima de tu esposa. Me llamo Agatha. (Le estrechó la mano a cada uno) ¿Ellos se van a quedar también en la casa?
*Sonohrina: Sí. Bueno, ahora vamos a casa. Estoy ansiosa por llegar.
*Luca: ¿Ansiosa o te sientes mal?
*Sonohrina: (Lo abrazó) Estoy cansada.
*Diego: Vamos entonces a la casa.
*Sonohrina: Sí.
Se montaron en la camioneta de Agatha. Sonohrina se quedó dormida mientras su prima manejaba.
*Diego: (Le besó la frente) Se ve tan linda cuando duerme.
*Rebeca: ¡Diego, por Dios! (Rio)
*Diego: (Abrazó a Sonohrina) Mi princesa... (Le besó la mejilla) Te vas a recuperar del todo. Vas a ver.
*Agatha: ¿A qué te refieres con eso, Diego?
*Diego: Ella está enferma.
*Luca: ¿No te dijo nada? Vinimos a curarla.
*Agatha: Ella no dijo nada. Sólo llamó a la casa para que alguien los fuera a recoger al aeropuerto.
Llegaron a casa y Diego despertó a Sonohrina. Ella abrió los ojos y abrazó a Diego.
*Diego: Vamos a entrar, Sonohrina. Ya llegamos.
*Sonohrina: ¿Llegamos?
*Luca: Sí. Vamos.
*Sonohrina: Dieguito, ayúdame. Me siento mal.
*Diego: De acuerdo.
Entraron a la casa y no había nadie porque todos habían salido. Se sentaron en la sala para conversar luego de llevar las maletas al cuarto de huéspedes y al cuarto de Sonohrina. Conversaban sobre el viaje. Al rato, se abrió la puerta y Loredana entró a la casa.
*Loredana: ¡No sabía que vendrías! (Abrazó a Sonohrina) Me llevé una gran sorpresa... ¡Cuánto tiempo sin vernos! Espera a que mamá y papá sepan que estás aquí...
*Sonohrina: (Sonrió) Quien no quisiera ver es a mi tío Eugenio. Sé cómo se pondrá al saber que Diego está aquí.
*Agatha: Mi papá siempre habló de que mi prima tuvo romances con un cantante, ¿es cierto?
*Diego: Sí, soy yo. Tengo una banda con mi hermano allá en Italia.
*Agatha: (Sonrió) ¡Qué bien!
*Loredana: Mamá y papá están por llegar. De veras no sabíamos que vendrías. Habríamos comprado más comida.
*Luca: No te preocupes... (Sonrió)
*Loredana: ¿Y ella quién es? (Viendo a Rebeca)
*Luca: Es mi esposa.
*Rebeca: Mucho gusto, soy Rebeca. (Sonrió)
*Loredana: (Le estrechó la mano sonriendo) Soy Loredana.
*Sonohrina: Es mi hermana.
*Rebeca: Se parecen mucho... (Rio)
En ese momento, entraron los padres de Sonohrina a la casa junto con el tío Eugenio. Escucharon las risas de los chicos en la sala.
*Eugenio: ¿Agatha trajo amigos?
*(Papá de Sonohrina): Puede que sí ¿Ella te dijo que vendría gente?
*Eugenio: No.
*(Mamá de Sonohrina): Dejemos las compras en la cocina y veamos quiénes son.
Dejaron los alimentos que habían comprado en la cocina y pasaron a la sala. Las risas se detuvieron y Sonohrina empalideció al ver a su tío Eugenio. Reinaba un gran silencio.
*(Mamá de Sonohrina): ¡Hija! (La abrazó) Después de tanto tiempo, mi muñeca... ¡Qué sorpresa, mi nena!
*Eugenio: (Enojado) ¡¿Y tenías que traer a ese...?!
*Diego: (Se levantó del sillón) ¿A ese qué?
*(Papá de Sonohrina): Ya, Eugenio... Le tienes la guerra montada al esposo de tu sobrina... Cálmate.
*Eugenio: ¿Que me calme? (Mirando a Diego fulminantemente) Yo a este le debo una paliza.
*(Mamá de Sonohrina): No es el momento, Eugenio...
*Sonohrina: (Se levantó del sillón y abrazó a Diego) Dieguito... Siéntate ¿Sí? No te pongas agresivo con mi tío.
*Diego: Él fue quien se puso agresivo, no yo.
*Luca: En fin, a lo que vinimos, Diego. No es a pelear... Nosotros vinimos porque... Dilo tú, Diego. No me sale decirlo.
*Diego: Sólo uno de ustedes puede salvar a mi esposa. Ella está muy enferma en este momento.
*Loredana: ¡¿Qué?! (Asombrada)
*Diego: Sí... Entonces, ella necesita un trasplante de médula porque sufre de aplasia medular. En Italia no podemos salvarla porque mi médula no es compatible con la suya y todos sus familiares están aquí...
Todos quedaron en un silencio muy incómodo. No podían creer que Sonohrina tuviera una enfermedad tan horrible. Un tratamiento para curar la aplasia medular resultaba muy costoso en Venezuela y la familia de Sonohrina no contaba con una cantidad tan grande de dinero. Harían todo lo posible por ayudarla a superar esa enfermedad.

lunes, 17 de agosto de 2009

11º Capitulo

Diego se quedó dormido al lado de Sonohrina. Luca se acercó al cuarto para saber cómo estaba todo.
*Rebeca: ¿Cómo está Sonohrina?
*Luca: Está durmiendo con Diego. Los dos están muy dormidos abrazados.
*Rebeca: El amor entre ellos es muy fuerte. Si Sonohrina muere, Diego sufriría mucho...
*Luca: Diego no va a dejar que Sonohrina muera.
En la madrugada, Diego despertó y le besó el vientre a Sonohrina. Sonrió al verla dormir tranquila y respirando normalmente. Le acarició la frente y la besó, ella despertó.
*Sonohrina: ¡Ay, Dieguito! (Se sentó) Me voy a bañar... (Se levantó de la cama)
*Diego: (Le tomó la mano derecha) ¿Cómo te sientes?
*Sonohrina: Bien... (Sonrió) Ahora me voy a bañar y luego podremos dormir abrazados.
*Diego: De acuerdo. Si te sientes mal, avísame.
*Sonohrina: Sí... (Se levantó de la cama)
Diego se acostó en la cama, pero no se durmió, quería estar pendiente de cualquier emergencia que tuviera Sonohrina. Rato después, ella salió de la ducha y se acostó en la cama luego de secar su cabello. Diego la esperaba y la abrazó, así durmieron los dos hasta el día siguiente.
Esa mañana soleada, Luca, Rebeca, Sonohrina y Diego fueron a casa de Walter para buscar a los niños y llevarlos de vuelta a casa. Diego Luca abrazó a Sonohrina cuando la vio.
*Diego Luca: Te extrañé, mami...
*Sonohrina: Yo también, Luki...
*Milagros: ¿Y a mí?
*Sonohrina: (Sonrió) También... (Le besó la mejilla) A todos los extrañé.
*Rebeca: ¿Y cómo se portaron los niños?
*Walter: Bien, mejor de lo que esperaba... (Rio) De veras se portan bien, me gustó ser el niñero.
*Diego: (Rio) Bueno, ahora tenemos niñero... (Alzó a Diego Luca) Vamos a quedarnos un rato más... ¿No importa, Walter?
*Walter: No hay problema, están en su casa. (Sonrió)
*Luca: Gracias...
*Walter: Además, así me hacen compañía porque estoy tan solo aquí...
*Sonohrina: Tienes razón.
Pasaron unas horas agradables, mientras los niños jugaban en el patio, ellos conversaban y reían juntos.
*Walter: ¿Cómo te sientes, Sonohrina?
*Sonohrina: Ahora me siento bien.
*Walter: ¿Ya sabes lo que realmente tienes?
*Sonohrina: Sí, pero no quiero pensar en eso...
*Luca: ¿Sonohrina, tú crees que Diego te va a dejar morir?
*Sonohrina: (Sonrió y abrazó a Diego) Si lo haces, te arrepentirás... (Rio)
*Diego: Tranquila... (La besó) Tú no te vas a morir, Sonohrina.
*Rebeca: No dudes de su palabra, Sonohrina.
*Sonohrina: De acuerdo...
*Diego: ¿Podemos hablar en privado, Walter?
*Walter: Sí...
Walter y Diego fueron al cuarto de Walter para hablar en privado. Cerraron la puerta con seguro.
*Diego: ¿Hay problema en que te quedes con los niños mientras voy en Diciembre a Venezuela con Sonohrina?
*Walter: No... ¿En Dieciembre te vas?
*Diego: Sí... Sé que es muy pronto, pero mientras menos tarde en ir, mejor. Necesito tiempo para convencer a la familia de Sonohrina de conseguir algún donante. Creeme, son muy firmes en sus decisiones, pero si dicen que no...
*Walter: Un miembro de la familia está en peligro y sólo uno de ellos puede salvarla ¿Cómo van a decir que no?
*Diego: Es una suposición... Escucha, yo voy a comprar los regalos de navidad para los niños antes de irme y tú se los das en la mañana de Navidad.
*Walter: De acuerdo, te deseo éxito.
*Diego: Gracias...
*Walter: Ya verás que podrás salvar a Sonohrina.
*Diego: Eso espero.
Mientras eso ocurría, Luca, Rebeca y Sonohrina conversaban en la sala.
*Sonohrina: No me dejen sola, quiero que vengan a Venezuela con nosotros.
*Luca: Vamos a ir con ustedes, Sonohrina. No te preocupes...
*Rebeca: No te dejaríamos sola en un momento como este. Somos parte de tu familia, aunque sea por afinidad.
*Luca: Quienes no pueden ir a Venezuela son los niños. Ellos no pueden saber lo que realmente tienes. Ya conseguiremos la manera de convencerlos para quedarse aquí.
*Sonohrina: Espero curarme de esto... (Comenzó a llorar) ¡Yo no me quiero morir! En serio...
*Luca: No te vas a morir. Diego no va a permitir que eso ocurra.
*Rebeca: Conociéndolo, y conociendo el amor que siente por ti, él va a mover cielo y tierra por salvarte.
En ese momento, entraron los niños a la sala. Mateo estaba llorando.
*Mateo: ¡Mami! ¡Mami, me duele!
*Sonohrina: (Se secó las lágrimas muy rápido y trató de disimular que había estado llorando) ¿Dónde?
*Mateo: Aquí... (Le enseñó el dedo índice de la mano derecha)
*Rebeca: ¿Qué fue lo que pasó?
*Milagros: Yo le dije que la dejara tranquila. Vio una abeja muy grande montada en una flor y se puso a espantarla.
*Diego Luca: Él dijo que quería jugar con ella... Y la abeja empezó a volar.
*Elisa: Sí, entonces Mateo le empezó a molestar con la mano. Como si espantara una mosca.
*María Alejandra: Y la abeja lo picó.
*Luca: Ven, Mateo... Yo sé cómo curarte.
Mateo se acercó adonde estaba Luca y él le sacó el aguijón de la abeja, que estaba aún dentro de su dedo. En eso, llegaron Walter y Diego a la sala. Walter buscó agua oxigenada para desinfectar la picadura que tenía Mateo en el dedo índice de la mano derecha.
*Milagros: ¿Por qué llorabas mami?
*Diego Luca: ¿También te picó la abeja?
*Sonohrina: No, no niños. Yo no estaba llorando... Tenía algo en el ojo y sentía comezón.
*Walter: ¿Quién quiere helado? (Para cambiar de tema)
*(Todos los niños): ¡Yo!
*Walter: Entonces vamos a comprar helados a la heladería que queda cerca.
*(Todos los niños): ¡Sí!
Todos fueron a la heladería para comer helados. Walter tuvo que pagar porque invitó.
*Diego: ¿Qué quieren ser cuando sean grandes?
*Diego Luca: Bueno... Yo ya soy grande...
*Luca: Se refería al trabajo que llevarán.
*Mateo: ¡Yo quiero ser cantante!
*Walter: Es muy duro ¿Eh?
*Mateo: Sí, por eso.
*María Alejandra: Yo quiero... Ser bailarina.
*Elisa: Yo quiero ser una princesa...
*Rebeca: (Rio) Ya eres una princesa...
*María Alejandra: ¿Y yo?
*Rebeca: También.
*Milagros: ¿Y yo?
*Diego: También... (Rio) Ustedes son todos príncipes y princesas...
*Milagros: Yo quiero ser veterinaria...
*Diego Luca: Y yo quiero... ¡Yo quiero ser un super héroe!
Todos sonrieron. Sonohrina alzó a Diego Luca.
*Diego: No es fácil... (Rio)
*Diego Luca: Sí, yo sé. Yo quiero ser como Super man... ¡Super Luki!
*Rebeca: (Rio) ¡Qué bello!
*Sonohrina: Sí, es muy tierno... Pero para eso, tienes que comer tus verduras... Todas. (Le besó la mejilla) Y tienes que hacer la tarea...
*Diego Luca: No. Super man no tiene tareas, mami.
*Sonohrina: Sí tiene. Salvar al mundo.
*Diego Luca: ¿Y qué me dices de las verduras?
*Sonohrina: Es grande y fuerte porque se las comía todas.
*Diego Luca: ¿No podemos cambiarlo por dulces?
*Diego: ¡Qué negociante! (Rio) No, no puedes...
Pasearon muy tranquilos por el centro comercial que había en frente de la heladería. En realidad la pasaron muy bien, lo mejor de todo fue que Sonohrina no se sintió mal.

viernes, 14 de agosto de 2009

10º Capitulo

Diego entró en el cuarto y vio a Sonohrina durmiendo tranquila. Se acostó a su lado y le acarició el cabello. Sonohrina despertó y ya se sentía bien, lo abrazó.
*Diego: Sonohrina... (La abrazó y le besó el cuello) ¿Cómo estás?
*Sonohrina: Bien ¿Y tú?
*Diego: No muy bien. Traigo una mala noticia...
*Sonohrina: (Se sentó) ¿Estuviste llorando?
*Diego: (Se sentó) Sí. Sonohrina, lo que tienes no es cualquier cosa.
*Sonohrina: Sí, la anemia que tengo que cuidarme.
*Diego: No... No es anemia... (La abrazó y la besó)
*Sonohrina: ¿Y qué es entonces?
*Diego: (Respiró profundo y comenzó a llorar) Tenemos que ir a... Venezuela... Necesitas un trasplante de médula. Tienes aplasia medular...
*Sonohrina: (Empalideció y gritó) No... No puede... (Comenzó a llorar) No puede ser... Yo no... Dieguito... Yo no me quiero morir...
*Diego: No te vas a morir porque yo no te voy a abandonar, Sonohrina. Nos vamos a Venezuela en dos meses... Fue el vuelo más cercano que encontré... (La abrazó) No te vas a morir... No tomes más esas pastillas...
*Sonohrina: No puedo, Dieguito. Si a mí me pidieron tomar esas pastillas es porque...
*Diego: Sonohrina, te están haciendo daño. Esas pastillas no te van a curar.
*Sonohrina: De acuerdo, las dejaré.
*Diego: Es tarde para que digas eso, Sonohrina. Me tomé la libertad de agarrar todas esas pastillas y las boté a la basura. Ya el camión del aseo se las llevó. Así que, queriéndolo o no, ya te deshiciste de esas pastillas.
*Sonohrina: (Lo abrazó) ¡No me quiero morir!
*Diego: No te vas a morir, Sonohrina... ¿Quieres bajar a comer algo?
*Sonohrina: Sí...
Mientras eso ocurría, los niños estaban en casa de Walter jugando y pintando. Walter les compró galletas a todos, las comieron mientras veían televisión.
*Diego Luca: ¿No hay problema si mi hermanito se quiere llamar como tú?
*Walter: (Rio) ¿Qué hermanito?
*Milagros: El hermanito que nos va a traer Papa Noel.
*Mateo: Sí, se llamará Walter. (Lo abrazó) Eres muy bueno con nosotros. Gracias.
*Walter: Gracias a ustedes... (Los abrazó a todos) A pesar que no son mis hijos, me hacen feliz.
*María Alejandra: ¡Pero yo también quería ponerle Walter a mi hermanito!
*Walter: ¿Ustedes también pidieron un hermanito?
*Elisa: Sí, pero Diego Luca nos quitó la idea.
*Diego Luca: No, a mí se me ocurrió antes... Walter, ¿cuándo estarán listos nuestros cuartos en casa?
*Walter: No lo sé. Tu papá me dijo que me llamará cuando esté todo listo para que vayan a su casa.
*Elisa: ¿Nos quedaremos a dormir contigo?
*Walter: Es muy probable.
*María Alejandra: ¡Sí!
*Milagros: Tengo sueño...
*Walter: Les prepararé todo para que duerman aquí. Esperen.
Walter fue al cuarto de huéspedes y les preparó el cuarto para que duerman ahí. Tuvo que contarles un cuento para que durmieran tranquilos juntos.
En la casa Fainello todos estaban muy tristes por la enfermedad de Sonohrina. Estaban sentados en el sillón más grande de la sala conversando sobre cualquier tema que no tuviera nada que ver con la enfermedad de Sonohrina y que fuera divertido para tratar de animarse, pero no funcionaba.
*Sonohrina: (Se recostó en el hombro de Diego) Tengo sueño y...
*Diego: ¿Y...? (La abrazó) ¿Te sientes mal?
*Sonohrina: Sí... (Lo abrazó)
*Luca: Será mejor que la lleves a dormir, Diego.
*Rebeca: ¿Puedes caminar?
*Sonohrina: No...
*Luca: ¿Te duele algo?
*Sonohrina: Me duele todo, Luca...
*Luca: Tendrás que llevarla hasta el cuarto, Diego.
*Rebeca: ¿Ya te bañaste?
*Sonohrina: No... Pero no te preocupes... Me bañaré ahora mismo...
*Luca: Si te sientes muy mal y no puedes caminar ¿Cómo vas a hacer?
*Rebeca: Luca, Diego puede estar atento a cualquier emergencia. Aparte, nosotros tendremos que decorar en serio los cuartos de los niños, así sea ponerle cualquier cosa de más o quitarle algo. Sino, se darán cuenta que era mentira lo de la decoración de los cuartos.
*Luca: Es verdad... Diego, acompaña a Sonohrina hasta el baño y estate atento a cualquier emergencia.
*Diego: De acuerdo...
Diego llevó a Sonohrina hasta el cuarto y cuando estaba por entrar al baño, Sonohrina lo abrazó.
*Diego: ¿Qué pasó, Sonohrina?
*Sonohrina: Estoy mareada... No me siento bien...
*Diego: ¿Quieres acostarte?
*Sonohrina: Sí...
Diego la llevó hasta la cama y la acostó para que descansara. Sonohrina estaba pálida, cerró los ojos y respiraba con dificultad. Comenzó a sangrar por la nariz de nuevo. Diego le limpió la cara y la abrazó.

miércoles, 12 de agosto de 2009

9º Capitulo

Diego no podía creer lo que estaba pasando. Sabía que ocultárselo a Sonohrina empeoraría la situación, pero sabía también que decírselo la afectaría emocionalmente. Así pasó una semana muy tensa para Diego, Sonohrina sólo creía que estaba cansado. Diego estaba preparándose mentalmente para saber si podría ayudar a Sonohrina como donante, tenía esperanzas pero no quería ilusionarse.
*Sonohrina: (Lo abrazó sonriendo) ¿Adónde vas?
*Diego: A la clínica para saber si tus resultados están listos (Mintió en parte) ¿Y tú?
*Sonohrina: Yo voy con Rebeca, Jackie, Danielle, Adriana, Joe, Nick, Kevin, Frankie, Walter y los niños al club. Vamos a pasar el día en una piscina. Será divertido y los niños necesitan sol.
*Diego: Sonohrina, te pido que te cuides mucho. Si te sientes mal, no dudes en llamarme al celular ¿De acuerdo?
*Sonohrina: Sí. Te llamaré si me pasa algo.
Cada uno se marchó. Luca fue con Diego a la clínica. Lo notó muy tenso y eso le preocupaba, porque se notaba que era por algo muy grave.
*Luca: ¿Qué tienes, Diego?
*Diego: (Se cubrió la frente con ambas manos) Luca, yo sé lo que tiene Sonohrina. Yo no voy a buscar sus resultados ahora, voy a buscar los míos.
*Luca: No entiendo... ¿Los tuyos?
*Diego: Sí. Luca, te lo voy a contar. No le digas nada a Sonohrina. Ella tiene... (Se le aguaron los ojos) Aplasia medular.
*Luca: ¿Qué? ¿Y qué tiene que ver eso contigo? Osea, en el sentido de... ¿Por qué te hiciste análisis tú también?
*Diego: Sonohrina necesita un donante de médula, pero debe ser una idéntica a la suya. Yo quise saber si puedo ser donante y me hicieron los análisis. Ahora sólo voy a saber si puedo donar parte de mi médula a Sonohrina o no.
*Luca: Te desvives por ella...
*Diego: Luca, es mi esposa. No pienso dejarla morir. Yo la amo.
*Luca: ¿Y se lo has dicho?
*Diego: No. Aún no debe saberlo.
*Luca: ¿Por qué?
*Diego: Se va a deprimir.
*Luca: Dícelo hoy. Si esperas mucho, también será malo que se entere tarde. De seguro peor.
*Diego: Veré cómo se lo digo.
Entraron a la clínica y solicitaron conocer los resultados. El médico se les acercó, no se veía muy contento.
*(Médico): Recuérdalo. Te dije que no te prometía nada. Míralo por ti mismo, Diego. Lo siento. (Le entregó el sobre con los reslutados)
Diego tomó el sobre para saber los resultados. Su médula no tenía posibilidades de salvar a Sonohrina. Comenzó a llorar y se sentó en una silla que había cerca. Luca lo abrazó para consolarlo, pero él no le prestó atención. Seguía llorando.
*Diego: No quiero que... Que Sonohrina se muera... No quiero...
*Luca: Tranquilo, ella no va a morir porque... (Lo abrazó) Porque yo te voy a ayudar a salvarla.
*Diego: ¿Cómo? Si mi médula no funciona para ayudarla a seguir viviendo, la tuya menos va a funcionar.
*Luca: No funcionará, pero te ayudaré a viajar a Venezuela para conseguir el donante. Pero debes mencionarle todo a Sonohrina, sino será peor después.
*Diego: De acuerdo...
Mientras eso ocurría, Sonohrina estaba en el club con sus amigos y los niños. Joe, Nick, Kevin y Walter se bañaban en la piscina con los niños. Rebeca, Danielle, Jackie y Adriana acompañaban a Sonohrina comiendo un poco de pizza. Sonohrina comenzó a sentirse mareada, pero no mencionó nada y se tomó una pastilla vitamínica para no preocupar. Todas conversaban alegremente.
*Elisa: Mami... Me caí... (Llorando)
*Rebeca: Eso te pasó por correr mucho. Ven, quédate tranquila aquí.
*Diego Luca: Elisa, ¿estás mejor?
*Rebeca: Sí, estará mejor. Pero no puede correr. No quiero que se vuelva a caer mi princesita.
*Mateo: Bueno, entonces tendremos que jugar nosotros. Vamos, Diego Luca.
*Danielle: ¿A qué juegan?
*María Alejandra: Al escondite.
*Jackie: ¡Qué bien! Diviértanse.
*Milagros: Gracias...
Sonohrina se sentía peor a cada segundo que pasaba. Tomó su celular y le pasó un mensaje de texto a Diego para que la fuera a buscar, pero no le quedaba crédito en el celular y el mensaje no fue enviado.
*Adriana: ¿Qué tienes, Sonohrina?
*Jackie: Sí, te noto muy pálida...
*Sonohrina: Me siento muy mal.
Los chicos salieron de la piscina y vieron a Sonohrina muy pálida. Walter se acercó a ella porque estaba preocupado, mientras Nick, Kevin, Joe y Frankie comían pizza.
*Walter: ¿Qué tienes, Sonohrina? (Le acarició la frente)
*Adriana: Se siente muy mal.
*Joe: Mejor la llevamos a un médico.
*Kevin: A su casa...
*Nick: Mejor llamamos a Diego para contarle. La vienen a buscar y todo saldrá bien.
*Frankie: ¡Pero aún no quiero volver a casa...!
*Joe: Nosotros tampoco, pero si Sonohrina se siente mal nos vamos.
*Sonohrina: No, no se molesten, chicos.
*Jackie: Sonohrina, queremos que estés bien. Vamos a llevarte a tu casa y te vamos a acompañar.
*Kevin: Además no nos molesta.
*Rebeca: ¡Diego Luca! ¡Mateo! ¡María Alejandra! ¡Milagros! Vengan... Vamos a casa.
*Diego Luca: ¡No! Me estaba divirtiendo...
*Walter: Te divertirás en el jardín de tu casa, porque tu mamá se siente mal.
*Mateo: Sí eres un genio Luki... Ahora por culpa de tu deseo de tener un hermanito más, todo se arruina...
*Danielle: ¿Sonohrina también está embarazada?
*Rebeca: No. Ideas de estos pilluelos... (Rio) Vamos a casa.
Todos fueron a la casa con Sonohrina y nadie se marchó hasta verla sentirse mejor. Joe se encargó de subirla a su cuarto. Aún Diego y Luca no habían llegado a casa porque Diego quiso comprarle un regalo a Sonohrina para alegrarle el día.
*Frankie: No nos iremos hasta que estés bien, Sonohrina.
*Sonohrina: No debieron molestarse...
*Nick: No nos molesta traerte a casa. Los niños están jugando afuera y se están divirtiendo igual. No te preocupes.
*Jackie: Además, Joe tenía guardadas unas pistolas de agua y se las prestó para que jueguen.
*Rebeca: Sí, y Elisa ya se siente mejor así que también está jugando afuera.
En ese momento, se escuchó la puerta de la casa abriéndose. Diego y Luca habían llegado a la casa. Se quedaron sorprendidos con la cantidad de gente que estaba adentro de la casa.
*Luca: ¿Fiesta? (Sonrió)
*Rebeca: No, mi amor. Pasa que Sonohrina se empezó a sentir mal en el club y la trajimos a la casa para que descanse.
*Diego: ¿Y por qué no me llamó al celular? Yo le dije...
*Rebeca: No tenía créditos en el celular. Yo se lo revisé y no tenía nada de créditos.
*Luca: De acuerdo... ¿Y dónde está ella?
*Rebeca: En su habitación.
Sonohrina estaba durmiendo y todos decidieron dejarla sola para que descansara. Diego y Luca les reunieron a todos en la sala para hablar sobre Sonohrina y hacerlos saber de qué sufría. Todos se sentaron en los sillones y se pusieron cómodos.
*Diego: Chicos, esto me dolió mucho cuando lo supe. Ahora que los niños están jugando y no están escuchando lo que les vamos a decir, es momento que todos nos escuchen.
*Joe: Sí, adelante.
*Luca: Chicos, Sonohrina está muy enferma... Como ya saben...
*Rebeca: Sí, ¿pero qué tiene?
*Diego: Aplasia medular... Y... (Comenzó a llorar)
*Walter: ¿Y...? ¿Y qué más?
*Luca: (Abrazó a Diego) Ella necesita un... (Respiró hondo) Un trasplante de médula. Tenemos que llevarla a Venezuela porque ahí está su familia. Preferiblemente el donante debe ser un familiar que tenga la suficiente edad para ayudarla.
Todos quedaron en shock. Sabían que Sonohrina se podía morir. Frankie también comenzó a llorar y Nick lo abrazó para consolarlo.
*Frankie: ¿Por qué? Ella es muy buena persona... ¿Por qué?
*Nick: ¿Aún se puede salvar?
*Diego: Sí... (Se secó las lágrimas) Está a tiempo... Pero hay que darse prisa...
*Walter: Si necesitas que cuiden a los niños, cuenta conmigo.
*Diego: Gracias, Walter.
*Adriana: También pueden contar con nosotros...
*Diego: Gracias, de veras...
*Kevin: ¿Y Sonohrina lo sabe?
*Luca: No... Aún ella no lo sabe y tampoco los niños.
*Joe: Bueno, ella lo tiene que saber de cualquier manera, pero con respecto a los niños, son muy pequeños y sería triste que se enteren de una verdad tan cruda.
*Nick: Les pueden decir que Sonohrina está muy enferma y que la cura se encuentra sólo en Venezuela.
*Luca: Literalmente les estaremos diciendo todo.
*Diego: Es la idea, Luca. Pero regresaremos con Sonohrina sana y salva.
*Frankie: Sí... (Abrazó a Diego) Estamos con ustedes...
*Diego: Yo... Se lo voy a decir ahora... (Estaba por subir las escaleras para ir al cuarto de Sonohrina)
*Joe: Está dormida...
*Luca: Será cuando despierte...
Todos se marcharon a sus casas y sólo quedaron Rebeca, Luca y Diego. Walter se llevó a los niños a su casa para que no se alarmaran con la noticia. La excusa que les dijo era que iban a remodelar sus cuartos entre los cuatro (Sonohrina, Diego, Rebeca y Luca) y que no podrían dormir en sus cuartos esa noche. Walter sabía que era una excusa poco creíble, pero los niños creyeron todo.

lunes, 10 de agosto de 2009

8º Capitulo

La pasaron muy bien el resto de la fiesta. Se tomaron fotos, se conocieron mejor, conversaron sobre muchos temas y así comenzó una gran amistad.
*Jackie: Cuando quieran pueden volver a visitarnos.
*Nick: Sí, estamos a la orden.
*Rebeca: Gracias, la pasamos muy bien con ustedes.
*Frankie: Y nosotros también.
*Luca: Cuando quieran pueden visitarnos.
*Sonohrina: Bueno, quizá luego podamos planificar alguna parrillada o algo todos juntos.
*Joe: Sí, sería lindo.
*Walter: Cuídense. Nos vemos.
Se despidieron con un "Hasta pronto". Cada quien se fue a su casa. Sonohrina y Diego estaban en su cuarto mientras los niños veían una película en la sala. Rebeca y Luca estaban en su cuarto.
*Sonohrina: ¿Qué era eso que tenías que decirme?
*Diego: Es la identidad del secuestrador que se llevó a Milagros.
*Sonohrina: Dime quién fue, por favor...
*Diego: No son ideas mías. No me vas a creer quién fue.
*Sonohrina: ¿Quién?
*Diego: Camilo.
*Sonohrina: ¿Y qué hace Camilo aquí?
*Diego: No lo sé... Dijo que quería recuperarte. Que eres suya y que no será tan fácil librarnos de él.
*Sonohrina: No sé a qué se refiere con que soy suya. Soy una mujer libre y no tengo dueño.
*Diego: (Sonrió) ¿Segura?
*Sonohrina: Sí. Tú eres mi esposo, Dieguito. Pero no eres mi dueño. (Rio) Yo no soy un objeto y tampoco un animal... Ya sé lo que estabas pensando... (Sonrió)
*Diego: ¿En serio? (Rio) Bueno, en realidad sí... (La besó) No es que sea tu dueño, pero te amo...
*Sonohrina: Yo también... (Lo besó)
Mientras eso ocurría, los niños conversaban en la sala. La película había terminado y ellos aún querían estar despiertos.
*Mateo: Milagros, ¿dónde estabas?
*Milagros: En un hotel...
*Elisa: ¿Por qué?
*Milagros: No sé... Me llevaron y ahí me quedé con el señor que me llevó. Quería que lo ayudara en algo. No sé en qué, pero me dijo que lo estaba haciendo muy bien. Así que sí lo ayudé después de todo.
*Diego Luca: ¿Y ese señor cómo te consiguió?
*Milagros: Tocaron el timbre y él me pidió ayuda cuando abrí la puerta. Me metió en su auto y de ahí me llevó al hotel... (Rio) ¿Me extrañaron?
*María Alejandra: Sí.
*Diego Luca: Mateo te estaba buscando para jugar al escondite y no estabas. No íbamos a jugar sin ti.
*Milagros: Gracias, pero ahora estoy muy cansada... ¿Jugamos mañana?
*Mateo: Sí.
Pasaron varios días y llegó el momento de ir a buscar los resultados del análisis médico que le habían realizado a Sonohrina hace un tiempo atrás. Diego fue solo a la clínica porque Sonohrina había decidido salir con Jackie, Danielle, Adriana y Rebeca de compras por el centro comercial.
*(Médico): (Le entregó un sobre donde estaban los resultados) ¿Su esposa le acompaña?
*Diego: No, ella está de compras...
*(Médico): De compras... Lo mejor será que ella no se entere todavía de lo que tiene, si ella es feliz en su vida le va a doler mucho saber lo que realmente tiene.
*Diego: (Pálido) ¿Y qué es lo que tiene?
*(Médico): Tienen que ser fuertes todos. Ella tiene aplasia medular.
Diego se quedó sin palabras ante lo que dijo el médico. Se puso pálido y el médico le acarició la espalda para tratar de relajarlo.
*(Médico): Ella aún tiene oportunidad de salvarse. Está a tiempo.
*Diego: ¿En serio? ¿Y qué tiene que hacer para salvarse?
*(Médico): Bueno, deben conseguir un donante que pueda donar parte de su médula, preferiblemente un familiar.
*Diego: ¿Yo podría donar?
*(Médico): No te garantizo que seas compatible con ella, pero... Preferiblemente un familiar.
*Diego: Todos sus familiares están en Venezuela. No hay familiares mayores que ella aquí, sólo nuestros hijos, pero son unos niños, los mayores tienen cinco años.
*(Médico): Son muy pequeños. No pueden. Te haremos las pruebas correspondientes ahora. Vamos.
El médico realizó las pruebas a Diego y los resultados estarían listos para la semana siguiente. Diego regresó a la casa y pensó en un lugar para poner el sobre y que Sonohrina no lo viera aún. Ella aún no había regresado de las compras, así que Diego decidió llamarla al celular para saber cómo se sentía.
*Sonohrina: Me siento bien, Diego... ¿Por qué la pregunta?
*Diego: Por tus desmayos.
*Sonohrina: No te preocupes... (Rio) Dime, ¿fuiste a la clínica por los resultados?
*Diego: Sí, pero me dijeron que hubo un retraso y que no estaban listos... (Mintió)
*Sonohrina: ¿Y para cuándo entonces?
*Diego: Ellos van a llamar.
*Sonohrina: De acuerdo. Bueno, en unas horas voy para allá. ¡Dieguito... He comprado de todo para todos! Hay una ropa para los niños que está muy tierna. También te compré algo sorpresa, compramos algo para Luca también, para nosotras obviamente... (Rio) Pero todo es muy hermoso, Dieguito.
*Diego: Sí, de acuerdo... Gracias. Te espero. Chao.
*Sonohrina: Chao, Dieguito. Te amo.
*Diego: Yo también...
Diego fue al estudio y escondió los resultados debajo de la batería. Mientras eso ocurría, Sonohrina estaba comiendo helado con sus amigas.
*Danielle: Todo lo que compramos es hermoso.
*Jackie: Sí... Espera a que Joe vea la guitarra nueva que le compré.
*Adriana: Ni hablar de las pijamas que Sonohrina y Rebeca compraron para los niños... ¡Qué ternura!
*Rebeca: Sí. La verdad, fue divertido salir de compras todas juntas.
*Sonohrina: Sí. Hay que repetirlo algún día...
*Danielle: Les tengo una linda noticia, chicas.
*Adriana/Jackie: Sí, es muy linda. Ya nosotras sabemos.
*Danielle: Kevin y yo seremos padres.
*Sonohrina: ¡Qué lindo! ¡Felicidades!
*Danielle: Gracias. Bueno, aún no se sabe si será niña o niño, pero las invito a conocerle cuando nazca.
*Sonohrina: De acuerdo. Gracias.
Todas regresaron a sus casas. Sonohrina entró al cuarto de los niños para enseñarles todo lo que les había comprado, entre juguetes y ropa. Luego fue a su cuarto para entregarle a Diego el MP3 nuevo que le había comprado. Rebeca fue a entregarle a Luca el suyo.
*Diego: Gracias, Sonohrina. (La besó) Está super. Te amo. (No se notaba feliz)
*Sonohrina: Dieguito, sé que realmente no te gustó, por la cara que tienes.
*Diego: Sí me gustó, Sonohrina. Gracias.
*Sonohrina: ¿Pero, por qué estás así? ¿Camilo volvió a secuestrar a alguien?
*Diego: No, Sonohrina. Él está en la cárcel y no va a salir de ahí en mucho tiempo. Es sólo que... Sonohrina, estoy cansado.
*Sonohrina: Cansada estoy yo. (Rio) Vengo de compras y estuve todo el día en eso.
*Diego: Es que no dormí bien ayer...
*Sonohrina: (Lo abrazó) Duerme ahora, y relájate, Dieguito. (Le besó el cuello)
*Diego: Gracias.
Diego se acostó en la cama y soltó una lágrima, pero Sonohrina no lo vio porque estaba de espaldas. Luego de un rato, se fue a bañar.

sábado, 8 de agosto de 2009

7º capítulo

Diego no pudo dormir bien por pensar mucho en el secuestro de Milagros. Por eso, al día siguiente no se despertó muy temprano. Camilo aprovechó la mañana que pasó con Milagros para conversar con ella.
*Camilo: ¿No quieres un papá nuevo? He pensado que sería muy lindo adoptarte como mi hija.
*Milagros: Yo con mi papi estoy bien. Él me quiere mucho y yo también.
*Camilo: Yo también te quiero mucho ¿Tu papá te da todo lo que quieres?
*Milagros: Sí.
*Camilo: ¿Dinero?
*Milagros: Yo no necesito dinero. Pero mi papi me da todo lo que quiero cuando puede.
*Camilo: ¿Cuántos años tienes?
*Milagros: Cinco.
*Camilo: Yo sería mejor padre que el que tienes ahora.
*Milagros: Ok.
*Camilo: ¿Quieres ser mi hija?
*Milagros: No sé.
En ese momento, tocaron la puerta. Camilo se colocó una malla en la cabeza para que no lo reconocieran. Abrió la puerta y vio a Diego con Luca, pero Sonohrina no estaba.
*Diego: ¿Aquí es donde tienen a mi hija?
*Camilo: ¿Y tu esposa?
*Diego: No pudo venir a acompañarme porque está muy enferma en la casa y no puede salir. No vine solo y traje a mi hermano.
*Camilo: Entonces tu hija no se va, Dieguito. Tu hija se queda aquí conmigo.
*Diego: Por favor, quiero a mi hija de vuelta.
*Camilo: Y yo quiero a mi novia de vuelta.
*Luca: ¿Tu novia?
*Camilo: Sí... (Se quitó la malla) Diego me quitó a mi novia hace años, después de una relación tan hermosa (Sonrió maléficamente) ¿Me recuerdas, Dieguito?
*Diego: ¿Qué haces tú aquí, Camilo? ¿Cuándo llegaste a Italia?
*Camilo: Vine por muchas razones, Dieguito. Es una larga historia, la verdad, tiene que ver con mi novia. Quiero recuperarla.
*Diego: Sonohrina no te ama. Si te amara, se hubiese casado contigo.
*Luca: Diego, no lo retes.
*Diego: Yo tengo cosas que decirle a ese tipo.
*Camilo: Dime todo si te atreves...
Camilo tomó una navaja y acorraló a Diego contra la pared. La navaja estaba muy cerca del cuello de Diego.
*Diego: Devuélveme a mi hija, Camilo. Devuélvemela...
*Camilo: No te la daré tan fácil, te devolvería a tu hija si traías a tu esposa y me la entregabas.
*Diego: Sonohrina está realmente muy enferma y no podía venir conmigo. Dime cuánto dinero quieres y yo te lo pago.
*Camilo: Yo no quiero tu sucio dinero. Yo quiero a mi mujer de regreso.
*Diego: ¡Ella no es tu mujer...! ¡Ella no es tuya!
*Camilo: Ella es mi novia... (Estuvo por cortar el cuello a Diego) Ella me dio cosas que a ti no te ha dado... Me dio muchos privilegios.
*Diego: Nunca te dio hijos, a mi me dio tres.
*Camilo: ¡Cállate!
Luca llamó a la policía disimuladamente y entró a la habitación para rescatar a Milagros.
*Milagros: ¡Tío! (Lo abrazó)
*Luca: (Le besó el cuello) ¡Milagros! Estás bien, chiquita... Vamos a casa... (La alzó) ¿Te sientes bien? ¿Cómo te trataron?
*Milagros: Sí, bien. Vi televisión y todo. Los extrañé mucho...
Luca salió de la habitación con Milagros en brazos. Al salir, los policías estaban esposando a Camilo. Diego tenía una pequeña cortada en el cuello, pero no estaba en el suelo.
*Camilo: ¡Me las vas pagar, Diego Fainello! ¡Esto no se queda así!
Diego no le respondió, volteó y vio a Luca con Milagros en brazos sana y salva. Los policías se llevaron a Camilo.
*Milagros: ¡Papi!
Luca la soltó y ella corrió hacia Diego para abrazarlo. Diego la abrazó y le besó la cabeza. Mientras eso ocurría, Sonohrina estaba en la casa de al lado junto a Rebeca, Jackie, Joe, Adriana, Nick, Danielle, Kevin, Frankie y Walter (otro vecino más, muy amigo de los Fainello).
*Walter: Bueno, bienvenidos a nuestro vecindario, si así podemos llamarlo.
*Jackie: Gracias.
*Adriana: Sonohrina, es una pena que no me pude quedar mucho cuando nos conocimos. Lo siento.
*Sonohrina: Tranquila, Adriana. No hay problema.
*Joe: Adriana nos habló mucho de ti. Se ve que tu familia es muy linda y queremos conocerlos.
*Sonohrina: Sería genial, y muchas gracias Joe.
*Nick: ¿Quieren algo de tomar?
*Rebeca: Bueno... ¿Tú, Sonohrina?
*Sonohrina: Sí. (No se notaba muy contenta a pesar de estar muy acompañada)
*Rebeca: Te acompaño, Nick.
*Nick: No, no... Tú eres invitada ¡Qué descortés de mi parte dejarte servir a ti también! Por Dios.
Nick se fue a servir refrescos para llevarlos a todos. Sonohrina no dejaba de pensar en Milagros y en cómo estaría, se sentía muy mal anímicamente.
*Kevin: ¿Qué ocurre, Sonohrina?
*Sonohrina: No, nada...
*Danielle: Sonohrina, somos tus amigos ahora. Sé que casi no nos conocemos, pero puedes contar con nosotros.
*Walter: Danielle tiene razón, Sonohrina. Bueno, a mí me conoces más... ¿Puedo saber qué ocurre?
*Sonohrina: Rebeca, dilo tú. Yo no puedo ni hablar. Me siento muy mal anímicamente como para recordarlo.
*Rebeca: ¿Es por... Eso?
*Sonohrina: Sí.
*Rebeca: Está bien. Bueno chicos... Sucede que a Milagros, la hija de Sonohrina y Diego, la secuestraron.
*Adriana: ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Quién?
*Rebeca: No lo sabemos... Diego y Luca fueron a rescatarla y no sabemos qué tal va todo.
En eso, Sonohrina comenzó a llorar. Joe se levantó del sillón y la abrazó.
*Joe: Entiendo cómo te sientes... Frankie es como si fuese el hijo de todos nosotros aquí... Si lo secuestraran, sería horrible.
*Frankie: Ni tan chiquito soy, Joe... (Rio)
*Nick: (Volvió con refrescos) Bueno, es cierto... Algún día debías crecer, Frankie... (Rio)
Tomaron refresco y Sonohrina se calmó. Conversaron de todo y pasaron una tarde muy agradable. Al rato, sonó el celular de Sonohrina. Era Luca y atendió Joe porque Sonohrina se había quedado dormida en el sofá. Se oían risas y muchas voces a la vez.
*Luca: Me equivoqué de número, creo...
*Joe: No, tranquilo... (Rio) ¿Quieres hablar con Sonohrina?
*Luca: Sí... ¿Quién es?
*Joe: Es Joe, el vecino. Pasa que Sonohrina se quedó dormida en el sofá... (Rio)
*Luca: No importa. Hazme un favor, Joe. Dile a todos que Milagros, la hija de Sonohrina, está bien. Que vamos en camino, el rescate fue un éxito y la policía nos ayudó mucho. Mucho gusto, soy Luca. El esposo de Rebeca.
*Joe: Igualmente. Bueno... (Sonrió) Gracias, Luca. (Colgó) ¡Chicos, buenas noticias...! Despierten a Sonohrina... Ella debe oírlo.
Kevin despertó a Sonohrina junto con Frankie.
*Kevin: Sonohrina, llamaron a tu celular y Joe atendió. Tiene algo que decir...
*Sonohrina: (Exaltada) ¡¿Qué?!
*Joe: Bueno chicos, la hija de Sonohrina ya fue rescatada y todo fue un éxito...
*Sonohrina: (Gritó de la emoción) Mi niña... Gracias a Dios... Joe... (Lo abrazó) Gracias por atender...
*Joe: De nada... (Rio)
*Jackie: ¡Bueno, vamos a brindar!
*Adriana: Ya va, aguarden... ¿No será mejor que lleguen los demás primero?
*Danielle: ¿Los demás?
*Adriana: Sí, los demás... Los esposos de Nelly y Sonohrina y todos los niños.
*Jackie: ¡Ay, verdad! Mejor... Sí, sí... Joe, mi amor, mejor esperemos a que lleguen.
*Joe: De acuerdo...
*Walter: Voy a llamar a Diego para decirle que venga a esta casa, pero que antes traiga a Diego Luca, Mateo, María Alejandra y Elisa.
Luego de un rato, todos estuvieron compartiendo y los que aún no se conocían, se conocieron. Esa fue la verdadera y cálida bienvenida que le dieron a los nuevos vecinos. También se celebró el éxito en el rescate de Milagros.
*Diego: Sonohrina, luego en casa te quiero contar una cosa...
*Sonohrina: De acuerdo... Bueno sí, en casa. Ahora hay que celebrar.