jueves, 13 de octubre de 2011

67º Capitulo


Dos días después, Ricardo y Scarlett estaban en la mansión de Ricardo conversando un rato sobre cómo iba su relación; iba bastante bien.
*Ricardo: ¿Sabes, Scarlett? Visto que nuestra relación va tan bien, me gustaría pedirte algo muy importante.
*Scarlett: ¿Sí? ¿Y qué puede ser? (Sonrió)
Ricardo buscó una caja pequeña y de color oscuro. La abrió y adentro había un anillo.
*Ricardo: Scarlett, ¿tú quisieras casarte conmigo?
*Scarlett: ¡Claro! (Sonrió) Me encantaría… (Lo besó) ¿Cuándo nos casaremos?
*Ricardo: El año que viene, para que dé tiempo de buscar todos los detalles con calma… ¿Te parece?
*Scarlett: Sí, perfecto. No hay problema… (Sonrió y lo besó) ¡Me haces feliz!
*Ricardo: También tú a mí… (La besó)
En eso, llegó Julio.
*Julio: ¿Dónde dejé mi camisa nueva?
*Ricardo: ¿Cuál?
*Julio: La verde que compré la semana pasada.
*Ricardo: ¿No está en tu armario?
*Julio: No. Ya busqué y no está ahí… ¡Y en poco tiempo tengo que salir!
*Ricardo: ¿Se puede saber adónde vas?
*Julio: A una entrevista de trabajo. Quiero trabajar porque no me gusta estar desempleado.
*Ricardo: ¡Esa es la actitud! (Volteó hacia el cuarto donde estaba la lavadora) ¿Esa no es la camisa que estabas buscando?
*Julio: ¿Dónde está? (Sonrió)
*Ricardo: Sobre la lavadora. Dime si es esa.
*Julio: (Se dirigió hacia la lavadora y la encontró)¡Gracias! Llevaba casi media hora buscándola.
*Ricardo: De nada y que te vaya bien en la entrevista.
*Julio: Gracias. (Se fue a su habitación para alistarse)
*Scarlett: Amor, iré a bañarme.
*Ricardo: Ok, no hay problema. Yo tengo que salir a buscar a Yoe y a Walter que llegan hoy. Nos vemos más tarde.
*Scarlett: De acuerdo. (Se fue)
Ricardo salió de la mansión y se dirigió al aeropuerto. En el aeropuerto se encontró con Joseth y Marco.
*Ricardo: ¡Chicos! ¿Cómo están? ¿También vinieron a buscar a Yoe y Walter?
*Joseth: Sí. Aún los estamos esperando. Llegamos hace casi ya una hora.
*Marco: ¿Y cómo te ha ido? Hace ya tiempo que no nos reunimos como hacíamos antes.
*Ricardo: Pues, bien. Me ha ido bien gracias a Dios. Ya verán que nos reuniremos pronto porque se viene boda el año que viene.
*Joseth: ¿Sí? ¿Y quiénes se casan?
*Ricardo: Scarlett y yo… (Sonrió) Hoy nos comprometimos.
*Joseth: ¡Qué lindo! (Sonrió) ¡Felicidades!
*Ricardo: Gracias. (Sonrió)
Luego de media hora, el vuelo en el que venían Yoe y Walter llegó a Italia. Joseth, Ricardo y Marco los recibieron y los llevaron a la mansión donde vivían Yoe y Walter, quedaba cerca de la mansión donde estaba viviendo Ricardo.
*Joseth: ¿Y cómo les fue en Alemania?
*Yoe: Bien. Walter se empeñó en ir al acuario donde estaba el pulpo Paul y tuve que acompañarlo, pero la pasamos bien porque conocimos a un chico alemán que luego nos llevó a degustar la comida alemana. Pero tú no sabes quién era ese chico alemán… (Sonrió)
*Joseth: ¿Quién?
*Yoe: Ozil, el futbolista profesional.
*Joseth: ¿Qué? ¿En serio? (Sonrió)
*Yoe: Sí, es un chico bastante agradable. Nada presumido…
*Joseth: ¡Qué bien!
*Walter: ¿Y han sabido algo de los Fainello?
*Marco: Bueno, Diego se fue con su novia a un crucero y Luca se quedó con Rebeca y los niños.
*Ricardo: Tienes que decir: “Se fue con la grosera de sunovia a un crucero”. Yo no gastaría ni un centavo en una mujer así. (Rió)
*Walter: Ya entiendo porque le dices así… (Rió)
*Ricardo: ¿Tú estabas ahí? Se pasó de grosera ese día…
*Walter: Claro que yo estaba ahí y me acuerdo perfectamente. A los niños no les gusta esa mujer para nada…
*Ricardo: Normal que no les guste. Esa mujer no se compara a su mamá. Sonohrina es muy respetuosa y no es una loca como esa mujer… ¿Cómo esque se llama?
*Marco: Nataly.
*Ricardo: Sí, Nataly. Gracias.
*Marco: Yo no la conozco mucho. He compartido muy poco con ella.
*Ricardo: Yo también he compartido poco con ella, pero lo poco que he compartido ha sido terrible.
Entre tanto, ya el crucero había llegado a Venezuela. Sonohrina quiso recoger sus cosas antes de irse con Diego a Italia. No quería dejar nada en Venezuela. Pero no pudo irse en seguida porque cuando llegó a la casa, recibió una llamada de Loredana.
*Sonohrina: ¿Qué pasó, Loredana?
*Loredana: Es que hoy nacen los hijos de Agatha.
*Sonohrina: ¿Qué? Ya voy para allá…
*Loredana: Ok, te espero en la casa. (Colgó)
*Sonohrina: Diego, vamos a mi casa ya.
*Diego: ¿Por qué?
*Sonohrina: Es que van a nacer los hijos de Agatha.
*Diego: Sonohrina, lo siento. Yo no puedo ir para allá porque tu tío me detesta y volvería a golpearlo si me dice cosas feas de nuevo.
*Sonohrina: Tarde o temprano mi tío Eugenio va a tener que entender que a quien amo es a ti… Y que quiero ser feliz contigo de nuevo. (Lo besó) Esto que me pasó, me dio a entender que es mi felicidad la que tiene que importarme, no la suya.
*Diego: Es cierto… (La besó)
En ese momento, llegó Lucio.
*Lucio: Amor, ¿qué haces con este tipo en nuestra casa?
*Sonohrina: Lucio, yo te dije que yo me iba a ir con Diego…Te guste o no, él es el hombre que yo amo.
*Lucio: Él no te ha dado nada… Nada parecido a lo que yo te he dado… ¿Cómo se te ocurre decirme que el hombre que amas es este tipo?
*Diego: “Este tipo” tiene nombre.
*Lucio: Y ese nombre no me interesa.
*Diego: (Enojado) Pues, tendrá que empezar a interesarte después de…
*Sonohrina: No, Diego… No le pegues… Vamos a mi casa, ¿sí?
*Lucio: Amor, pero si esta es tu casa… (Sonrió y la abrazó) Sube a la habitación antes de que me enoje contigo.
*Diego: Ella no va a ninguna parte. Vino para acá a recoger sus cosas para venirse conmigo. Ahora que ya tiene todas sus cosas consigo, vendrá conmigo. Esta ya no es su casa.
*Lucio: ¿Enserio te irás con él? (Dijo en tono burlista)
*Sonohrina: Sí, Lucio. Yo me voy a ir con Diego.
*Lucio: ¿Pero por qué? ¿Acaso ya no te gusto?
*Diego: ¡Nunca le gustaste!
*Sonohrina: Diego, basta ¿Sí?
*Lucio: Si tú te vas con él, mañana amaneces muerta.
*Diego: ¿Qué te pasa?
*Lucio: Es la verdad… Si ella se va contigo, mañana se muere.
*Diego: No se va a morir. Nosotros tenemos que ir a su casa porque van a nacer los hijos de su prima Agatha.
*Lucio: Sí, yo sé que ellos van a nacer hoy. Pero tú no tienes por qué estar allá.
*Sonohrina: Claro que sí, porque él irá conmigo al aeropuerto luego de ver a los bebés.
*Lucio: ¿Qué? (Enojado) Tú no te vas a ninguna parte con este loco.
*Diego: El loco aquí eres tú. (Lo golpeó en el estómago)
*Sonohrina: ¡Diego! No se golpeen…
*Lucio: Tranquila, amor. Yo no me mancharé las manos de sangre… (Sacó una pistola) Prefiero acabarlo con un objeto y no con mis manos.
*Sonohrina: No, Lucio. Por favor, cálmate. Mira, esta decisión la tomé yo.
*Lucio: ¿Y con el permiso de quién tomaste esa decisión?¿Así me pagas todo lo que he hecho por ti?
*Sonohrina: Lucio, baja el arma.
*Lucio: No… Hasta que me respondas.
*Sonohrina: Lucio, yo amo a Diego. Te guste o no, quiero ser feliz con él.
*Lucio: Si no eres feliz conmigo no eres feliz con nadie…(Disparó)
*Diego: ¡Sonohrina!
Sonohrina cayó al suelo a causa del disparo, que le cayó en el estómago.
*Lucio: Yo seré feliz con ella… Tú no… (Se apuntó con lapistola)
*Diego: Lucio, ¿estás loco?
*Lucio: No. Me voy con mi amada… (Se disparó)
Diego tomó el cuerpo de Sonohrina y lo llevó hasta la clínica más cercana. A Lucio no podía llevarlo porque no podía cargarlos a ambos y si llamaba a la policía creerían que fue él quien los mató. Llegó a la clínica y se encontró con Loredana, quien se fue para allá porque no podía seguir esperando a Sonohrina en casa. No podía creer lo que veía.
*Loredana: ¡Diego! ¿Qué estás haciendo aquí? ¿Qué le pasó ami hermana? (Comenzó a llorar)
*Federico: Calma… Deja que explique.
*Eugenio: ¿Qué haces con el cuerpo de mi sobrina? (Enojado)
*Diego: Necesita ayuda urgente, le dispararon…
*Eugenio: ¿Cómo te atreves a dispararle?
*Diego: No fui yo. Fue Lucio.
*Eugenio: ¿Qué? (Respiraba con dificultad)
*Diego: Que fue Lucio quien le disparó. No fui yo. Yo estaba con ella y… Lucio también se disparó… Se suicidó.
*Eugenio: (Dirigiéndose a los médicos algo alterado) ¿Pero qué esperan? ¡Llévenla a emergencias! ¡Ay, no! (Puso su mano en el pecho porque le dolía el corazón) Mi sobrina… ¡No! (Comenzó a llorar)
*Diego: Tranquilo, ella…
*Eugenio: ¿Cómo quieres que me calme? Si mi sobrina… Ella está herida… Y muerta…
*Diego: No se murió. Respira con dificultad y está inconsciente, pero no está muerta. El que murió fue Lucio.
*Loredana: Vamos a llevarla a emergencias y esperemos a que nazcan los hijos de Agatha.
*Diego: Yo me quedaré esperando qué pasa con Sonohrina. Ustedes vayan a esperar el nacimiento de los niños… Me avisan cuando ya hayan nacido.
Los enfermeros se llevaron a Sonohrina a las emergencias de la clínica y Diego los siguió.
*(Enfermero1): No puede seguirnos más. Debe quedarse aquí a esperar hasta que le extraigamos la bala.
*Diego: Está bien. Esperaré aquí.
Luego de dos horas, la cesárea que le hicieron a Agatha fue todo un éxito. Vanessa y Alejandro eran mellizos y vinieron sanos al mundo. Vanessa nació primero que Alejandro, pero Alejandro pesó más que Vanessa. Agatha no sabía lo que había pasado con Sonohrina, como estaba recién operada le afectaría mucho la noticia. Pensaban decirle luego. Ella estaba durmiendo en la habitación donde se quedaría durante dos días mientras sus familiares y amigos estaban afuera porque aún no podían acompañarla en la habitación. Adrián fue a registrar a sus hijos en el registro civil. Sólo los padres de Sonohrina, Loredana y Federico fueron a las emergencias de la clínica para acompañar a Diego. Todavía el médico que le estaba quitando la bala no salía y Diego comenzaba a preocuparse más.
*(Mamá de Sonohrina): Diego, no le hemos dicho nada a Agatha porque está dormida y no hemos podido pasar a la habitación ¿Tú ya hablaste con Luca?
*Diego: No…
*(Papá de Sonohrina): Con el favor de Dios ella va a salir bien de ese quirófano… ¿Pero cómo pasó?
*Diego: Señor, para empezar, yo amo a su hija. Es la mujer que más amo en este mundo… Ella y yo nos encontramos en el crucero que tomamos hace poco y luego de unos encuentros, decidimos volver a estar juntos… Entonces Lucio estuvo en contra y cuando llegamos a la casa donde él estaba viviendo con su hija, él nos vio y pretendía matarme… Entonces ella e dijo que ella habíadecidido volver conmigo para irnos juntos a Italia... Y él la mató, luego se mató él.
*Loredana: ¡Ay! ¡Qué horrible! Ahí viene el médico.
Todos se acercaron para saber cómo estaba Sonohrina.
*(Médico): Difícilmente pudimos extraer la bala de su cuerpo… Pero…
*Diego: ¿Pero qué?
*Federico: ¡Ya! Vamos a oir qué dice.
*(Médico): Hicimos lo que pudimos, pero ella sigue respirando con dificultad y sus signos vitales empezaron a debilitarse. Aún no está muerta, pero…
*Diego: Y no se va a morir… (Entró al quirófano corriendo)
*Loredana: ¿Pero qué? Díganos.
*(Médico): Pero si sigue debilitándose así es probable que no llegue hasta mañana.
*Federico: ¿Necesita sangre o qué?
*(Médico): Sí, necesitamos dos donantes.
*Loredana: Yo le donaré.
*(Papá de Sonohrina): Y yo.
*(Médico): Perfecto, porque es para ahora mismo.
El médico llevó a Loredana y al papá de Sonohrina hasta la sala de donantes de sangre. Mientras los enfermeros luchaban por sacar a Diego del quirófano.
*Diego: Por favor, déjenme hablar con ella…
*(Enfermero1): ¿Cómo va a hablar con ella si está inconsciente? No le va a responder.
*Diego: Ya sé. Pero quiero decirle algo. Por favor…
*(Enfemera): Señor, es que no puede estar aquí, entiéndalo.
*Diego: ¡Ya sé que no puedo, pero quiero estar con ella! No quiero que muera, pero si se va no quiero que sea sin que yo me haya despedido como se debe.
*(Enfermero2): Bueno, está bien… Déjenlo que le hable…
*Diego: (Se acercó a Sonohrina) Sonohrina… Óyeme… No te puedes morir… Estamos por regresar a Italia y los niños quieren verte… No puedes morir…
No recibió respuesta. Pero Sonohrina seguía viva aunque no podía responderle.
Mientras tanto, en Italia, Luca cuidaba a los niños mientras Rebeca hacía las compras en el supermercado.
*Diego Luca: ¿Cuándo llegará mi papá del crucero?
*Luca: Se supone que llegaría hace dos días…
*María Alejandra: No creo que haya pasado lo mismo que en el Titanic.
*Elisa: ¡Ay, no digas eso!
*Milagros: No creo porque en la época del Titanic todo era viejo…
*Luca: No, no era todo viejo. Sino que no había la misma tecnología de ahora y aparte que el Titanic chocó contra un iceberg… Donde navegaba el crucero donde estaban Diego y Nataly no hay icebergs.
*Mateo: ¿Y por qué por donde iba el Titanic sí habían?
*Luca: No tengo respuesta para eso.
*Diego Luca: ¿Y si lo llamamos?
*Luca: No. No hace falta. Él será quien llame. Ahora vayan a dormir que ya es tarde y mañana tengo que llevarlos a la escuela.
*(Todos los niños): ¡No!
Aunque no quisieron tuvieron que acostarse a dormir porque al día siguiente tenían que asistir a clases.

lunes, 29 de agosto de 2011

66º Capitulo

Al día siguiente, Sonohrina se encontró con Diego en el pasillo. Ambos estaban solos porque sus acompañantes aún dormían.
*Diego: Sonohrina, quisiera hablar contigo ahora que estamos solos.
*Sonohrina: ¿Sobre qué?
*Diego: Sobre los niños.
*Sonohrina: Bueno, está bien. Pero mejor es que vayamos a un sitio donde Lucio no nos encuentre.
*Diego: Está bien. Yo sé adónde podemos ir. (Sonrió) Sígueme.
*Sonohrina: De acuerdo…
Diego llevó a Sonohrina hasta uno de los camarotes que estaban vacíos porque las personas que los habían reservado no abordaron el barco.
*Sonohrina: ¿Cómo sabías que este camarote está vacío?
*Diego: El primer día le estaban quitando el polvo y la cama estaba tendida. Al día siguiente toqué la puerta y nadie respondió. Veo que la cama sigue intacta así que está vacío. (Cerró la puerta)
*Sonohrina: ¿Qué me quieres decir de los niños?
*Diego: Sonohrina, ellos te extrañan. Realmente sus personalidades han cambiado y a veces Milagros sufre ataques de asma porque te recuerda y nota tu ausencia en casa. Quisiera saber si puedes tenerlos contigo durante las vacaciones y yo me los quedo mientras estén en clases.
*Sonohrina: Diego, lo siento… Pero no puedo. A decir verdad, yo también los extraño. Pero en la casa en la que vivo con Lucio pasan cosas que no quiero que los niños vean. Tú sabes a lo que me refiero.
*Diego: Sí.
*Sonohrina: Y no quisiera que los niños sufran viendo que soy víctima de violencia doméstica. Por la parte monetaria no te preocupes. Yo estoy trabajando y estoy produciendo dinero.
*Diego: ¿Entonces por qué tienes que soportar los maltratos de Lucio?
*Sonohrina: Porque él no quiere dejarme ir. Él es algo obsesivo conmigo.
*Diego: Es injusto que tú no le hagas daño y él te maltrate o te trate como él quiera. Yo nunca te maltraté…
*Sonohrina: Pero maltrataste a un miembro de mi familia que sabes bien que no es del todo saludable. Él es propenso a un infarto y tú lo sabes.
*Diego: Y tú sabes que él ha jugado con mi paciencia desde que nos conocemos… ¿Y a Lucio cómo lo trata?
*Sonohrina: Ellos se llevan muy bien. Mi tío adora a todos los familiares de Camilo.
*Diego: ¿Puedo hacerte una pregunta?
*Sonohrina: Mientras no sea de mi vida privada con Lucio todo bien.
*Diego: Bueno, lo pensé mejor y serán dos, ninguna trata de eso. La primera, ¿por qué le caigo mal a tu tío?
*Sonohrina: Te parecerá una tontería, pero le caes mal porque él cree que tú eres el culpable de que yo haya terminado con Camilo. Pero lo que él no sabe es que Camilo y yo terminamos porque él se enamoró de otra.
*Diego: Y la segunda, ¿qué podría hacer para caerle bien?
*Sonohrina: Mira, no lo sé. Nunca he visto que él cambie de opinión sobre las personas que detesta.
*Diego: Cuando yo estuve en tu casa, yo traté de demostrarle que realmente te amo, pero él me respondió de manera negativa.
*Sonohrina: Diego… (Lo miró a los ojos)
*Diego: ¿Y sabes qué? (Respiró hondo) Aún sigo enamorado de ti.
*Sonohrina: ¿Qué estás diciendo? ¿Estás algo dormido todavía?
*Diego: No. Estoy bien despierto. Extraño cuando me decías Dieguito, cuando te veía en casa, tu sonrisa, tus besos, tus abrazos, tus caricias… Todo, Sonohrina.
*Sonohrina: ¿Hasta mis peros?
*Diego: Hasta tus peros… Ya no sonríes como antes.
Sonohrina no dijo nada ni sonrió mientras Diego le acariciaba las mejillas. Estaba como hipnotizada mientras veía a Diego a los ojos, pero luego reaccionó.
*Sonohrina: Diego, no. Mejor abre la puerta porque quiero irme.
*Diego: ¿Adónde?
*Sonohrina: No sé.
*Diego: ¿No extrañas lo que sentías por mí?
*Sonohrina: No. Tú ahora tienes a otra mujer a tu lado. Ella es hermosa, trabajadora…
*Diego: Pero tú eres más hermosa aún. Eres la chica más especial que conozco, Sonohrina, y no quiero perderte de nuevo.
*Sonohrina: ¿Por qué hablas así? Como si nos hubiésemos reconciliado.
*Diego: Porque no sabes lo cerca que estoy de convencerte a que volvamos a estar juntos… (La besó)
*Sonohrina: ¿Por qué haces eso? (Estaba enojada) Nosotros no volveremos a estar juntos, Diego. Entiéndelo. Tanto tú como yo estamos con otras personas y ya estamos divorciados.
*Diego: Pero tú no amas a Lucio, no eres feliz con él.
*Sonohrina: Ya llegará el hombre que me haga feliz.
*Diego: Según yo, ya llegó y lo tienes justo en frente de ti. (Sonrió)
*Sonohrina: No me da risa.
*Diego: Sonohrina, soy sincero contigo… Aún te amo como el primer día, como nunca he amado a una mujer. Para mí tú eres única, perfecta...
*Sonohrina: Dices todo eso para que yo vuelva contigo, pero a la hora de la verdad todo es mentira.
*Diego: (La besó) Si te beso, ¿crees que te estoy mintiendo?
*Sonohrina: Me estás mintiendo igual… Hagas lo que hagas… (Lo besó)
*Diego: ¿Todavía me amas? (La besó)
*Sonohrina: No puedo decírtelo… (Sonrió y lo besó)
Luego de unos minutos, se dejaron llevar por lo que sentían sin importarles nada. Aprovecharon que estaban solos en ese camarote donde no los encontraría nadie.
Mientras tanto, en Alemania, Yoe y Walter estaban disfrutando de su luna de miel. Aún Walter no había ido al acuario donde vivía el pulpo Paul, pero la estaba pasando muy bien con Yoe.
*Walter: Quisiera ir al acuario donde estuvo el pulpo Paul antes de volver a Italia… (Sonrió) Anda, Yoe… Vamos… Te prometo que la pasarás bien y que lo encontrarás interesante.
*Yoe: ¿Qué le voy a ver de interesante a un acuario donde estuvo un pulpo común y corriente que murió hace ya unos cuantos meses?
*Walter: Encontré en Internet que le tienen un monumento en el acuario, quiero ver ese monumento.
*Yoe: Bueno, está bien. Iremos.
Abordaron un tren y se fueron a las instalaciones del Sea Life Centre en Oberhausen. Cuando llegaron, compraron los tickets para poder entrar al acuario. Paseaban mientras miraban a los animales acuáticos dentro de sus peceras. Cuando llegaron a la pecera donde estaba el pulpo Paul, Walter vio el monumento que le construyeron al pulpo Paul.
*Walter: Yoe, mira… Me quiero fotografiar con el monumento al pulpo Paul. (Sonrió)
Yoe le tomó la foto a Walter con el monumento al pulpo Paul. Cuando volteó vio a un chico que le llamó la atención, pero sabía que no podía serle infiel a Walter. El chico se le acercó.
*(El muchacho): Disculpen, ¿son turistas?
*Yoe: Sí, estamos en nuestra luna de miel, ¿cómo lo sabía?
*(El muchacho): Porque veo a su esposo fotografiándose con el monumento al pulpo Paul y ya aquí nadie hace eso porque ya todos se fotografiaron con él. Mucho gusto, soy Mesut Ozil.
*Yoe: ¿Qué? (Sorprendida)
*Ozil: Sí.
*Yoe: Mucho gusto. Soy una admiradora tuya, me llamo Joelyn, pero dime Yoe.
*Ozil: ¡Genial! Es un placer conocerlos.
*Walter: Hola, sí. Soy Walter… Esposo de Yoe.
*Ozil: (Rió) Sí, mucho gusto… ¿De dónde son ustedes?
*Yoe: Yo soy venezolana y mi esposo es italiano.
*Ozil: ¿Entonces están viviendo en Italia o en Venezuela?
*Yoe: Estamos viviendo en Italia…
*Ozil: ¿Harán algo interesante ahora? Es que me gustaría invitarlos a un restaurante muy bueno de aquí, para que se lleven un gran recuerdo de su viaje a Alemania.
*Yoe: Bueno, por mí estaría bien… ¿Y por ti, Walter?
*Walter: Bueno, vamos… Estaría bien conocer un poco de la gastronomía alemana.
Luego de un rato conversando en el acuario, Walter, Yoe y Ozil se fueron al restaurante que Ozil les recomendó. Disfrutaron de la gastronomía alemana.
Mientras, en Italia, Luca y Rebeca llevaron a los niños al parque de diversiones para que se distrajeran un rato. La pasaron excelente, se tomaron muchas fotos y comieron algodón de azúcar.
*Luca: ¿Les gusta venir al parque de diversiones?
*Mateo: Sí. La pasamos bien aquí.
*Diego Luca: A mí me gustaría tener un parque de diversiones en casa… (Sonrió)
*Milagros: A mí también… (Sonrió)
*Maria Alejandra y Elisa: A nosotras ni se diga… (Rieron) ¿Podemos tener un parque de diversiones en casa?
*Rebeca: Bueno, hablen con Diego para saber qué opina…
*Mateo: De seguro papi también lo aceptará.
*Luca: Bueno, niños, ¿quieren ir a McDonald’s?
*(Todos los niños): ¡Sí!
Luca y Rebeca llevaron a los niños a McDonald’s y les compraron la cajita feliz con los juguetes de los pitufos.
*Diego Luca: Mami nos traía mucho a McDonald’s… La extraño.
*Mateo: Sí, yo también.
*Milagros: ¿Cuándo la llamaremos?
*Rebeca: Cuando regrese Diego del crucero.
*Mateo: ¿Y no podemos llamar a mi papá al celular y que él nos comunique con nuestra mamá?
*Rebeca: Ojalá se pudiera, pero… ¿Y si ella no lo ha visto?
*Luca: Nada perdemos con intentarlo. Llamaré a Diego a ver si puedo comunicarme con Sonohrina y se las paso.
Luca marcó el número de teléfono para comunicarse con Diego. Esperó un rato y le atendió, se oía cansado.
*Diego: ¿Sí? ¿Quién habla?
*Luca: Soy yo, Luca… ¿Acaso no viste el número?
*Diego: Luca… Dime…
*Luca: ¿Sonohrina está cerca?
*Diego: Sí, está aquí conmigo… Pero está durmiendo, ¿por qué?
*Luca: Porque los niños querían saludarla. Bueno, llamaremos luego. (Sonrió)
*Diego: De acuerdo. (Colgó)
Sonohrina se despertó un poco alarmada.
*Diego: ¿Qué pasó, Sonohrina?
*Sonohrina: Es que… No, Diego… Yo me voy. No sé qué hago aquí.
*Diego: Hablemos antes de que te vayas, por favor. No me dejes así… (Le tomó la mano)
*Sonohrina: ¿De qué quieres hablar? Que sea rápido porque no me puedo quedar contigo todo el día aquí.
*Diego: ¿Por qué no te puedes quedar todo el día aquí conmigo?
*Sonohrina: Es que Lucio me golpeará si no voy con él…
*Diego: Si te golpea, se meterá en un problema muy grande y serio. No deberías seguir con él si te golpea.
*Sonohrina: Es que yo no puedo decidir nada. Diego, él quiere que nos casemos… Él es quien me ha ayudado a conseguir trabajo y a tener el dinero que tengo ahora. Me ha dicho que lo único que yo puedo hacer para pagarle todos los favores y lujos que él me ha dado es hacerle caso y complacerlo en todo lo que él quiera.
*Diego: No te dejes manipular, Sonohrina… ¿Cuándo te manipulé? Cuando tú quisiste el divorcio, te lo di… Y ahora me arrepiento, Sonohrina… (La besó) Porque te adoro.
*Sonohrina: Yo te soy sincera, Diego. También te adoro. Fuiste un buen esposo, pero no volveremos porque yo me quedaré con Lucio.
*Diego: ¿Te quieres quedar con él aunque te maltrata y te manipula?
*Sonohrina: No tengo otra opción. Yo no tengo voz ni voto con él. No me deja opinar ni elegir lo que quiero para mi vida. Entonces no tengo otra opción que hacerle caso porque sino me golpea.
*Diego: Uno de estos días pagará todo lo que te hace.
*Sonohrina: ¿Por qué dices eso? Diego, no te metas en esto porque vas a salir perdiendo, es en serio.
*Diego: Ya verás… (Sonrió y la besó) Ven, salgamos juntos. No dejaré que él te golpee. (Abrió la puerta)
Salieron del camarote y fueron al corredor del crucero para conversar un rato. Parecía una pequeña sala. Al rato, llegó Nataly.
*Nataly: Amor, ¿quién es ella?
*Diego: Nataly… Ella es la madre de mis hijos y el amor de mi vida.
*Nataly: (Indignada) ¿Qué? ¿Y el amor de tu vida no soy yo?
*Diego: Nataly, cálmate.
*Nataly: ¿Cómo quieres que me calme si estás diciendo que el amor de tu vida es otra mujer?
*Diego: Sabes que siempre lo ha sido, así que no entiendo qué te sorprende.
*Nataly: Me sorprende que aún la quieras sabiendo que estoy esperando un hijo tuyo.
*Sonohrina: ¿Qué? (Algo molesta)
*Diego: Nataly, ¿qué estás diciendo?
*Sonohrina: Yo me voy, permiso. (Se levantó de la silla y se fue)
*Diego: Pero… (Miraba a Sonohrina) Nataly, ¿de dónde sacas eso?
*Nataly: No sé… Lo dije para que se fuera… (Rió) Aunque sería lindo si realmente estuviera embarazada de ti.
*Diego: Nataly, con esas cosas no se juega…
*Nataly: Ni con mi corazón. No me vuelvas a decir que el amor de tu vida es otra mujer.
En ese momento, Sonohrina entró al camarote donde estaba Lucio. Él estaba bañándose. Salió del baño y vio a Sonohrina acostada en la cama.
*Lucio: ¿Dónde estabas? Te busqué por todos lados y no te encontré.
*Sonohrina: Estaba paseando por el crucero.
*Lucio: Entonces explícame por qué tardaste tanto, no me avisaste y no te encontré por ninguna parte.
*Sonohrina: Es que estabas durmiendo.
*Lucio: Pudiste haberme despertado. No vuelvas a hacer eso. (Le golpeó la cabeza) Porque si vuelves a hacerlo, te mato. (Se levantó de la cama) Voy a caminar. No te vayas porque cuando vuelva hablaremos de un asunto muy serio. (Se fue)
Sonohrina comenzó a llorar en el camarote. Seguía acostada en la cama. No sabía si lloraba por Diego, por el maltrato de Lucio o por las dos cosas. Al rato, tocaron la puerta del camarote. Sonohrina se levantó de la cama y abrió la puerta.
*Sonohrina: ¿Qué haces aquí? Ve a atender a tu mujer… Al amor de tu vida.
*Diego: ¿Estuviste llorando?
*Sonohrina: (Respiró hondo) No.
*Diego: Sonohrina, Nataly dijo lo que dijo para separarnos, para hacerte sentir mal.
*Sonohrina: Con eso no se juega, Diego…
En ese momento, llegó Lucio y se paró delante de ellos.
*Lucio: ¿Más o menos qué es esto?
*Sonohrina: Lucio…
*Diego: Mira, te explico. Pasa que esta mujer y yo nos amamos y tú lo has dañado todo.
*Lucio: ¿Tú tienes un amante? (Enojado)
*Sonohrina: Lucio, yo tengo que…
*Lucio: ¡Cállate!
*Sonohrina: (Comenzó a llorar) Nunca me escuchas…
*Lucio: ¡Te dije que te calles! (Le haló el cabello) Eres una sucia.
*Diego: (Le tomó la mano para obligarlo a soltar el cabello de Sonohrina) No te voy a permitir que le hagas daño.
*Lucio: ¿Y quién eres tú para permitirme o prohibirme cosas? ¡No eres nadie! Suéltame.
*Diego: No te atrevas a golpearla.
*Lucio: Sí me atrevo. Mira… (La golpeó)
*Diego: ¡Sucio! ¿Cómo te atreves? (Lo golpeó)
*Sonohrina: ¡Basta! No se peleen.
*Lucio: No vuelvas a golpearme… Tú ni siquiera sabes quién soy yo.
*Diego: Ni me interesa saberlo.
*Lucio: Para que lo sepas soy un hombre de negocios muy importante en el mundo.
*Diego: Y a mí no me importa. Lo que no quiero es que maltrates a Sonohrina porque te las verás conmigo.
*Lucio: ¿Y quién es Sonohrina? (Rió)
*Diego: (Abrazó a Sonohrina) Es la mujer que amo… Y no voy a dejar que la sigas lastimando.
*Lucio: Amor, ¿tú prefieres irte con ese tipo?
*Sonohrina: Lucio, es que Diego no me maltrata, no me golpea, me escucha… Lo siento, sé que todo lo que hiciste por mí ha sido con todo tu esfuerzo, pero me maltrataste y he sido víctima de violencia doméstica por tu culpa.
*Lucio: ¿Entonces, te irás?
*Sonohrina: Sí.
*Lucio: Bien, ¿sabes qué? Vete… Me cansé de ti. Recoge tus cosas y vete con ese tipo… No me busques ni me llames más…
Sonohrina entró al camarote y guardó todas sus cosas para volver con Diego. Diego fue a hablar con Nataly para comentarle que se mudaría de camarote con Sonohrina y que no volverían a ser pareja. Ella aceptó aunque al principio se negó.

miércoles, 29 de junio de 2011

65º Capitulo

El día de cumpleaños de Sonohrina, Lucio decidió regalarle un viaje por las islas griegas. Lo que ella no sabía es que tendría un buen regalo de cumpleaños, porque Diego y Nataly estaban en el mismo crucero porque celebraban su aniversario de relación. La fiesta de bienvenida a bordo sería esa noche.
*Lucio: ¡Eres suertuda, amor! Tendrás la fiesta de bienvenida a bordo el día de tu cumpleaños. (La abrazó)
*Sonohrina: Sí…
*Lucio: ¿Qué tienes?
*Sonohrina: Nada…
*Lucio: Me parece que estás triste.
*Sonohrina: Pues, sí… Un poco… Pero no creo que lo entiendas.
*Lucio: Soy tu novio. Trataré de entenderlo.
*Sonohrina: Pero Lucio, tú no eres padre. Es que extraño a mis hijos.
*Lucio: (La abrazó) Deberíamos tener hijos juntos… (La besó)
*Sonohrina: No… No, Lucio es que… Yo no puedo tener más hijos…
*Lucio: ¿Por qué?
*Sonohrina: Por una enfermedad que sufrí. Esa enfermedad me dejó estéril.
*Lucio: ¿Cuál enfermedad?
*Sonohrina: Aplacia medular…
Lucio la soltó y fue a ducharse. Sonohrina esperaba no haberlo hecho enojar. Cada vez que lo hacía enojar, la golpeaba. Fue al baño para avisarle que saldría del camarote para caminar y respirar un poco de aire fresco.
*Sonohrina: Lucio, iré a caminar un rato…
*Lucio: Sí, tranquila… (Se oía bastante tranquilo)
Sonohrina salió a caminar. Iba caminando por el pasillo, se quedó sorprendida con lo que vio, creyó que era su imaginación, vio a Diego saliendo de su camarote, pero estaba muy lejos y él no alcanzó a verla. Sonohrina dudaba que fuera Diego. Decidió seguir su camino como si no hubiese visto nada.
Mientras tanto, Diego seguía caminando por el pasillo, sin saber que su camarote estaba en el mismo pasillo que el de Sonohrina. Comenzó a recordarla, a pensar en lo feliz que era con ella.
*Diego: (Pensó) Hoy es tu cumpleaños, Sonohrina… Y te extraño como no tienes idea… Recuerdo lo felices que fuimos en nuestro matrimonio. Lástima que todo terminara así tan feo.
Siguió caminando porque se encontraría con Nataly en la piscina. Cuando llegó a la piscina, vio a Nataly nadando un poco. No quiso nadar en la piscina, así que se recostó en una silla reclinable.
*Nataly: (Lo vio) Amor, ¿no quieres nadar aquí conmigo?
*Diego: No, no… Muchas gracias… (Sonrió ligeramente) Estoy bien aquí.
Pasaron cinco minutos y Nataly seguía nadando en la piscina. En ese momento, Diego vio a una chica que se le hizo bastante conocida. Se levantó de la silla reclinable y la siguió hasta el pasillo donde estaban sus camarotes sin que ella se diera cuenta.
*Diego: Sonohrina…
Sonohrina dejó de caminar y se quedó paralizada. No podía creer lo que le estaba pasando, con quién se había encontrado en el crucero.
*Diego: Sonohrina… Feliz cumpleaños… (La abrazó, pero ella no se volteó) No te hagas la loca, yo sé que eres tú.
*Sonohrina: (Respiró hondo) Diego… Por favor, aléjate.
*Diego: ¿Por qué?
*Sonohrina: No quiero problemas aquí y mucho menos el día de mi cumpleaños. Gracias por felicitarme pero no vuelvas a abrazarme…
*Diego: (La soltó) Pero, no entiendo…
*Sonohrina: Es mejor que no te enteres, que no lo entiendas… Mira, somos dos desconocidos, por favor.
*Diego: No puedo prometerte eso, Sonohrina.
*Sonohrina: Entonces voy a tener que tomar medidas drásticas contigo. No te hablaré ni te prestaré atención para que puedas prometerme lo que te pido y además que lo cumplas.
*Diego: ¿Acaso hay alguien que no quiere que nos veamos?
*Sonohrina: No te lo puedo responder.
*Diego: Sonohrina…
*Sonohrina: Diego, por favor, basta, ¿sí? ¡Basta! No nos conocemos… Déjame ir… (Se soltó y corrió a su camarote).
Esa noche, Sonohrina y Lucio bajaron a la fiesta. Sonohrina esperaba no encontrarse con Diego, aunque sabía que sería inevitable. Decidió quedarse sentada en la mesa junto a Lucio para que Diego no se acercara.
*Lucio: Mi amor, te daré tu regalo de cumpleaños… Esta vez es formal… (Sonrió y sacó una pequeña caja negra) Vamos a casarnos en dos meses. (Sacó el anillo que tenía adentro de la caja y se lo puso a Sonohrina mientras sonreía)
*Sonohrina: Bueno, no tengo elección.
*Lucio: Claro que no la tienes, yo he hecho muchas cosas por ti. Te di trabajo, casa, servicio a tus órdenes… No sé qué más darte, y todo ha sido con gusto… (La besó)
*Sonohrina: (Sonrió tímidamente) En cambio yo no te he dado nada.
*Lucio: Ya me lo darás, y me pagarás todo lo que te he dado… Nada de esto ha sido gratis y tú lo sabes.
*Sonohrina: Sí, bueno, comenzaré a ahorrar para pagártelo, ¿está bien?
*Lucio: ¿De qué hablas? (Rió) Yo no quiero dinero a cambio, si ya tengo más que suficiente. Estuve pensando lo siguiente, y llegué a la conclusión de que lo haré; amor, prepárate porque apenas volvamos a Venezuela empezarás un tratamiento médico para volver a salir embarazada, yo te lo pagaré y tendremos nuestros hijos… (Sonrió)
*Sonohrina: De acuerdo, está bien.
Sonohrina prefería estar de acuerdo o fingirlo porque sabía que Lucio se ponía violento cuando no se cumplía su voluntad. Ya varias veces ella había sido víctima de violencia doméstica por culpa de Lucio.
*Lucio: ¿Bailamos?
*Sonohrina: No. No, yo me quiero quedar aquí.
*Lucio: ¿Te sientes mal?
*Sonohrina: Sí, me duele un poco la cabeza.
*Lucio: ¿Quieres ir al camarote?
*Sonohrina: Vamos.
Lucio y Sonohrina se fueron al camarote. Mientras, Diego y Nataly aún estaban en la fiesta. Diego se quedó mirando a la puerta.
*Nataly: ¿Qué tienes, amor?
*Diego: Nada, ¿por qué lo preguntas?
*Nataly: Porque te veo mirando la puerta como si hubieses visto un fantasma.
*Diego: No es nada… No te preocupes… (La besó)
En Italia, Walter y Yoe empacaban para viajar por su luna de miel, irían a Alemania. Walter no se veía muy contento.
*Yoe: No te veo contento por nuestra luna de miel… ¿Qué tienes?
*Walter: Te lo diré aunque sea tonto… Pero yo quería ir a Alemania a conocer al pulpo Paul… Pero ya me enteré de lo que le pasó… Se murió.
*Yoe: ¡Walter! Eso pasó hace tiempo ya y vas a lamentarte por eso ahora… Además, a mí no me cae muy bien, y a ti tampoco debería caerte bien.
*Walter: ¿Por qué?
*Yoe: Él siempre escogía el equipo contrario a Italia, ¿te acuerdas que Italia no ganó ningún partido en el mundial pasado? Y era el campeón en el 2.006.
*Walter: Pues… Sí, tienes razón. Pero me gustaría visitar el acuario donde él estaba.
*Yoe: Bueno, si tanto quieres ir a visitar ese lugar, tiene que ser por algo… Ya en tres días viajaremos.
En la casa Fainello, los niños aún se preguntaban qué sería de la vida de Sonohrina. Ese día, Rebeca limpiaba un poco la casa y encontró una libreta que Diego había olvidado en casa. La hojeó y entendió por qué la había dejado. Esa libreta era de Sonohrina, ella escribía ahí todo lo que vivía y todo lo que pensaba. Decidió leer la primera página: “Parezco una tonta, pero… Luego de un año he vuelto a creer en el amor gracias a un chico que me ha regresado las ganas de amar a alguien, y ese es Diego Fainello. No quisiera que regresara a Italia porque sé que será muy difícil volver a verlo. De todas maneras, le daré mi número de teléfono (el que está anotado en la última página) para que me llame cuando quiera… Si es que algún día quiere hacerlo.” Dejó de leer la primera página y se fue a la última. Encontró un número de teléfono y lo marcó en el teléfono de la casa. Le atendieron al poco tiempo.
*(Mamá de Sonohrina): ¿Quiere hablar con mi hija mayor?
*Rebeca: Sí.
*(Mamá de Sonohrina): Es raro que ella no le haya avisado, pero ella no está viviendo aquí. Ella vive con su prometido en otra casa… Tiene mucho tiempo sin visitarnos. Según lo último que supimos, ella se fue en un crucero con su prometido para celebrar su cumpleaños.
*Rebeca: ¿Y usted tiene el teléfono de esa casa?
*(Mamá de Sonohrina): No. Quien lo tiene es mi hija menor. Te daré su número… ¿Tiene para anotar?
*Rebeca: Sí, dígame…
La mamá de Sonohrina le dictó a Rebeca el número de teléfono de la casa de Loredana.
*Rebeca: Gracias, señora. (Colgó y marcó el número de teléfono de la casa de Loredana)
*Federico: ¿Sí?
*Rebeca: Hola… ¿Es la casa de Loredana?
*Federico: Sí, aquí vive ella… ¿Quién habla?
*Rebeca: Soy Rebeca… Ella me conoce, pero quizá no me recuerde.
*Federico: Ya se la paso… ¡Loredana! Hay una llamada para ti…
*Loredana: ¿Sí? (Tomó el teléfono) ¿Aló?
*Rebeca: Hola, Loredana… Soy Rebeca. Quizá no me recuerdes. Pero yo sí me acuerdo de ti ¿Cómo estás?
*Loredana: Si tú me recuerdas, dame una pista para ver si yo también me acuerdo de ti.
*Rebeca: Soy la ex cuñada de tu hermana. La esposa de Luca Fainello.
*Loredana: ¡Ya me acordé! (Sonrió) Bueno, estoy bien ¿Y tú?
*Rebeca: Bien, también… Gracias.
*Loredana: ¿Y los niños?
*Rebeca: Bueno, ellos no muy bien. Te llamo porque quiero saber el número de teléfono de la casa donde vive tu hermana. Los niños quieren saber de ella. Conseguí tu número porque llamé a tu mamá y ella me lo dio diciéndome que tú tienes su número.
*Loredana: Sí, sí lo tengo, pero ella está de viaje en un crucero por las islas griegas y regresa en dos semanas. Si quieres te lo doy y tú la llamas luego.
*Rebeca: De acuerdo.
Loredana le dictó a Rebeca el número de la casa de Lucio para que ella pudiera hablar con Sonohrina. Se despidieron.
*Rebeca: Los niños se pondrán felices al saber esto.
Rebeca se dirigió al cuarto de juegos de la casa y encontró a los niños como hipnotizados por un programa de títeres en la televisión. Luca los acompañaba, pero le aburría el programa de títeres.
*Rebeca: Niños, lamento interrumpirlos, pero les tengo una buena noticia.
*Mateo: ¿Cuál?
*Rebeca: Conseguí el número de teléfono de la casa donde está su mamá. (Sonrió)
*Diego Luca: ¡Vamos a llamarla ahora! (Contento)
*Rebeca: Me temo que no podemos porque ella está de viaje en un crucero por las islas griegas.
*Luca: ¿Qué? (Sorprendido)
*Rebeca: ¿Qué pasó?
*Luca: Que ese puede ser el mismo crucero en el que están Nataly y Diego. Lo llamaré al celular para saber si la ha visto.
Luca tomó su celular y llamó a Diego para hablar con él. Atendió Nataly.
*Luca: Por favor, Nataly, comunícame con Diego.
*Nataly: Se está duchando, Luca. Cuando salga le diré que te devuelva la llamada.
*Luca: Por favor. Lo que tengo que decirle es urgente, pero no quiero dejarle el mensaje con nadie porque es algo que sólo nos incumbe a nosotros.
*Nataly: De acuerdo. Cuando salga le diré que te llame.
*Luca: Gracias. (Colgó)
Luego de media hora, Luca estaba en el jardín practicando con su guitarra, cuando sonó su celular. Era Diego.
*Diego: ¿Qué era eso tan importante que querías decirme?
*Luca: Diego… Rebeca consiguió el número de la casa donde Sonohrina está viviendo, pero no la ha llamado porque le comentaron que está en un crucero por las islas griegas… Quizá sea el mismo o la veas en alguna oportunidad.
*Diego: De hecho, es el mismo. Ella está en el mismo piso que yo, pero… La saludé y me contestó un poco fuerte. Ella me odia, Luca, y yo prefiero no insistirle… Al parecer está con otro y quizá se casen. Yo me casaré con Nataly, pero no sé cuándo.
*Luca: Rebeca piensa llamarla cuando regresen del crucero. No te imaginas lo contento que se puso Luki. Él la extraña, Diego… Y no creo que quiera a Nataly como nueva mamá.
*Diego: Yo estuve pensando en mandarlos a Veneuela un tiempo, quizás en vacaciones de Navidad, para que compartan con su mamá y la vean después de mucho tiempo. Ahora que la tengo cerca, le preguntaré qué piensa al respecto. Voy a su camarote y le pregunto. Te mandaré un email con la respuesta que me haya dado.
*Luca: De acuerdo. Hablamos. Gracias por llamar.
*Diego: Gracias a ti y a Rebeca por encontrar el número. Hablamos. Saludos a los niños. (Colgó)
Diego se dirigió al camarote donde estaba Sonohrina. No tuvo que caminar mucho sino llegar hasta el final del pasillo. Tocó la puerta y luego de dos minutos, Lucio le abrió. Estaba en bata.
*Lucio: ¿Qué desea?
*Diego: Hablar con la señora que lo acompaña.
*Lucio: ¿Y de qué? Yo no la autorizo para hablar con cualquiera.
*Diego: Pues, yo no soy cualquiera. Soy Diego Fainello y tengo algo muy importante que hablar con ella.
*Lucio: Bueno, ¿sabe qué? Voy a despertarla para que puedan hablar. Tuvo una noche muy intensa, tuvimos, quise decir… (Sonrió) Espere aquí. (Cerró la puerta) Amor, te buscan afuera… (La abrazó)
*Sonohrina: ¿Quién?
*Lucio: No sé… Un tipo que quiere hablar contigo. Te doy veinte minutos.
Sonohrina se levantó de la cama y abrió la puerta. Vio a Diego y se quedó callada. Cerró la puerta.
*Diego: ¡Sonohrina! (Sonrió) De veras no sabía que te encontraría aquí y no sabes lo feliz que eso me hace.
*Sonohrina: ¿Sólo quieres decirme eso?
*Diego: Veo que tú no estás feliz.
*Sonohrina: Pues, no. Y es porque estoy preocupada.
*Diego: ¿Preocupada? ¿Y por qué?
*Sonohrina: No te lo puedo decir. Dime qué es lo que viniste a decirme… El tiempo corre y tengo sólo veinte minutos para hablar contigo.
*Diego: ¿Y por qué veinte minutos?
*Sonohrina: ¡Diego, dime lo que quieres decirme y no preguntes tanto!
*Diego: Está bien. En casa los niños han cambiado mucho… No son tan comunicativos como antes. Creo que eso se debe a que te extrañan porque siempre preguntan por ti. Quería saber si estás de acuerdo en que ellos vayan a Venezuela a visitarte.
*Sonohrina: Te confieso que personalmente estoy de acuerdo, pero por mi pareja es mejor que no me visiten.
*Diego: ¿Por qué lo dices?
*Sonohrina: No puedo decirlo.
*Diego: Te prometo que él no sabrá que me lo contaste. Yo no se lo voy a comentar, ni siquiera le hablo… Vamos afuera y ahí hablamos.
*Sonohrina: No puedo quedarme por mucho tiempo.
*Diego: No le hagas caso, ven y me cuentas.
Sonohrina decidió ir con Diego. Llegaron a una parte en la que no había gente que escuchara lo que Sonohrina le contaría a Diego.
*Sonohrina: Es que cuando no obedezco a Lucio, él me golpea… Me maltrata físicamente. No llamo a la policía porque él no me permite usar el teléfono ni la computadora… No me permite contactar con la gente…
*Diego: (La abrazó) Si quieres, yo llamo a la policía.
*Sonohrina: No… No… Porque se supone que nadie debería saber lo que él me hace.
*Diego: ¿Te dejarás maltratar?
*Sonohrina: Pero sólo lo hace cuando no lo obedezco.
*Diego: Sabes que nunca debería maltratarte… Yo jamás lo hice ni lo hubiese hecho.
*Sonohrina: Pero golpeaste a mi tío, eso fue lo que causó nuestro divorcio.
*Diego: Sonohrina, yo fui feliz contigo. Si tú volvieras, te prometería no volver a cometer los mismos errores.
*Sonohrina: Pero no puedo volver. Ya estoy con Lucio y no puedo dejarlo. Si lo dejo, él me mata… Y no es mentira. A veces me dice que prefiere verme muerta antes que verme con otro.
*Diego: ¿Y qué le pasa a ese tipo?
*Sonohrina: Él dice que está muy enamorado de mí. Que por mí haría lo que sea… (Miró el reloj) Tengo que irme al camarote. Eso sí, él es muy puntual… Si no llego cuando él dice, me maltrata… No vemos. (Le besó la mejilla)
*Diego: Nos vemos.
Sonohrina se fue y Diego decidió también ir a su camarote. Tenía sueño.

jueves, 21 de abril de 2011

64º Capitulo

Al día siguiente, Nataly se despertó y se fue a la cocina para prepararse el desayuno. No se sentía muy bien luego de lo que hizo en la mansión de Ricardo, Julio y Yoe, Walter y Yoe se mudarían juntos luego de la boda eclesiástica. Diego despertó y encontró a Nataly sentada en el sofá con una expresión triste en su cara.
*Diego: ¿Qué tienes, amor?
*Nataly: Sé que lo que hice ayer no estuvo bien. Quisiera repararlo todo.
*Diego: No te preocupes. Todo se solucionará… (Le besó la frente y la abrazó)
*Nataly: Es que sabes bien que no me gusta que me comparen con nadie. Mucho menos con tu ex esposa. Ella te hizo daño al abandonarte con tus hijos.
*Diego: No me hizo tanto daño, porque los niños no se portan mal. Sólo se fue porque… Ella misma lo escogió. Ella tuvo varias oportunidades pidiéndome el divorcio y yo no quería dárselo porque la amaba.
*Nataly: Perdón si me meto, pero se lo diste porque ya no la amas, ¿cierto?
*Diego: La verdad es que se lo di porque ella siempre me insistía y me insistía que estaría mejor sin mí… Y… No te lo conté antes, pero no me llevaba bien con su tío. Un día hizo que perdiera la paciencia y tuvimos una pelea. Ella vio que yo golpee a su tío y se enojó como no tienes idea. Eso acabó con mi matrimonio.
En Venezuela, luego de unas horas, Sonohrina acababa de llegar a la casa acompañada de Lucio. Estaba cansada.
*Lucio: ¿Sabes?
*Sonohrina: ¿Qué?
*Lucio: Quiero ir al cine contigo esta noche.
*Sonohrina: Pero estoy cansada.
*Lucio: ¿Y cuándo quieres ir?
*Sonohrina: Mañana, ya que no tengo ningún compromiso pendiente.
*Lucio: (La besó) Me gustas mucho… (La abrazó y la besó de nuevo) Eres una buena novia… Haces lo que quiero y me obedeces… (La besó)
No le quedaba de otra, sabía que si no lo obedecía, él la maltrataría. Ya varias veces había pasado que él la maltrataba porque ella no hacía lo que él quería.
Entre tanto, en Italia, los niños jugaban tranquilamente en el patio de la casa.
*Diego Luca: ¿Ustedes creen que papá tenga el número de teléfono para poder hablar con mamá?
*Milagros: Ni idea, Luki.
*Mateo: Deberíamos preguntarle… Pero cuando no esté Nataly.
Luego de dos semanas, mientras Nataly se bañaba, Diego Luca, Milagros y Mateo entraron al cuarto de Diego.
*Diego: ¿Qué pasó, niños?
*Mateo: Queremos saber si tú tienes el número de teléfono para llamar a mami.
*Diego: No… ¿Por qué?
*Milagros: Queremos llamarla porque la extrañamos mucho.
*Diego: Niños, ya ella llamará cuando tenga tiempo y si es que su novio se lo permite.
*Diego Luca: Pero mi mamá no tiene novio…
*Diego: Lamento decirlo, pero sí tiene.
*Diego Luca: ¿Ella no nos quiere?
*Diego: No, no es eso. Lo que pasa es que los dejó en Italia conmigo porque sabe que ella no tiene suficiente dinero para mantenerlos. Pero ella los quiere mucho.
En eso, llegó Luca.
*Luca: Niños, ¿quieren ir al parque un rato?
*Mateo: ¡Sí! (Sonrió)
*Milagros: Tío, ¿tienes el teléfono para llamar a mami?
*Luca: Lo siento, en verdad no lo tengo.
*Diego Luca: ¿Crees que algún día llame?
*Luca: Pues, sí. De eso no hay duda.
Se fueron al parque con Luca con sus primas Elisa y María Alejandra y su hermana Victoria, que ya había crecido bastante y podía jugar con los niños, aunque sentada en una sábana que colocaban en el suelo.
*Rebeca: ¿Será que Sonohrina no llamará a los niños?
*Luca: Ni idea. Tú tienes su email, así que podrías mandarle un correo para saber si está bien y si llamará algún día a los niños o no quiere saber más de ellos.
*Rebeca: Cierto.
Pasó un mes, tanto Loredana y Federico como Yoe y Walter se estaban casando por la iglesia, obviamente en horarios y países distintos.
La ceremonia de bodas de Yoe y Walter tuvo lugar en un salón grande, debido al número de invitados, con mucha comida y muy buena música. Walter incluso compuso un tema para Yoe, llamado “Mi estrella fugaz”, y lo cantó en la boda, a Yoe le encantó pero a Ricardo le pareció cursi, mientras a Julio sí le gustó.
*Scarlett: Ricardo, tengo que decirte algo.
*Ricardo: Dime, amor.
*Scarlett: No creo que Walter sea un hombre malo, veo que él quiere mucho a tu hermana. Entiendo que como su hermano mayor quieres siempre cuidarla y que no le hagan daño, pero ella debe seguir su vida y con Walter estará bien.
*Ricardo: Para mí es difícil darle la razón a otras personas, pero admito que tienes razón.
*Scarlett: Mírala nada más. Es feliz, sonríe cuando está con Walter y él realmente la ama. Entonces no veo problema en que ellos estén juntos.
*Ricardo: Yo sólo quiero que ella sea feliz.
*Scarlett: Ve y dícelo. (Sonrió)
Ricardo se levantó de la silla donde estaba sentado y se dirigió adonde estaban Yoe y Walter.
*Yoe: ¿Qué pasó?
*Ricardo: Nada grave, es sólo que me alegra que tú seas feliz, es lo único que quiero. Sea con Walter o sea con quien quieras. Walter por favor, quiérela y cuídala mucho porque ella es una gran persona.
*Walter: Lo sé. Y claro que sí. (Sonrió) Por eso la amo… (Le besó la mejilla)
*Yoe: ¿Sólo me amas? (Lo abrazó) Yo te adoro. (Lo besó)
*Ricardo: (Rió) Lo mejor es que la adores, te lo recomiendo.
*Walter: (Sonrió) De acuerdo, yo también te adoro, amor… (La besó)
*Ricardo: Felicidades, en serio… Y Walter, hazla feliz.
*Walter y Yoe: ¡Gracias!
Por otro lado, Joseth estaba bailando con Marco.
*Marco: Ojalá que tú atrapes el ramo…
*Joseth: ¿Por qué yo en específico?
*Marco: (Sonrió) Ya verás, amor… (La besó)
Llegó el momento del ramo. Yoe lo lanzó y Joseth lo atrapó. Todos aplaudieron alegremente y Marco se acercó a ella.
*Marco: Pasó lo que quería, quería que tú atraparas el ramo porque quiero comunicar frente a todos que nosotros seremos los próximos en casarnos. (Sonrió)
*Joseth: ¡Qué lindo, amor! (Lo abrazó y lo besó) ¡Gracias! (Lo besó)
*Marco: De nada, amor. (La besó) Sabes que eres especial para mí… Muy pero muy espeial… Y que te adoro como nunca he adorado… (La besó)
*Nataly: (Abrazó a Diego) ¿Y nosotros cuándo? (Sonrió ligeramente)
*Diego: La verdad, no sé…
En realidad, Diego lo había pensado mejor y no quería casarse con Nataly. La quería mucho, pero no tanto como quiso a Sonohrina. Sabía, o sentía, que ella no volvería con él. Ella estaba en otro país, muy lejos de él; y además de eso, estaba con otro hombre.
*Luca: Yo creo que Diego no se quiere casar con Nataly. (Le susurró a Rebeca)
*Rebeca: Lo mejor es que no se case con esa mujer. Ella no quiere a los niños y sólo está interesada en el dinero y la fama de Diego.
*Luca: Lo único que yo tengo entendido es que ella no se parece a Sonohrina.
*Rebeca: Absolutamente. No se parece en nada.
En la boda de Loredana y Federico, habían también muchos invitados porque ambas familias eran algo grandes, no sólo las familias sino también sus amigos.
*Lucio: ¿Quieres tomar el ramo?
*Sonohrina: En realidad, prefiero que lo tome alguna de mis amigas.
*Lucio: Bailemos.
*Sonohrina: En verdad, estoy cansada...
*Lucio: Yo no. Pero si estás cansada, me buscaré con quien bailar. (Se levantó de la silla y se fue)
A Sonohrina no le importó la actitud de Lucio. Le daba igual que bailara con quien quisiera.
*Loredana: Hermanita, ¿no te importa que tu prometido esté bailando con Gabriela?
*Sonohrina: Que baile con quien quiera. Yo estoy cansada.
*Loredana: ¡Qué lástima que estés cansada! Quería que conocieras a alguien.
*Sonohrina: ¿A quién? Para ver si me distraigo.
*Loredana: Ya lo traigo… (Se fue a otra mesa)
Loredana empezó a hablar con un muchacho muy atractivo, estaba vestido y peinado muy elegante. Luego de un rato, se acercaron adonde estaba Sonohrina.
*Loredana: Te presento a Jack, es el primo de Federico.
*Sonohrina: (Sonrió) Mucho gusto.
*Jack: Igualmente… Así que tú eres la hermana de Loredana, creí que estabas en Italia.
*Sonohrina: De hecho lo estaba, pero me divorcié.
*Jack: ¿Tan joven y divorciada? Disculpa, ¿a qué edad te casaste?
*Sonohrina: Muy joven. A los 19 años.
*Jack: ¡Wow! A esa edad yo no pensaba todavía en casarme… ¿Y tienes pareja actualmente?
*Sonohrina: Sí, ¿y tú?
*Jack: La verdad, no. Pero espero que te vaya bien con tu pareja.
*Sonohrina: En realidad no me va muy bien. Yo quisiera terminar con él pero estoy obligada a estar con él… Es una larga historia.
*Jack: Dile la verdad. Dile que ya no quieres estar con él.
*Sonohrina: Se lo he demostrado y me golpea. Ya no sé qué hacer.
*Jack: ¿Cómo que no sabes qué hacer? Llama a la policía cuando te golpee.
*Sonohrina: No me deja usar el teléfono.
*Jack: De cualquier manera deberías notificarlo y denunciarlo ante la policía. Si vuelve a golpearte, escoge el momento indicado para ir a la oficina de policías más cercana… Quizá cuando esté durmiendo puedas hacerlo. Pero no lo calles.
*Sonohrina: (Sonrió ligeramente) Gracias.
*Jack: No me lo agradezcas… (Sonrió) Sólo hazlo, porque sino él terminará matándote.
*Sonohrina: Tienes razón.
Llegó el momento de lanzar el ramo. Loredana lo lanzó y lo atrapó Agatha. Ella tenía ya planes de boda con Adrián. Ambos estaban muy felices.