martes, 10 de agosto de 2010

61º Capitulo

Al día siguiente, Diego acompañó a Nataly hasta el hotel donde ella se estaba quedando para buscar sus cosas y llevarlas a casa.
*Nataly: Gracias por ayudarme, Dieguito. La verdad es que no habría podido hacerlo sola.
*Diego: Tranquila.
*Nataly: (Sonrió) ¿Y qué haremos hoy?
*Diego: No sé, estuve pensando que podría llevarte de compras... ¿Qué dices?
*Nataly: (Sonrió) Está bien... Me gustaría, pero que no sea hoy porque ya tendré que desempacar mucho.
*Diego: No hay problema. Puede ser mañana... O cuando quieras.
*Nataly: ¡Qué lindo eres! (Lo besó) No sólo físicamente sino también como persona. (Lo besó)
*Diego: Tú lo eres más... (Sonrió y la besó)
*Nataly: (Lo besó) ¡Qué bello! (Lo abrazó) ¿Vamos a casa?
*Diego: Sí.
Diego y Nataly regresaron a la casa Fainello con las maletas de Nataly para desempacar todo.
En Venezuela, Sonohrina despertó. Apenas llegó a la cocina, Lucio se levantó de la mesa y la abrazó.
*Lucio: ¿Cómo dormiste, preciosa? (Sonrió y la besó)
*Sonohrina: Bien.
*Lucio: Oye, hoy te tengo una sorpresa.
*Sonohrina: ¿Sí? ¿Y cuándo me la darás?
*Lucio: Ahora mismo. Alístate para salir y te mostraré la sorpresa... (Sonrió) Te encantará.
Sonohrina subió a su habitación y se alistó para salir y ver qué sorpresa le tenía Lucio. Cuando salió, se fue con Lucio rumbo a su sorpresa. Luego de media hora, llegaron a un edificio muy alto, no tanto como un rascacielos, pero si bastante alto.
*Lucio: Es aquí, Karl, gracias. Ven, amor. Acompáñame a ver tu sorpresa.
Se bajaron del auto y entraron en el edificio. Subieron en el ascensor hasta el décimo piso.
*Lucio: Ya llegamos. Sólo tenemos que atravesar esa puerta y verás lo que es.
Cuando Lucio golpeó la puerta, una señora abrió la puerta y Sonohrina miró lo que había detrás de la puerta. Era un estudio de modelaje. Habían dos modelos muy guapos tomando agua y alistándose para la sesión de fotos de la siguiente publicidad. Ella pensó que la sorpresa de Lucio era mostrarle a esos dos chicos tan guapos en medio de su trabajo.
*(Señora): Venga, señorita. Tenemos que tomarle algunas medidas.
*Sonohrina: ¿A mí? ¿Y por qué?
*Lucio: Esa es la sorpresa, mi vida. Tú serás modelo y yo seré tu manager... ¿No es genial?
*Sonohrina: Modelo... ¿Aquí?
*Lucio: Sí. (Sonrió)
Sonohrina se fue con la señora hasta una oficina donde tomaron sus datos y le tomaron algunas medidas. Al salir, los chicos que Sonohrina vio estaban esperando en la puerta. Sonohrina se quedó boquiabierta al verlos vistiendo sólo pantalones largos. Eran irresistibles.
*(Chico1): Bueno, el fotógrafo tardará un poco en llegar, lo sé porque me mandó un PIN para decírmelo.
*(Señora): Pero ustedes no pueden irse aún. Espérenlo. Yo les diré a sus managers para que les traigan algo de comer. Sé que tienen hambre.
*(Chico2): Sí... ¿Y ella quién es?
*(Señora): Una compañera que tendrán a partir de la semana que viene.
*(Chico1): Mucho gusto. Mi nombre es Tranquillo Barnetta. (Sonrió)
*(Chico2): Y yo Yoann Gourcuff, es un placer.
Los chicos le estrecharon la mano y Sonohrina se quedó sin palabras. Ella se presentó cuando le salieron las palabras, esperando que Lucio no la viera así. Luego se sentaron a conversar con ella en unas sillas donde descansaban y esperaban la comida que les traería sus manager.
*Tranquillo: No puede ser que tan joven y ya tienes hijos.
*Sonohrina: Así es. Lo malo es que el padre de mis hijos me arruinó la vida... Pero yo siempre lo amé hasta que me di cuenta de que él me perjudicaba.
*Yoann: ¿Y tus hijos se quedaron con él?
*Sonohrina: Sí, en Italia. Yo no pude hacerme cargo de ellos porque no estoy trabajando y no tengo cómo mantenerlos.
*Yoann: Pero en algún momento deberías visitarlos. Deberías viajar a Italia y compartir con ellos. Si no quieres ver a tu ex marido, no te preocupes; tú le dices que quieres llevarlos de paseo, pero que quieres que sean sólo ellos y tú y él los dejará ir porque son tus hijos también.
*Lucio: (Llegó) Amor, debemos irnos... (Le tomó la mano frente a Tranquillo y Yoann)
*Sonohrina: Fue un placer conocerlos. (Sonrió)
*Tranquillo: Igualmente. Nos vemos la semana que viene.
Cuando regresaron a casa, vieron un poco de televisión.
*Lucio: ¿Te gustó la sorpresa?
*Sonohrina: Sí.
*Lucio: Veo que ya tienes amigos nuevos. Eres muy sociable así que ya sabía que serías excelente como modelo. Además yo seré tu manager... Ganarás mucho dinero.
*Sonohrina: Es lo que más quiero...
*Lucio: Y yo lo que más quiero es... (La acostó en el sofá) Que nos casemos para así ser felices para siempre... (La besó)
*Sonohrina: ¿Felices?
*Lucio: Sí. Yo te haré la mujer más feliz del mundo, amor... Y tú me harás el hombre más feliz del mundo. Lo sé.
Sonohrina se levantó del sofá y se fue a su habitación. Lucio no entendía lo que pasaba, pero ella se sentía muy triste. Ella sabía que el único que la hizo feliz fue Diego y lo extrañaba mucho. A veces pensaba en llamarlo, pero era algo que no hacía porque sabía que Lucio se daría cuenta. En ese momento, sonó su celular y ella atendió.
*Loredana: Hola, ¿cómo estás?
*Sonohrina: Mal. Los extraño a todos, en especial a mis hijos y a Diego.
*Loredana: ¿Y por qué no vienes a visitarnos?
*Sonohrina: Porque... No sé si Lucio me deje.
*Loredana: Claro que te dejará. Somos tu familia y tiene que dejarte. Mañana iremos Federico y yo a visitarte para acompañarte un rato. Además, el primo de Federico vendrá... De hecho, toda su familia vendrá.
*Sonohrina: ¿Y eso?
*Loredana: Bueno, es que... Federico ya tiene ganas de casarse y me pidió que nos casemos y le dije que sí.
*Sonohrina: Está bien. Te felicito y a él también. Perdón que te hable así pero estoy deprimida.
*Loredana: Te comprendo. Con ese demonio con el que estás viviendo... Él es peor que Camilo, yo no sé cómo te fuiste a vivir con esa bestia sabiendo cómo es él.
*Sonohrina: Ni yo. Él me obligó.
*Loredana: Bueno, mira... Mi matrimonio por lo civil es el mes que viene, pero el de la iglesia aún no tiene fecha.
*Sonohrina: De acuerdo sólo dime qué día exactamente y qué lugar y allá estaré. En cambio yo me casaré con Lucio la semana que viene por lo civil, por la iglesia no me casaré porque recuerda que soy divorciada y no puedo. Me caso el sábado.
*Loredana: Lo escribiré para no olvidarlo. Hablamos pronto.
*Sonohrina: De acuerdo, gracias por llamarme.
La llamada terminó y Sonohrina fue a ducharse, estaba feliz por su hermana y Federico, pero por ella no. Luego de la ducha, decidió llamar a Diego así se diera cuenta Lucio o no. A pesar de haber llamado, nadie contestó. Nadie contestó porque todos se fueron al cine con Joseth, Marco, Damiano, Yoe y Walter a ver "El Origen" con Leonardo Di Caprio. Los niños no podían ver esa película así que se quedaron jugando en la casa Jonas con Frankie y Kevin III.
*Walter: Fue una película genial.
*Yoe: Cierto, pero ya Leonardo Di Caprio está algo más... Con más edad... Ya no es como antes.
*Walter: Pero es un gran actor.
*Damiano: ¡Claro! Walter tiene razón. A mí no me importa la edad que tenga.
*Joseth: A ustedes los hombres no les importa la edad de otros hombres. Pero si en la película apareciera Angelina Jolie, ustedes enloquecieran, ¿verdad?
*Damiano: ¡Sí! Angelina... Angelina Jolie... (Sonrió)
*Marco: Ella es bonita, pero por su culpa tú no tienes novia y perdiste a la que tenías y a todas las que caían a tus pies... ¡Aterriza!
*Damiano: Mira, Elizabeth se fue porque le dio la gana. Igual con Romina y todas las demás. Tu hermano no tiene la culpa de haber enloquecido por Angelina.
*Luca: Mala suerte porque ella está muy feliz en su matrimonio con Brad Pitt, así que no tienes oportunidad con Angelina.
*Damiano: Ni con Penélope Cruz, pero me gusta más Angelina.
*Luca: Pero tu amor es platónico, Damiano ¡Entiéndelo! Aprende de Diego. Él se obsesionó con Nataly y ella está cerca de él y sabe de su existencia. Tú adoras a Angelina Jolie, pero te excedes... Todo tu cuarto está forrado de fotos suyas.
*Joseth: ¿Qué? ¿En serio? (Rió) Por eso no me lo quería mostrar. (Rió)
*Luca: En serio. Sus paredes no son pintadas, sólo tiene un collage gigante de Angelina Jolie en todas las paredes.
*Yoe: ¡Por Dios! ¡Qué obsesión! (Rió) Ni yo soy así con Walter. Ricardo me mataría... (Rió) O me destruiría el collage.
Luego de conversar un rato más, cada quien se fue a su casa.